Alina
La pasé muy bien anoche, Nadia es la persona que quiero en mi vida, a su lado no hay problemas, ni discusiones, todo es distinto, incluso YO soy distinta, lo que siento por ella es mucho más fuerte que lo que he sentido alguna vez por alguien más, y no quiero perderlo, NO PUEDO perderlo.Desperté con la claridad del sol en mi rostro, qué incómodo, así que me levanté y con fuerza azoté la ventana que por alguna razón estaba abierta, sonreí cínicamente para mi misma y tomé una ducha para calmar mi enojo, luego me coloqué unos jeans ajustados y una polera holgada como de costumbre, solté mi cabello y salí de la habitación para desayunar, tenía mucha hambre.
-¡Hola Rachel! -dije sonriente a mi hermana al llegar a donde estaba-
-Alina!! -corrió y me abrazó contenta-
-Tengo hambre, ¿Qué cocinaste? -tiene 11 años y cocina mejor que yo, incluso ella es quien cocina cuando mi estupida "madre" no está-
-¡Si, date prisa que se enfría! -dijo emocionada, no sé porque se emociona tanto conmigo, yo la cuido y la quiero, pero a veces siento que me estima demasiado, y eso es un grave error-
Desayunamos en la cocina y todo se mantuvo en silencio, hasta que llegó el diablo, el mismísimo diablo, que quisiera que se quedara en el infierno y ardiera en las fuertes y flamantes llamas.
-Buenos días -dijo Rosa de mal humor como siempre-
-Buen día -respondió Rachel en un tono relajado-
Yo no respondí porque no me interesa responderle.
Ella me fulminó con la mirada, sé que si pudiese matarme ahora mismo lo haría, pero como no puede lo dejará para más tarde. Se sentó y continuó hablando, fastidiándome el día, ¡maldita sea!.
-Rachel, tienes que hacer la cena hoy, saldré por una situación de trabajo, llego mañana en la tarde -comentó Rosa-
-Reí sarcástica- - No me digas, ahora Rachel no es tu hija, es cocinera y sustituta de ama de casa, y creí que no podías llegar a sorprenderme -dije con sarcasmo y molestia en mi voz-
-No estoy hablando contigo, no te metas -respondió-
-Al diablo contigo, opino en lo que quiera y más si se trata de mi hermana -le respondí enojada-
-Y soltó una estúpida carcajada de esas falsas que le salen de no sé dónde, pero que me enojan como no hay cosa- -Hermana ejemplar, elígete para alcaldesa, digo, como eres un modelo a seguir... ah, sé me olvidaba lo responsable y amable que eres, con esa sonrisa derrumbas muros de oscuridad-
Me levanté enojada de la silla, la miré fijamente como si mi mirada pudiese quemarla, por un momento creí que iba a brincarle encima, pero me aguante por Rachel y me limité a quedarme allí.
-Rachel no va a hacer nada, ni siquiera nos vamos a quedar aquí -le dije enojada y tomando a Rachel del brazo, ella no había dicho nada en toda la disputa, pero se veía afectada-
- ¿Y a dónde piensas llevártela?, tú no me importas realmente -dijo con voz seca-
-A la mierda, nos vamos a la mierda, te dejo la dirección para que vayas luego, estupida - le respondí-
-Como quisiera que no hubieses nacido, mi vida sería mejor, créeme -dijo en un tono suave pero con molestia en su voz-
ESTÁS LEYENDO
Cadenas De Perdición (Girl x Girl)
RomanceLa madurez llega con un cambio que sucede para bien o para mal, y eso es algo que está más que claro, pero, ¿qué representa la pérdida de inocencia en algunas personas?, ¿cuál es el precio a pagar por crecer?, ¿el fin de todo es el comienzo de nada...