《 𝐶𝑎𝑝í𝑡𝑢𝑙𝑜 7 》

661 39 2
                                    

Claro, sin problema. Aquí está el texto revisado:

Mordí un pedazo de los macarrones, sintiendo como los chicos a mi alrededor me observaban, sus ojos llenos de expectación mientras intentaban formular palabras.

-Harmony, ve-veras...- comenzó Bill, su voz temblorosa interrumpiendo el silencio. -Faltan tres días para el verano y, según entendemos, te levantarán el castigo.- Continuó, su rostro iluminándose con una mezcla de esperanza y ansiedad.

-Queremos pasar la tarde después de clases.- terminó el bajito, sus ojos brillantes de expectación.

-Claro, todo depende de que me levanten el castigo.- Respondí, volviendo a sumergir mi tenedor en el plato de macarrones y llevándolo a mi boca.

-Genial, ahora solo falta planear a qué lugar iremos.- Dijo el chico de rizos, una sonrisa juguetona bailando en sus labios.

De repente, las miradas de los chicos se desviaron hacia el portón de la cafetería, una expresión de sorpresa pintada en sus rostros. Giré mi cabeza, curiosa por ver qué había captado su atención. Tragué el bocado de macarrones, mi pulso acelerándose al ver a los cuatro bravucones entrando a la sala. Parecían sacados de una película, con su actitud desafiante y su aire de superioridad. La atmósfera en la cafetería se volvió tensa, todos los ojos estaban puestos en ellos mientras avanzaban.

-Esta noche se estrena 'Viernes 13' en el cine.- Habló el chico de las gafas, rompiendo la tensión que flotaba en el aire. -Todos son unos miedosos.-

-No voy a negar que me da miedo, pero aún así estoy castigada.- Respondí, tratando de restarle importancia al asunto y mantener la calma.

Mis ojos volvieron a posarse en aquel grupo de adolescentes. Se acercaron a unos chicos más jóvenes, no pude evitar sentir un nudo en el estómago. Su propósito parecía ser arrebatar la dignidad a las personas, y eso me enfurecía.

Hockstetter mantenía esa sonrisa arrogante, esa que siempre me ponía los pelos de punta. Sus ojos se movieron por la sala hasta encontrarse con los míos, y me sorprendió lo rápido que me localizó entre la multitud. Entrecerré los ojos en un gesto desafiante, sin apartar la mirada.

Él levantó las cejas, sonriendo de lado, y llevó su dedo a la boca. El muy desgraciado quería provocar furia en mí, y por un momento, casi lo consigue. Mordí mi labio, sintiendo la vieja cicatriz que allí residía, un recordatorio constante de esa noche........

Richie se acercó, su oído casi rozando mi cabeza, mientras mantenía una mirada desafiante hacia el chico de pelo negro.

-Ya veo con quién te enrollaste.- Susurró con una voz tan baja que apenas podía oírla.

Sentí cómo el calor subía a mis mejillas, tiñéndolas de un rojo intenso. Volteé rápidamente para mirarlo, mis ojos abiertos de par en par.

-¡Richie, no!...- Exclamé más alto de lo que pretendía. Hice una pausa, tratando de controlar mi tono de voz. -No me he enrollado con nadie, idiota.- Susurré, la irritación evidente en mi voz.

-Sí, claro. Hockstetter te hizo esto.- Dijo, tocando la cicatriz de mi boca con un dedo, lo que me hizo retroceder instintivamente. -Escuché que le gusta la violencia, seguro se masturba pensando en cadáveres.- Agregó con una mueca de disgusto.

-Richie...- Suspiré, sintiendo un nudo en el estómago. -Fúmate algo, te vendrá bien.- Le sugerí, tratando de cambiar de tema.

Me recosté en mi silla, cruzando los brazos sobre el pecho. Noté que Patrick fruncía el ceño, su sonrisa se desvaneció y el ambiente se volvió tenso. Me miraba con una expresión confusa, como si estuviera tratando de descifrar un enigma. La diversión había desaparecido, dejando a su paso una atmósfera cargada de seriedad.

𝑊𝑒𝑙𝑐𝑜𝑚𝑒 𝑡𝑜 𝐷𝑒𝑟𝑟𝑦 |𝑃𝑎𝑡𝑟𝑖𝑐𝑘 𝐻. 𝑓𝑎𝑛𝑓𝑖𝑐| 𝙥𝙧𝙤𝙘𝙚𝙨𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora