♔︎𝕯𝖊𝖈𝖊𝖓𝖉𝖊𝖓𝖙𝖘♕︎

♔𝙵𝚒𝚗𝚊𝚕 𝙵𝚎𝚕𝚒𝚣♔

La mañana de los recién casados fue muy linda, despertaron juntos, desayunaron en la cama entre risas y mimos pero toda burbuja de felicidad tiene su fin.

—¡Su Majestad, su Alteza!

—Ryder tranquilo ¿qué pasa?

—La Reina y sus hermanos los buscan.

—Bien, ya vuelvo Izu.

—Ambos deben ir, en especial usted su Alteza. —dijo viendo al pecoso.

Extrañado acató la orden, no sin antes ambos cambiar sus pijamas, por alguna razón su corazón sentía cierta intranquilidad y el ver como Fuyumi los esperaba impaciente no mejoró esa sensación.

—Por fin están aquí, rápido esto es urgente.

—¿No puedo estar tranquilo ni siquiera luego de mi boda? —suspiró el bicolor.

—Creeme que quieres resolver primero esto.

Al entrar en aquella habitación toda la familia Todoroki los esperaba, menos Dabi que hacía menos de un día se había ido, pero todos parecían tener penumbra en sus ojos y eso los asustó.

—Madre ¿qué es lo que sucede?

—Hay algo que deben saber, se decidió hace unas horas.

—¿Qué?

La mayor se vió con sus hijos mayores.

—El consejo decidió cerrar la barrera de la isla para siempre, sin posibilidad de entrar o salir.

—¡¿Qué?! Soy el Rey debieron consultarme primero.

—Sigo teniendo más poder aquí.

—¿Entonces estuviste de acuerdo?

—Hijo con todo lo que ha pasado...Touya y su amigo lograron salir sin problemas de la isla, el miedo que causó Uraraka y la llegada de Hades tienen a todos asustados.

—¡Allí viven personas que necesitan nuestra ayuda no pueden encerrarlos y acabar con ellos!

—Shoto te lo dije, ser Rey significa sacrificar tus ideales por el bienestar de tus súbditos.

—¡Dile que enloqueció, está matando a esas personas! —gritó Natsuo colérico.

—Pienso lo mejor para mí pueblo.

—¿Y ellos no son tu pueblo mamá?

—Ellos...

—¿Izu...? di algo tú eres quien más los entiende. —susurró la chica.

El peliverde se encontraba en shock, ¿cerrar la barrera, ni él ni sus amigos volverían a ver sus familias y amigos otra vez? Y esos niños que esperaban tener una vida mejor.

—Estoy de acuerdo.

—Pero Izuku- —intentó persuadir el hermano mayor.

—La Reina tiene razón...soy un chico de la isla y sé de lo que pueden ser capaces.

—Creí que tú más que nadie los defendería, estar aquí te lavó el cerebro. —Natsu pasó junto al pecoso golpeando levemente su hombro.

—No tienes que aceptar esto si no quieres...

—Es nuestro deber como gobernantes ¿o no? —sollozó.

—Lo siento tanto... —Shoto abrazó a su esposo con pesar.

—El día de tu decreto real lo informaremos, solo quiero que entiendan que esto es lo mejor...para todos.

Shoto conocía perfectamente a su madre y sabía que esas palabras eran puras mentiras. Ella tampoco estaba de acuerdo pero el consejo era poderoso aún sobre ellos los Reyes y el bien colectivo era más importante que su moralidad.