Capítulo 10

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Una interesante historia

Minho nunca había estado tan ocupado como en ese momento, tenía miles de compromisos con el grupo, entrevistas, presentaciones, ensayos y sin fin de cosas más y para colmar su agenda del día había dispuesto casi dos o tres horas para Han, él se había comprometido a enseñarle cómo vivir en el mundo humano, así que cada vez que llegaba a casa le enseñaba algo nuevo.

Lo primero que le enseño fue a llamar y contestar el teléfono de la casa, así podría llamarlo si necesitaba algo, también le enseñó a manejar el horno microondas para calentar la comida que él dejaba debidamente preparara antes de irse. También una noche en la que salieron a altas horas Minho aprovechó para enseñarle a cruzar la calle, diciéndole que solo podía cruzar cuando el dibujo de la persona estuviese en verde así no pasaría por algún accidente.

Han era muy inteligente y tenía una excelente memoria, cada cosa que el mayor le enseñaba él la grababa debidamente.

Ya había pasado un par de días desde que Han había llegado al departamento de Stray kids y poco a poco todos se acoplaban a la presencia del chico, incluso habían visto una que otra película juntos para que el chico perdiera la timidez con el grupo, esto lo había propuesto Bangchan en un intento por unirlo al grupo.

Una noche, Minho y Bangchan había llegado realmente tarde, Han esperaba a Minho en la sala envuelto en una cobija con una de sus sudaderas puesta mientras veía un programa de variedades con chistes y referencias que Han no entendía pero aún así era entretenido.

— ¿Que haces aún despierto? — Minho se acercó a Han quien le observaba con una gran sonrisa

— Te esperaba — confesó con todavía aquella sonrisa plasmada en el rostro — ¿podemos comprar ese... helado que me diste la última
Vez?

Minho rió y miró a Bangchan a su lado quien le sonrió y levantó una ceja casi burlándose de su compañero.

— Ve, cómprale el helado, ha estado esperando mucho tiempo, cuando vuelvas vas al estudio y trabajaremos en la canción.

Minho se acercó a Han y le quitó la cobija de encima.

— Vamos

Han dio un salto de emoción y salió del departamento con Minho a su lado.

Minho se había acostumbrado totalmente a la presencia de Han, era como si lo conociese de siempre.
Cuando lo veía y este sonría le daba una paz increíble a su corazón, no importaba lo cansado que estuviese el hecho de ir a comer un helado con el menor lo hacía realmente muy feliz.

Cuando a Han se le iluminaban los ojos eligiendo el sabor de helado hacía que Minho se sintiera feliz, la emoción del chico lo hacía feliz.

— No se como pude vivir toda mi vida sin esto — Han lamía el helado con una felicidad infinita.

— ¿Cuánto tiempo has vivido? — preguntó Minho con curiosidad

En el libro que había leído decía que los habitantes de Siryus eran inmortales, eso quería decir que vivían demasiado tiempo, esto lo hizo pensar en cuanto tenía Han existiendo.

Han dejo de lamer el helado e hizo una mueca de recordar algo mientras golpeaba levemente el helado en sus labios.

— No sé cuánto tiempo es en tiempo humano — confesó — nosotros medimos nuestro tiempo en lunas vividas. Verás — Han volvió a lamer el helado y luego lo dejo a un lado mientras seguía caminando con Minho a su lado — La luna existe en nuestro mundo también — miró la luna y la señaló — solo que no sale todas las... noches como aquí, tarda bastante tiempo en salir, así que cada vez que sale deja un marca en nuestra piel, esto marca la edad que tenemos — trato de explicar.

STRANGER - |MINSUNG|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora