𝑊𝑒𝑙𝑐𝑜𝑚𝑒 𝑡𝑜 𝐷𝑒𝑟𝑟𝑦 |𝑃𝑎𝑡𝑟𝑖𝑐𝑘 𝐻. 𝑓𝑎𝑛𝑓𝑖𝑐| 𝙥𝙧𝙤𝙘𝙚𝙨𝙤

《 𝐶𝑎𝑝í𝑡𝑢𝑙𝑜 13 》

Me recosté sobre una roca, observando cómo los chicos comenzaban a desvestirse hasta quedarse en ropa interior. Parecía que habían acordado previamente su atuendo, pues todos llevaban puesto calzoncillos blancos.

- ¡¿Quién tuvo esa tonta idea?! -pregunté desde lejos, luchando por contener la risa que amenazaba con escapar de mis labios.

- ¡¿De qué hablas?! -respondió Bill. Después de un par de segundos, todos entendieron a qué me refería y comenzaron a discutir sobre quién había tenido la idea original.

Aunque habíamos venido al acantilado para refrescarnos, no planeaba quitarme la ropa; simplemente me quedaría observando cómo ellos hacían el ridículo intentando lanzarse desde un lugar del que, claramente, no se atreverían a saltar.

De nuevo, puse mi atención en la mochila que Ben me había encargado. Por aburrimiento, comencé a revisarla y encontré recortes de periódicos sobre accidentes en Derry. Me sumergí más en la lectura, sintiendo cómo mi expresión cambiaba a una de miedo y mis mejillas palidecían.

Entre todos los recortes, uno en particular llamó mi atención. En él aparecía el globo que había visto varias veces, pero solo era eso, hasta que noté una figura parecida a un payaso. Mi respiración se aceleró, y mi piel se erizó. Ahora sentía que no estaba sola, y no solo lo decía por los chicos.

Pensé que nunca iba a salir de aquel momento de tensión, hasta que la voz de Richie me devolvió a la realidad.

- ¿Quién salta? -Su voz resonó por el lugar.

Me levanté, todavía algo desconcertada, y caminé hacia ellos.

- ¡Voy yo! -La pelirroja captó la atención de todos. Bajó de su bicicleta y se quitó el traje, dejándolo tirado por ahí. Corrió hacia nosotros y, sin pensarlo, se lanzó al vacío.

La decisión de los chicos de lanzarse al agua pareció contagiosa, y uno tras otro, comenzaron a saltar desde el acantilado. Bill fue el primero en seguir a la pelirroja, seguido de Richie y los demás. Sin embargo, yo me quedé sola en lo alto, sin intención de unirme a ellos.

Me senté en el borde del acantilado, disfrutando de la vista panorámica. Después de unos segundos, los chicos parecieron darse cuenta de que no iba a saltar y continuaron divirtiéndose, lanzándose agua y jugando entre ellos.

Mi mirada se posó en Ben, recordando lo que había encontrado en su mochila. ¿Por qué tenía esos recortes de periódicos?

Me giré hacia atrás y volví a mirar la mochila, debatiendo si debía revisarla de nuevo. No quería hacerlo con malas intenciones, pero la curiosidad me carcomía.

Un crujido entre los árboles me sobresaltó, y rápidamente levanté los pies, evitando la gran caída que me esperaba. Me puse de pie y me sacudí la ropa, caminando cautelosamente hacia la fuente del sonido.

- ¡Mierda! -exclamé al ver a un conejo correr por ahí. Estaba tan nerviosa que ese pequeño movimiento había sido suficiente para acelerar mi corazón.

Mi atención siguió al conejo, que parecía estar huyendo de algo. Fue entonces cuando escuché un segundo crujido, pero esta vez provenía de unos pasos cercanos. Me detuve al ver al joven de cabello azabache, que también se había detenido al notar mi presencia.

- ¿Patrick? -dije con el típico tono nervioso que tenía cuando él estaba involucrado en algo. Involuntariamente, mi mente comenzó a imaginar escenarios de huida por si intentaba atacarme, algo que solía hacer.

El ambiente se volvió tenso y mi corazón latía con fuerza en mi pecho. A pesar de la situación, traté de mantener la calma.

- ¿Qué haces aquí? -preguntó él con un tono amenazante que parecía ser parte de su personalidad.