𝟏𝟓-𝑪𝒐𝒏𝒇𝒓𝒐𝒏𝒕𝒂𝒄𝒊𝒐́𝒏

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Espero pacientemente a que Draco pasará por el pasillo hacia el Gran Salón para interceptarlo, oculto bajo su capa. Draco apareció y Harry no dudo antes de agarrar su mano tomando desprevenido al Slytherin y arrastrándolo a un salón vació.

— Es muy temprano para tus perversiones. — Dijo Draco soltándose y cruzándose de brazos mientras Harry se sacaba la capa.

— No es por eso que te traje aquí. —Dobló y guardó su capa debajo de su camisa.

Draco le alzó una ceja.

— De acuerdo, ser de pureza y castidad. ¿Que sucede? — Bromeó sonriendo.

Harry lo miró con seriedad.

El Slytherin dejó de sonreír.

— ¿Porque lo hiciste, Draco? — Harry preguntó dando un paso más cerca.

Draco se tensó y frunció el ceño.

— ¿Hacer que? — Contestó.

Harry suspiró y miró a otro lado, sintiendo pesar.

— Lo que le pediste a Snape. ¿Porque te pusiste en ese peligro?

Draco retrocedió y lo miró con ojos abiertos.

— ¿Tú...

— ¿Estuve allí? Si. Se que no debí espiarte, pero estaba preocupado y te fuiste a solas con Snape. Tenia que asegurarme que estuvieras bien.

Draco se paró firme, su expresión cambió a enojo.

— No tenías derecho.

— Solo quería-

— ¡No tenías derecho, Potter!

Draco se descruzó los brazos y dio un paso adelante, Harry dio un paso atrás.

— ¡Lo se! ¡Lo siento! — Elevó la voz a la defensiva.

Draco lo miró con enojó y frustración.

— Era privado. — Dijo en tono herido.

— Draco — Harry se acercó y el rubio desvió la mirada. — Yo solo ... tuve preocupación, se que un mortifago puede ser cualquiera y no se las lealtades de Snape. Porfavor...

Draco inhaló y exhaló profundo antes de volver a mirarlo.

— ¿Oiste todo?

Harry asintió.

— Si. Se que dejaste de lado a Voldemort y abandonaste a tu familia.

— ¡No los quiero abandonar!

— Draco, no puedes estar con ellos si están del lado de Voldemort.

— ¡Se que no puedo volver a casa, ya lo se! Porque mi Padre me entregaría al señor oscuro como un traidor. Pero son mis padres.— Lo último lo dijo con firmeza, para recalcar el hecho.

Harry lo miró con tristeza.

— Cariño, se que quieres a tus padres.

— Sin importar a quien apoyen. — Draco recalcó.

Harry hizo una mueca con la boca.

No le importaba que Draco aun fuera leal en amor a sus padres. El también amaba a sus padres. Y aunque los suyos eran diferentes y sus infancias fueron diferentes. Ese apasionante cariño que Draco podía tener a sus seres queridos solo era otro atributo que Harry apreciaba de él.

Se acercó más hasta poder poner sus manos en los brazos del rubio.

— ¿Sabes en el peligro que te has puesto? — Lo miro a los ojos. — Tus padres se darán cuenta tarde o temprano que cambiaste de bando.

Draco apretó la mandíbula.

— Me preocupa más que los Slytherins con padres Mortifagos se den cuenta, duermo en la mazmorras, ¿recuerdas? Cualquiera podría meterse en mi habitación mientras duermo y intentar matarme.

Harry apretó su agarré.

— Eso nunca.

— Es una posibilidad. Si no tengo cuidado y juego mal mis fichas.

— Entonces actúa, finge que sigues de su lado. Hallaré una forma de protegerte. — Harry frunció el ceño. — Mientras, vive.

Draco intentó sonreír.

— Eres un Romántico.

Harry resoplo.

— Solo no seamos Romeo y Julieta.

Draco esta vez sonrió.

— ¿Los muggles que erróneamente se creyeron muertos y se suicidaron? — Dijo. Harry lo miró divertido. — ¿Que? Pongo atención a las clases Muggles.— Harry le alzo una ceja — Aveces...

El Gryffindor se carcajeó.

— Ok, experto muggle. — Se burlo.

— No me digas asi, por favor. — Draco cerro los ojos consternado.

— Bien. Tendré que hablar con Dumbledore si estas dispuesto a entrar por completo a mi bando.

Draco gruño.

— Agh, odio tener que seguir ordenes de ese viejito, no me fio de el.

Harry se encogió de hombros.

— Todavia no lo he hablado desde que llegué. Hermione y Ron han hablado por mi. Pero supongo que si es el Jefe de la luz, tengo que pedirle que entres también.

Draco se burló.

— Dudo que quiera aceptarme en su bando. Soy un Malfoy, hijo de un Mortifago. Dira que es una trampa.

Harry subió sus manos al rostro del Slytherin.

— El te va aceptar. Porque tu eres la razón por la matare a Voldemort.

Draco y Harry se miraron a los ojos.

— Pero... pensé que lo hacías por el mundo mágico y por tus seres queridos. — Draco tocó las manos que sostenían su rostro.

Harry negó.

— Se te olvida que este no es mi mundo, que no crecí aquí. Mi vida fue diferente y mi manera de pensar también. Soy un Gryffindor valiente y terco, y si voy a pelear por algo importante será por la persona que amo. Ese eres tú, Draco.

Draco sonrió.

— Más te vale ganar, Potter.

Harry lo besó.






El otro Harry pone altas expectativas.
Me pregunto como compensará para llegar a la barda el Harry original.

𝐌𝐮𝐧𝐝𝐨 𝐏𝐚𝐫𝐚𝐥𝐞𝐥𝐨 -𝐻𝑎𝑟𝑐𝑜/𝐷𝑟𝑎𝑟𝑟𝑦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora