𝐒𝐨𝐲 𝐒𝐮 𝐌𝐚𝐫𝐢𝐨𝐧𝐞𝐭𝐚 (ɴɪᴄᴏ ᴅɪ ᴀɴɢᴇʟᴏ)

𝟎𝟏𝟎|𝓑𝓮𝓵𝓵𝓮𝔃𝓪 𝓺𝓾𝓮 𝓵𝓵𝓪𝓶𝓪 𝓪 𝓵𝓪 𝓶𝓾𝓮𝓻𝓽𝓮

—Por último, está Olivia Grace.

Athanasia nombró última a Olivia, la protagonista de la novela.

Nico reconoció ese apellido. La familia Grace era una que apoyaba su propia familia.

—La familia Grace es la más humilde de las tres. Sin embargo, aunque no tienen fortuna ni poder, tienen la interesante posición de haber sido patrocinados por el ducado di Angelo.

Como Nico tenía oídos, era consciente del hecho de que Athanasia todavía la mencionaba. ¿Qué demonios estaba haciendo?

—Personalmente, creo que milord debería reunirse con la señorita Olivia Grace.

—¿Quieres decir que estás recomendando que me case con ella?

—Eso es correcto. La dama es inteligente y observadora. Es considerada, pero también segura de sí misma y fuerte.

Athanasia habló esto de manera significativa como si estuviera negociando.

Nico la examinó de cerca para encontrar sus verdaderas intenciones. Mirando hacia atrás en su historia, no había ninguna razón para que Athanasia dijera esto.

Así le preguntó abiertamente.

—No sé por qué estás diciendo esto.

Sus ojos se encontraron por un momento. Sus miradas eran profundas y serenas, como si se mirasen el uno al otro.

—Si es Lord di Angelo, creo que sabrá por qué, —dijo Athanasia enigmáticamente. Su actitud demostró que no tenía intención de decirle la respuesta correcta.

¿Qué tipo de beneficio obtendría la princesa si me encontrara con la dama?

Nico ni siquiera podía adivinar qué ganaría Athanasia con eso.

Pero, por supuesto, Nico no podía saberlo. Nico no sabía que se trataba de una novela, ni lo que sucedería en el futuro, y, por supuesto, no conocía el verdadero objetivo de Athanasia.

'Debido a que los dos son los personajes principales, seguramente se unirán. Así que será beneficioso si piensan que les ayudé a organizar su reunión.'

Además, Olivia pronto se convertirá en una de sus damas de compañía, y luego Athanasia, Olivia y Raphael tendrán sus destinos atados como hilos.

—Las otras damas de compañía están llegando, —susurró Reyna mientras se acercaba a ellas. En otras palabras, era hora de terminar su conversación actual.

Athanasia estaba ahora segura de que Reyna ya estaba emocionalmente distante de las otras damas de la corte, hasta cierto punto.

—Llegas un poco tarde en la preparación del té, —regañó Athanasia a la ligera.

Una de las damas de honor inclinó la cabeza.

Deben haber corrido al palacio de Octavian para contarle de esta reunión.

En realidad, por eso Athanasia despidió a todas las damas de honor, salvo a Reyna.

—Le pido disculpas, Su Alteza,

—Está bien. Prepara el té. Te aseguraste de prepararlo bien, ¿correcto?

Athanasia verificó personalmente el estado de las hojas y las tazas de té.

—Remoja el té con fuerza y mézclalo con leche para Lord di Angelo.

—Sí Su Alteza.

Las damas de honor pusieron carbón en un pequeño brasero y colocaron encima una tetera para calentarlo.