Estábamos llegando casi al final de la noche. Después del inconveniente con Alex y la policía que se lo llevó, seguimos con los nuestro un poco desanimados. Pero por suerte Bill intentó ponernos de buen humor, funcionó.
Ya todos estábamos un poco ebrios y muriendonos de risa. Bill levantó una copa y se paró para decir unas palabras.
- Únicamente quiero decir que la cumpleañera de hoy es la persona más maravillosa que he conocido. Así que quiero hacer un brindis en su nombre y para que sea siempre feliz.- Hizo una pausa.- Junto con todos nosotros, hasta que la muerte nos separe.- Reímos al ver lo ebrio que estaba.
- Esto parece un casamiento, Billy.
- Pues entonces nos casemos todos juntos en este momento, Aixu.
Chocamos las copas y brindamos.
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Ya habíamos terminado con el festejo, me encontraba con Tom en mi auto mientras él iba menejando mientras posaba su mano en mi pierna.
- Lamento lo de hoy. No salió como esperaba.
- Tom, ya deja de disculparte. No fue tu culpa.
- Lo sé, pero aún así no puedo dejar de sentirme culpable.
- Tom.- Deposité un pequeño beso en su mejilla.- Amé esta noche, de verdad. Muchas gracias por tomarte el tiempo, junto con Billy, de preparar todo esto.- El sonrió.
- Aún no acaban las sorpresas. Falta una.
- ¿Y qué se supone que es esa sorpresa?
- Ya verás.
Bajamos en un nuevo hotel mucho más lujoso a comparación de dónde estábamos hospedados. Entramos y Tom pidió la llave de la habitación que había reservado. Fuimos al ascensor y entramos.
- Antes que nada, necesito que te pongas esto.- Extendió su mano dándome un antifaz.
- ¿Acaso vamos a jugar a cincuenta sobras de Grey?
- No.- Se rió.- Al menos no esta noche.
Asentí y me puse el antifaz. Sentí como el ascensor se frenaba y abrían las puertas, Tom me tomó de la mano y me guío hasta lo que era una habitación. Entramos y me indicó que me quedara parada sin hacer nada.
- No te saques el antifaz hasta que yo te lo diga.
- Me estoy empezando a poner nerviosa.- Reí.
- Tranquila, solo serán unos segundos.
Escuché como Tom comenzaba a buscar algo en, lo que parecía ser, unos cajones. Sentí un olor bastante bueno, estaba todo aromatizado.
- Puedes sacarte la venda.- Escuché detras de mi.
Al sacarmelas observé una cama con un montón de pétalos de color negro, eran las flores que me gustaban a mi. Habían muchas velas y la luz era muy poca pero suficiente para ser algo muy romántico. Había música tranquila de fondo.
- Tom, esto es...- Me di vuelta para abrazarlo pero él estaba arrodillado en frente de mí con una pequeña caja en sus manos.
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𝐖𝐢𝐭𝐡𝐨𝐮𝐭 𝐌𝐞 || 𝗧𝗼𝗺 𝗞𝗮𝘂𝗹𝗶𝘁𝘇
Fanfiction- ¿Podrías meterte en tus propios asuntos? - Exclamé ya molesta con su ultima reacción frente a mi pareja. - Me vas a a dar más problemas de los que ya tengo, Tom. - Mantener la calma frente a cosas como esas no es mi fuerte ¿sabes? - No es problem...