EN BUSCA DEL HEREDERO

CAPITULO 15

Betty se estaba dejando llevar por él, siempre perdía el norte cuando estaba a su lado y esta no iba a ser la excepción. Vio que él comenzaba a arrastrarla al sofá y cuando choco con este Armando trato de recostarla, pero ella no se lo permitió, así que puso sus manos en su pecho e hizo que tomara asiento y sin dudarlo se sentó a horcadas en él. Por supuesto que él no dudo en recibirla en sus brazos, para luego comenzar con una nueva danza de sus labios. Pero cuando ella se separó para besar su cuello, solo pudo inclinar la cabeza hacía atrás y jadear quedito, tampoco era la idea que los descubrieran

Alejandra solo apretaba los puños ante la escena que estaba presenciando y a pesar de que le molestaba no podía apartar los ojos. Vio que él acariciaba su espalda lentamente hasta posarlas en sus nalgas y atraerla aún más hacía él, escuchando claramente el gemido de ella, que de un momento a otro pareció transformarse, se separó con rapidez y ante la sonrisa complaciente de él, le abría la camisa de un tirón, logrando de aquel modo que más de un botón saliera disparado. Vio que se inclinaba nuevamente para pasar lo que creía la lengua en su pecho, para darle paso a un gran gemido de él, a la vez que movía las caderas de manera incesante seguramente para liberar un poco su propia excitación

Alejandra sentía que la sangre le hervía al presenciar aquello, así que sin pensarlo mucho iba a ingresar cuando sintió que la tomaban de un brazo, levanto la mirada dándose cuenta de que se trataba de Mario

Este llevaba un rato observándola y sin siquiera que ella se diera cuenta se ganó tras su espalda, cuando le llego un "Gemido". De primero se sorprendió, pero se imaginó de inmediato que Armando estaba en la oficina con su esposa y de seguro "Pasándolo muy rico" pero cuando vio que ella dio un paso al frente supuso que los iba a interrumpir, así que no dudo en tomarla de un brazo y apartarla para terminar por cerrar la puerta

AZ: -soltándose- Se puede saber ¿Qué haces?

MC: Sacándote de ahí, no es claro... por lo que veo ahora escuchas tras las puertas ¿No?

AZ: No, solo necesito hablar con Armando

MC: Ya, piensas que soy tonto, se lo que estabas haciendo... Mira que eres una degenerada -burlista-

AZ: Cállate idiota, que no sabes nada

MC: Claro que se, no es que andas detrás de los pasos de Armando, que le dices a todos de que muy pronto volverá contigo, ay mija pensé que tenías dignidad

AZ: ¡QUE TE CALLES TE DIGO, NO TE LO DIGO MÁS IMBECIL!

Alejandra lanzo ese grito, porque deseaba que Armando la escuchara, por lo tanto dejara de hacer el amor con esa mujer. Mario voltio los ojos y se cruzó de brazos, estaba muy claro que su amigo la hubiese escuchado y por supuesto iría a ver lo que sucedía "Sobre todo porque lo fueran a descubrir" y no es que escondieran algo, pero no era el lugar para esas cosas mucho menos con tanta gente rondando

Betty mordía muy entretenida el cuello de Armando, mientras él solo era capaz de gemir con fuerza y seguir impulsando sus caderas hacía su intimidad, cuando les llego un grito que los hizo de tenerse y prestar atención, notando que provenía de la sala de juntas.

Se miraron a los ojos con pesar, porque no podrían terminar lo que habían empezado y lo tendrían que hacer un poco más tarde, porque él no se quedaría con las ganas "No señor", la beso a la vez que la tomaba desde la cintura, para sentarla en el sofá y como pudo se arregló la camisa, aunque no podía ocultar otra parte de su cuerpo.

Abrió la puerta de golpe viendo que se trataba de Mario y Alejandra, la cual tenía una mirada de ¿Furia? Y su amigo una mirada ¿Picara? ¿Qué es lo que estaba pasando con ellos? De pronto vio que su amigo se llevaba un dedo a su ojo derecho y él entendio el mensaje, los estaban espiando