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Desde hace una semana, Dabria presentaba dolores de cabeza, pérdidas de memoria, hemorragias nasales y alguna que otra alucinación. No entendía qué le pasaba, pero se encontraba como la mierda.

— Hoodie, traeme un ibuprofeno. - susurró la morena tumbada en el sofá, mantenía los ojos cerrados.

— No sirve de nada.

— Me estoy muriendo. - dramatizó soltando un gemido de dolor.

La risa de Toby se escuchó por el salón mientras que salía de la cocina con una botella de agua en la mano, acababa de volver de una de sus misiones, lo sabía por las manchas de sangre en su ropa.

— A ver si es verdad, estoy harto de escucharte.

— Toby. - llamó la morena, él se acercó para poder mirarla, alzó su mano para mostrarle el dedo corazón.- Vete a la mierda.

Él tan solo golpeo su cabeza ocasionando que ella se quejara.

Estos últimos días la morena había tomado algo de confianza con el de goggles, ya que pasaba a hacerle compañía cuando estaba tirada en la cama o fumándose un cigarrillo.

Las cosas con Masky volvían a apestar, un día parecía que la adoraba, besos, sexo por doquier y al otro la odiaba como si no hubiera un mañana, y el corazón de Dabria se hacía añicos. ¿Sano y estable? Ella sabía perfectamente que no lo era, pero qué se le podía hacer, uno no decidía por quién sentirse atraído.

Esa noche tenía que salir con el dúo y no sabía si iba a poder con ella misma, a mala gana decidió levantarse para dirigirse a la cocina en busca de algo de comer, arrebatándole al del bozal su botella de agua.

***

Se encontraban dentro de su antiguo hogar haciendo que el corazón de Dabria se encogiera y su respiración se parara por unos instantes, el nudo en su garganta ya estaba formado, miró a sus compañeros mientras negaba con la cabeza.

Un dolor agudo se hizo presente en su sien, haciéndole tomar su cabeza con ambas manos y sentía como la sangre brotaba por su nariz.
Su vista se nubló y no escuchaba nada más que unos pitidos agudos.

Hazlo.

Una voz grave retumbó en su cabeza.

Mátalos, hazlo.

Ella negaba con la cabeza mientras seguía sujetando ésta con fuerza como si de algún modo eso fuera a aliviar el dolor, sin ser consciente ya estaba llorando.

Hazlo, hazlo, ¡hazlo!

Y la mente de Dabria colapsó, quedando en blanco escuchando tan solo aquel pitido constante, su vista volvía a ser clara. Sin ser consciente de sus actos, Dabria agarró el mango de su arma con fuerza mientras que se dirigía a una de las habitaciones, entró sin hacer el mínimo ruido.

Pudo divisar aquella cabellera rubia y larga; Beatrice.

Se acercó a la cama a paso lento y de un rápido movimiento al estar delante la giró para que pudiera obvservarla una vez abrió los ojos.

— ¿Dabria? - murmuró la chica adormilada, se acomodó un poco en la cama.- ¿Dónde mierda estabas? ¡Llevamos meses sin saber de ti! Estaba preocupada, todos lo estábamos, Luke..

No le dejó terminar de hablar cuando tapó su boca con una mano, dejando a la de cabello largo confundida y sin pensárselo dos veces cortó su garganta, evitando que pudiera gritar.

Aunque no quisiera, algo se había apoderado de ella.

Los ojos de Beatrice se abrieron más no poder y la sangre salía a chorros, manchando toda la cama y pasados los segundos su mirada fue perdiendo aquella vitalidad que tenían, que la miraban con cariño cada vez que estaban juntas, pero eso no importaba.

El cuerpo de la chica volvió a caer en la cama, pero esta vez sin vida, su piel estaba pálida, sin color alguno y una pequeña risa se escapó de los labios de Dabria.

Salió de la habitación para dirigirse a la siguiente, donde dormían Josh y Matthew.

Masky la siguió por si las cosas se torcían, pero él sabía que no debía entrometerse, pero la idea de que alguno de aquellos chicos la dañara le carcomía por dentro.

Vio como la azabache se adentraba en el lugar dirigiéndose a una de las camas pero tropezó al estar enfrente debido a una botella de vodka vacía en el suelo, haciendo que ambos muchachos se despertaran y el de cabellera roja prendiera la luz.

— ¡Dabria! - gritó Josh, aunque la sonrisa que tenía en el rostro se esfumó al verla cubierta de sangre y al de máscara detrás de ella.

La fémina simplemente empuñó el cuchillo con fuerza en el cráneo adverso, matandolo al momento.

— ¿Qué haces? - Matthew se levantó a toda velocidad para agarrar con fuerza el brazo de la chica y empujarla al suelo.- ¿De qué mierda vas?

El rostro del chico ya estaba empapado de lágrimas pero la ira porque le había arrebatado a su mejor amigo era mayor.

Pateó el costado de Dabria con fuerza y aquello hizo que para Masky se cruzaran sus cables y se acercara a él para golpearle la cabeza con su barra de metal, haciendo que cayera inconsciente, aunque eso no fue suficiente y siguió golpeándolo hasta que su cabeza quedó totalmente aplastada y su corazón dejara de latir.

Un dolor agudo se hizo presente en la sien de Masky, haciéndole retroceder del cuerpo.

— Masky, Dabria, vámonos. - dijo Hoodie desde el marco de la puerta.

El de máscara se dirigió hacia él mientras que la chica estaba levantándose del suelo. Ignoró la presencia de ambos para dirigirse a la cocina del lugar y tomar un bidón de gasolina que sabía que sus antiguos compañeros de banda guardaban y empezó a rociar todo el lugar, el dúo se dirigió a la entrada para poder observar con detenimiento las acciones ajenas, una vez que ella creyó que fue suficiente, buscó por el lugar una caja de cerillas y ¡bingo!, encendió una y la lanzó a aquel líquido; provocando que las llamas consumieran el lugar.

El fuego aumentaba por segundos y en el rostro de la morena estaba plasmada una gran sonrisa pero esta no duró mucho ya que el dolor de cabeza se hizo presente nuevamente y la visión borrosa volvió hasta que sus ojos se cerraron; quedando inconsciente.

Pero su cuerpo nunca llegó a tocar el suelo porque los brazos de Masky la rodearon y sacó del lugar. Dejando que el apartamento y el bloque de pisos ardiera en llamas y con el sus recuerdos.

MONSTER | MaskyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora