Kieth Mckee
Cuatro años y dos meses ya han pasado desde que vimos a la ex mujer de nuestro difunto padre. Cuatro años y dos meses desde que llegamos a los Estados Unidos.
Sinceramente no me arrepiento de quedarme aquí, tampoco creo que mis hermanos se arrepientan tampoco.
Decidimos quedarnos a cuidar las empresas de nuestro padre porque este nos dió una para cada uno.
A mi me dio su empresa de tecnología, el lugar va bien, la paga a los empleados es muy buena y los negocios suben cada vez más. Pero eso ya es otra historia.
Dos años después de la muerte de nuestro difunto padre conocimos a una mujer. Una mujer que nos trajo felicidad y amor incondicional. No era de las que se interesaban por el dinero, ella nos demostró que era diferente.
Jade Grimes, de nacionalidad italiana. Hermosa cabellera roja como el fuego y ojos verdes como las hojas, tiene lindas pecas alrededor de su rostro que la hacen ver muy hermosa. Tiene 25 años y actúa tan infantil que siempre nos saca una sonrisa. Ella es alguien débil pero fuerte, no duda en ayudar a quienes lo necesitan y eso nos da miedo porque se pueden aprovechar de eso.
Suspire y seguí con mi trabajo de firmar algunos contratos que tenía atrasados debido a que estuve haciendo otras cosas como cuidar a mi mujer por su periodo.
Ya cuando es de noche me levanto de mi asiento para poder irme a casa, salgo del edificio bajo la mirada de todos y ya estando acostumbrado seguí mi camino hasta llegar a mi Lamborghini. Me monto y arranco hacia mi mansión.
Al llegar me bajo del Lamborghini y entro a la mansión dejándole las llaves a Sebastián quien las recibió.
Me fui hacia la sala encontrándome con Jade y a los cuatrillizos acostados sobre el sofá mientras ven una película y comen helado.
Jade gira al sentir mi mirada sobre ella y se emociona al verme, se levanta rápido dejando caer la cabeza de Damien al piso quien tenía su cabeza sobre las piernas de Jade.
Corrió hacia donde mi y brinco enrollando sus piernas sobre mi cadera, le sonrió y está a mi.
Le doy un beso en la mejilla y está se sonroja.
- Buenas noches. - Saluda con su hermosa voz angelical.
- Buenas noches princesa. - Me acerco a su oreja.
- Da cosquillas. - Dice está entre risas al sentir mi lengua en su cuello.
- Wey, ¡hay menores de edad aquí! - Reclama un Demian enojado y divertido.
- Solo estás celoso. - Le digo levantando las cejas y este me mira indignado mientras sus copias se ríen en su cara.
- Princesa estoy muy cansado por el trabajo, Hablamos mañana ¿si? - La miro apenado.
- No te preocupes, tu ve y descansa. Yo me quedaré con tus hermanos. - Sonríe dándome un beso sobre mis labios.
- Si dices eso me pondré celoso princesa. - Está me mira con gracia antes de bajarse de encima mío.
- Vete a dormir. - Me ordena y yo la miro con gracia.
- Como ordene, su majestad. - Rio dándome vuelta y subir hasta mi habitación apartada.
Cuando se trataba de Jade todos dormíamos en la misma habitación la cual tenía una cama muy grande pero a veces dormíamos separados y por turnos.
Hoy solo quería dormir ya que me encontraba cansado del trabajo y todo eso, además creo que no podré dormir porque hay algo que me molesta por las noches.
Entro a la habitación, me quito la corbata y la tiró a quien sabe dónde, me acerco a la cama y me hundo sobre está.
Suspire e intenté cerrar mis ojos pero los volví a abrir al ver esa figura femenina dentro de mi cabeza, rubia de ojos grises casi azules.
Me tape la cara con las manos y mire hacia el techo intentando recordar el nombre de esa mujer.
- Hale.. Vale.. ¿Haley? Si, creo que sí. - Dije para mí mismo pero escuche como algo se rompía.
Me levanté rápidamente de la cama viendo a Jade quien me miraba asustada, en el piso estaba un vaso roto.
- L-lo siento. - Se disculpa y yo me acerco a ella.
- No te muevas. - Digo para evitar que se lastime porque estaba descalza.
La cargo en mis brazos como princesa y la llevo hacia mi cama dejándola con delicadeza.
- ¿Estás bien? ¿Te duele algo? - La atacó con preguntas.
- Si, estoy bien. No te preocupes. - Me sonrió pero esa sonrisa no era como las demás, está era más... ¿Vacía?
- Okey.. - Asiento.
- ¿Estás muy cansado? - Me mira coquetamente.
- Mm, no. - Sonrió y me tiró encima de esta haciéndola reír, me acuesto a su lado y está me mira confundida.
- Hoy no. - Beso su frente.
Puedo ver cómo está asiente para solo abrazarme con fuerza.
La agarro de las caderas y la acerco más a mi cuerpo.No puedo creer que este pensando en otra mujer cuando ya tengo una..
Solo espero que no me haya escuchado.
Jade Grimes
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Capricho [+18]
RomanceElla nunca supo que era querer a alguien de manera romántica. Cosas que la llevaron a desperdiciar su vida y por obligación de su "madre" se casó con un hombre que le doblaba la edad. Tanta presión fue lo suficiente como para emborracharse en un bar...