.•° .。↳ ❪𝐚𝐧𝐭𝐢-𝐫𝐨𝐦𝐚𝐧𝐭𝐢𝐜❫ * ˚ • '.✦
❛Después de la leche de plátano,
tú eres lo que más amo
en el mundo.❜
saemi no acepta sus
sentimientos ante su amigo
o
sieun se da cuenta sobre
sus sentimientos, p...
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Lee SaeMi.
En cuanto Sieun se giro, alcé la mano despidiéndome.
─ Recuerda que la loca soy yo, no tú. ─ murmuró con una pequeña sonrisa, pero me sorprendió cuando Sieun volvió a caminar hacia mí. ─ ¿Qué haces? Ve adentro.
─ Tienes que volver. ─ revolví el cabello del chico, para que se acumularán lágrimas en mis ojos junto con una sonrisa cerrada. Antes de que pudiera decir algo más, el teléfono de alguno de los dos sonó, toqué el bolsillo del suéter, sabiendo de que se trataba del mio.
Chat.
Halmeoni.
"Florecita, tenemos noticias de Sangin. ¿Te quedaras con Sieun o me acompañaras"
Aparte la vista del teléfono, sintiendo más alivio sobre mis hombros.
Levanté la vista para mirar al chico.
Quiero encontrar a Sanig, lo necesitaba, pero Sieun termino perdiendo la única oportunidad de poder entrar a una buena universidad, y ahora estamos perdiendo a Suho.
No quería verme tan egoísta irme, y dejarlo solo.
─ No me iré a ningún lado, Sieun-ah. ─ Tome el rostro del chico con las dos manos, chocando mis labios con los suyos.
─ Quédate conmigo, no quiero que te vayas. ─ las palabras de Sieun me tomaron por sorpresa, así que aparte las dos manos lentamente apretando los labios al instante.
─ ¿Recuerdas cuando te hable por primera vez?
ANTES
DÍA 1.
Levante mi cabeza del pupitre soñolienta, dándome cuenta que el aula estaba completamente solo, excepción de un chico.
─ ¿Dónde están todos? ─ Pregunte, esperando que el chico contestara, pero no hablo, solo continuó escribiendo en su cuaderno.
Desde que llegué aquí, ese chico solo tenia su mirada puesta en un libro.
Si no era en el aula, estaba en el comedor también con uno.
Se colocaba sus audífonos, ignorando a su alrededor, eso despertaba una curiosidad en mi.
Me levanté del lugar con torpeza, golpeando mi rodilla con el pupitre.
Maldije lo suficiente alto, como para que él escuchara.
─ Disculpa... ─ daba pasos lentos hasta él, temiendo que fuera un completo loco peor que Youngbin. Pero ese chico no giro a verme, resopló dándole unos toques suaves en su espalda. ─ ¿donde fueron...? ─ las palabras se cortaron tras ver la mirada de ese chico.
