MI LUNA DE LUNAS || SUPERCORP GIP.

Capítulo 29

Pov Lena

Un mes a pasado desde aquella batalla donde muchos murieron, Kara supo guiar a nuestro clan para una pronta recuperación y ahora creo que estamos mejor que antes.

Alex se recupero, Sam no se aparto de su lado en ningún momento y creo que a Kara eso le molesto pues ella esperaba que la abandonará para así matarla. Pero gracias al cielo eso no sucedido, Alex y Sam ahora están en el mundo humano, Sam no accedió a ser convertida y Alex apoyo su elección y decidió qué lo mejor sería irse.

Lo último que supe fue qué Alex se adapta a su nueva vida junto a Sam.

Todo parace mejorar para todos... para todos menos para mi.

Kara ni siquiera me ha tocado este mes, siempre está muy ocupada y cuando intento seducirla siempre encuentra la manera de librarse, ella no entiende que tengo necesidades y ella obligaciones. Por otro lado mi panza ya es más notable, no tan exageradamente pero si un poco.

Lex a sabido lidiar con los asuntos de un alfa muy bien y gracias a el Kara no tuvo que pelear con el hermano de James cuando este se entero que fue un lobo de nuestro clan quien lo mato, aun que bueno era obvio quien ganaría si peleaban.

Pero volviendo a Kara, ella no me ha tocado, estamos bien, según recuerdo, es atenta, me besa y todo eso pero ella parece no entender que yo quiero más.

Su olor, su presencia, su sola imagen en mi pensamiento provoca qué me ponga muy muy caliente y estoy segura que ella lo sabe y...

Mmm, me pregunto si el dejarte con ganas este mes fue bueno — dice a mis espaldas mientras inhala mi aroma y lame mi oreja.

Kara, ¿en que momento...

Me alarmó por su presencia y trato de alejarme un poco pero sus manos me detienen y me pega más a ella.

Ni siquiera había notado que entro y que ya había anochecido.

Hueles deliciosa Luna mía — susurra en mi oído y una de sus manos acaricia mi vientre mientras la otra sube directamente hasta mi seno sin ninguna vergüenza.

Mmm, Kara — gimo de placer al tiempo que besa mi cuello.

Ha sido un infierno no tocarte — susurra — no tienes idea de cuanto he sufrido.

¿Entonces por que no lo hacías? — pregunto totalmente ida y excitada.

No era correcto, tu padre acaba de morir y con todo los asuntos pendientes — ahora sus labios buscaban los míos y desde luego no se los negué — por que hablamos de esto, solo vamos a la cama y ya.

Me parece razonable — respondo totalmente entregada a ella y a mi deseo.

Es increíble lo fácil que ella causa esto en mi, ni siquiera yo misma tengo una explicación para ello. Solo me pone caliente con una mirada.

Contrario a lo que pensé ella no tiene prisa, me besa con amor y pasión al pie de nuestra cama mientras sus manos aprietan mi trasero y lo masajean lentamente.

Kara... — trato de apartarla y decirle que no hay necesidad de ir lento.

Shhh, dejame amarte y complacerte como te mereces — susurra con una voz qué me hace vibrar cada célula del cuerpo.

Es entonces cuando escucho el sonido del primer boton. Uno a uno ella desabotona los botones de mi blusa, pero no la retira, la deja sobre mi cuerpo y acaricia mi piel lentamente guiando sus manos hacia el siguiente lugar. Mi pantalón.

Este también es desabotonado y su boca se separa de la mía para comenzar a emprender un viaje por mi cuello, entre mis senos y mi vientre.

Siento que se detiene un momento pero solo es para colocarse completamente de rodillas mientras baja mis pantalones y continúa con sus besos hasta mi centro.

La ayudo a que mi pantalón abandone por completo mi cuerpo y ahora solo mi camisa y mi ropa interior posan sobre mi cuerpo y el tenerla así arrodillada ante mi me esta haciendo arder.

Su mirada de súplica me es suficiente para entender y abro un poco las piernas, besa mi centro por encima de mi ropa interior y libero un gemido ante la satisfacción obtenida.

Repite la acción un par de beses hasta que sus dedos hacen a un lado la tela qué le impide obtener lo que desea.

De no ser por que ella me sujeto con la mano qué tenia libre habria caído de rodillas al sentir la primera lamida qué ella me dio.

Kara, ahh, Kara si, amor — quería implorar para que me dejara sentar en la cama pero lo estaba gozando tanto al igual que ella qué solo podía gemir su nombre con toda la voz qué tenia.

Ella no paraba, su lengua arrasaba con cada rincón de mi centro ya empapado y...

Ella tuvo que sostenerme con más fuerza cuando mi primer orgasmo llego sin avisar y comencé a temblar mientras me corría a chorros sobre Kara.

Mi vista estaba nublada y estaba algo desorientada por el resiente orgasmo qué acababa de tener. Pero a Kara eso paracia no importarle o simplemente no se daba cuenta.

La mire y aun con la vista borrosa podía verla bañada por mis fluidos pero seguía dando pequeñas lamidas y de repente se detuvo y me levanto con cuidado y me acostó sobre la cama para proceder a besarme.

Probablemente muchas parejas estarían asqueadas de probar sus propios fluidos en la boca de su pareja, pero a mi me gustaba, todo lo que se mezclarla con ella era delicioso para mi.

Kara amor, te necesito — suplique y no fue necesario hacerlo de nuevo.

En un rápido movimiento me colocó sobre ella y no supe en que momento sus pantalones desaparecieron al igual que su ropa interior.

Me observó con una sonrisa y una mirada ambas llenas de deseo y termino de denudarse bajo mi mirada.

Quise hacer lo mismo pero ella me detuvo. Escabullo sus manos hacia mi espalda y desabrocho mi sostén para proceder a retirarlo dejándome solo con mi camisa negra y mis bragas del mismo color.

¿Por que solo tu puedes estar totalmente desnuda? — pregunto tranquila y paso mis brazos por detrás de su cuello.

Ella me toma de la cintura indicándome qué me levante un poco y lo hago. Me suelta y vuelve a hacer mis bragas a un lado y con la otra mano coloca su polla en mi entrada y al sentirla me deslizó lentamente sobre ella permitiendome volver a sentir el placer de tenerla sobre mi.

Te ves tan jodidamente sexi sobre mi vestida así — responde a mi pregunta y me toma de nuevamente de la cintura para comenzar a follarme en un ritmo lento.

Mis pechos saltan y ella lo nota, pero menciona qué es tan excitante verlos saltar aun que no pueda verlos ya qué mi camisa a pesar de estar completamente desabotonada los cubre lo suficiente para que no sean completamente visibles para su vista.

Dejame mostrarte — pido al ver que no para de verme los pechos sin ningún descaro.

No — sentencia sin dudar — me encanta verte así mi amor.

Pero hay algo que le gusta casi lo mismo que mis pechos y eso es mi boca, por lo que la beso sin pedir permiso y ella me corresponde sin dudar.

Así continuamos un rato, en la misma posición hasta que mi segundo orgasmo hace acto de presencia y de nuevo me convulsiono sobre ella mientras ella continúa penetrandome sin parar alargando mi placer y al sentir su última estocada y como se vacía dentro de mi todo mi cuerpo vuelve a temblar.

Kara — susurro sin casi nada de aire en mis pulmones — esto a sido tan perfecto, tan caliente.

No lo digas como si esto ya hubiera llegado a su fin — pide con algo de burla.

La miro con cierto nerviosismo y ella ríe en voz baja. Se que ella no planeaba parar al menos por hoy pero algo me dice que me equivoco.

Tu y yo — comienza y mis bragas son rotas y arrojadas por ahí — vamos a... — esta vez mi camisa abandona mi cuerpo dejándome completamente desnuda y con su polla aun dentro de mi — adelantar tu celo y no saldremos de aquí, excepto para alimentarnos, al menos por dos semanas.

Dios si, ella ni siquiera espera mi respuesta pues ella ya la conoce.

Procede a besarme y a hacerme el amor una vez más, la segunda de muchas qué vendrán en estas semanas.