Capitulo 5

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Narra Rebeca:

Íbamos caminando por la calle, era por la tarde y todavía era de día pero ya anochecía. Yo llevaba la bolsa con el libro en la mano e iba dando saltitos mientras caminaba, estábamos llegando a casa y mientras Rina abría la puerta yo vi un hombre y su hija caminando de la mano y riendo, de pronto sentí mis mejillas mojadas y Rina preguntándome que ocurría. Entre a casa y me quedé de pie con la mirada perdida y llorando, Rina me limpiaba las lagrimas y me abrazaba e intentaba tranquilizarme.

Cuando por fin deje de llorar Rina intentó hablar conmigo.

Rina: Rebeca que ha pasado?

Rebeca: Tengo que contarte muchas cosas Rina, no puedo seguir ocultándote tantas cosas, pero no puedo explicártelo ahora, debemos cerrar todas las ventanas, no puede entrar la luz de la luna.

Rina: Pero si dicen que hoy habrá una luna llena preciosa.

Rebeca: Mas motivo todavía para cerrar.

Rina: Pero porque?

Rebeca: Pase lo que pase y veas lo que veas no dejes que entre la luz de la luna en esta casa.

Rina: Entendido.

Rebeca: Ayúdame a cerrar.

Rina: Vale yo cierro arriba.

Rebeca: Bien, cuando acabemos te explicaré que ocurre...

Entre Rina y yo logramos cerrar todas las ventanas a tiempo.

Rina: Ahora, me explicas que ocurre?

Rebeca: Lo que ocurre es que...

Un fuerte golpe me interrumpió, sonó como si alguien estuviera intentando romper la puerta a golpes. Me puse delante de Rina, la cual retrocedió.

Sin previo aviso la puerta se rompió y se vio entrar una gran bola negra con un pelaje abundante.

Narra Ocarina:

Aquella cosa negra se levanto y se giró hacia nosotras, parecía que miraba a Rebeca la cual se mantenía delante de mi a una distancia prudencial de la puerta.

No creía lo que estaba viendo, era un hombre lobo o al menos lo parecía, debía medir unos 2 metros y tenia el cuerpo recubierto de pelo negro, con unas orejas enormes y unos ojos de color miel brillante. Miraba fijamente a Rebeca. En un abrir y cerrar de ojos Rebeca creció hasta tener una altura descomunal y empezó a crecer pelaje castaño por todo el cuerpo hasta tener la misma apariencia de aquella criatura que parecía sacada de una pesadilla. Sentí como alguien me empujaba hacia atrás y vi a las dos criaturas saliendo de mi casa enzarzadas en una pelea encarnizada. Intenté correr tras ellos pero mi cuerpo no respondía. Escuche un aullido ahogado como si alguien pidiera ayuda. Cuando por fin logré moverme corrí fuera de la casa y los vi en el parque que había al lado de mi casa. La criatura negra estaba tirada en el suelo mientras que la castaña estaba a cuatro patas respirando forzosamente. Cuando me quise dar cuenta había un líquido negro tirando a rojizo en el suelo bajo la criatura negra que tras agonizar durante un largo rato ya no se movía. Estaba amaneciendo y la criatura castaña volvió a su estado original volviendo a parecer Rebeca pero con la ropa rota y cubierta de algo que parecía sangre, a partir de ahí no se que ocurrió.

Narra Rebeca:

Vi como Rina caía al suelo y rápidamente fui a llevarla a casa, la dejé en su cama mientras yo reparaba la puerta que en 10 minutos volvió a la normalidad y limpié el salón el cual había quedado destrozado en la pelea. Cuando despertara le contaría que había ocurrido.


Hola queridos lectores, he decidido que a partir de ahora subiré un capitulo por semana y lo subiré los lunes. Aún así, si queréis que suba mas a menudo pedídmelo en comentarios o por mensaje, agradecería que votaran si les esta gustando y que comenten lo que os gusta de la novela o como podría mejorarla. Gracias :D

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