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El pasar de los días era cada vez más rápido, y también junto con los cambios entre Luka y Sergio. En el sentido de su personalidad.

Ya era 2013, habían pasado los cumpleaños de sus compañeros juntos y otros eventos que habían marcado, como ir a algún restaurante, jugar juntos o algo por el estilo. Y como Sergio fue cambiando también lo iban invitando. Luka era el único que estaba mucho más serio de lo normal. Aún seguía con su personalidad tímida y simpática con los suyos. Pero no estaba igual que antes. Lo que el croata necesitaba era todo el afecto que no pudo recibir desde un principio, pero le daba vergüenza pedir. Así que casi siempre involucraba un plan de abrazar algún jugador que supuestamente, era para "felicitarlo", y la verdad era que también quería felicitar a la vez.

Tuvieron que ir para un hotel hacia Alemania, ya que tenían un partido con un club de allá.

Todos habían combinado con que habitación quedarse. Y Mou, como no estaba enterado de muchas cosas. Decidió poner a Luka y Sergio en una misma habitación. Quería que se dieran bien, porque todavía creía que Sergio seguía con su horrible humor.

Mientras tanto faltaban unos pocos días para el partido. En las habitaciones todos estaban durmiendo, mientras que Sergio estaba molestando a Luka.

-Lukaaaaaa.

«¡¿Qué?!» Modrić lo miró con el ceño fruncido, hacía media hora que Sergio seguía diciendo eso.

-¿Me alcanzas el peluche que está allí?-. Preguntó Sergio, apuntando a un mueble que estaba algo lejos de la cama. Luka, con el estrés que se llevaba tuvo que ir hasta allá caminando. Agarro el peluche y lo tiró justo en la cara del español. -¡Ay! Gracias, lukita-. Dijo mientras se quitaba el peluche de la cara.

Sergio se durmió con el peluche entre sus brazos. Era un peluche blanco con un corazón en el centro. Por alguna razón decidió llevarlo con él. Mientras tanto Luka se había puesto casi en la punta de la cama, por suerte y aún no se había caído.

Por el momento, mientras dormían, solo se escuchaba el sonido del aire acondicionado prendido. Sergio parecía que estaba apunto de roncar. Y eso sucedió. Luka se sentía en una crisis, creía que tenia que tomar unas 30 pastillas para dormir, y más sabiendo que estaba al lado de su compañero. Odiaba la idea de que los hubieran puesto juntos -además de que se estaba molestando por los ronquidos-, se quedó dando vueltas unos cuantos minutos y aún así no logró dormir. Hasta que de un momento a otro se durmió, pero como estaba en el borde de la cama, se cayó e hizo un ruido impresionantemente fuerte. Sergio se despertó lo más rápido que pudo, logró ver a Luka en el piso.

Se levantó y vio que tenía aún los ojos cerrados, le dio una ternura ver aquella imagen, Luka despeinado, completamente dormido y para colmo con todo el cuerpo de lado. No supo cómo no se había despertado luego del golpe.

Ramos lo cargó y se quedó observándolo por un rato, hasta que Luka lo abrazó. Quizá no sabía que alguien lo estaba cargando, y el que lo estaba cargando no le agradaba en absoluto. O bueno, casi.

Sergio lo puso en la cama y volvió a su lugar para seguir dormido.

Pasaron las horas hasta que llegó la mañana, había unos rayos de sol traspasando las cortinas claras que había, eso por lo menos marcaba que hora era. Sergio fue el primero en despertarse. Abrió los ojos y vio que Luka aún seguía dormido al lado de él. Estiró los brazos y dio un largo bostezo, se quedó observando al rubio que estaba a su lado nuevamente. Luka de esta vez estaba un poco más cerca de Ramos, ya que no quería que se cayera otra vez.

Unos minutos después, Luka se despertó. Pudo darse cuenta de que estaba casi cerca de Sergio. No sabía si darle una patada bien ahí por el medio, al final solo se quedó viéndolo. Los dos se estaban mirando.

Tú voz - LukamosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora