VACACIONES, LO MEJOR DEL AÑO, pero no todo es color de rosa. Ella sabe que no puede seguir en la casa de su padre por el tonto acuerdo que él y su madre tienen, así que tendrá en esas vacaciones qué ir a la ciudad de su madre a quedarse por todas la...
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Narrador omnisciente.
Estaba seguro de aquello que sentía, era una mezcla de emociones que ya hacía tanto tiempo que no sentía, desde que su madre y padre murieron. Por primera vez sentía que tenía atención, sentía que todos lo miraban, aunque solo fuera ella. Vincent comía en casa, tranquilo, vagando en su mente, la cual, Bo no podía entrar y reclamar. Ella le hacía sentir diferente, vio su determinación y emociones, inteligencia en ella, estaba decidida y eso le hacía sentir fascinado por ella, su cabello corto y ondulado le había encontrado muy excitante como también el verla ser capaz de buscar lo mejor para sus seres queridos.
Desde aquella noche, que no pasó mucho tiempo, fue tan solo ayer; su hermano reclamaba y gritaba, le insultaba y golpeaba, hasta le llegó a lanzar objetos de la cocina, según Bo, Vincent tenía la culpa de que ellos escaparan. Bo estaba seguro que la joven se encontraba en el bosque tratando de salir, y pensaba ir a buscarla junto con Lester antes de que un animal salvaje le asesinará, por otra parte, el otro joven de seguro estaba ya muy lejos después de irse en aquella camioneta, y dudaba que regresará después de todo lo que sucedió.
Bo pensaba que aquel hombre de color era demasiado cobarde para regresar a por una "zorra", así fue como Bo llamo a Anya. Salió de la casa determinado, al mismo tiempo que Lester, quien había estado dentro de la casa todo el tiempo escuchando el como Bo regañaba a Vincent.
Suspiro. ¿Ya se habrían ido? Se acercó a la ventana viendo cómo ambos hermanos se alejaban de la casa, y sin pensarlo, en una bolsa de plástico metió comida y fruta para luego guiarse por los tuneles que estaban bajo tierra, para llegar aquella casa de cera, un museo donde todo está a hecho en base a eso, ahí se había quedado Anya. La encontró encima de una de las camas que Vincent había hecho de cera, se le miraba preocupada, en un trance que Vincent no sabía cómo sacarla.
Pero no fue necesario, ella sintió su presencia, y fue ahí que le volteo a ver.
—¿Hiciste todas estas esculturas? —pregunto. Vincent asintió, no sabía cómo reaccionaría ella cuando se enterara el como las había creado a la mayoría de ellas. —Vi unos bebés en una de las habitaciones, gemelos unidos —informo.
Vincent no sabía a dónde quería llegar, pero el que hablará de ello lo hacía sentir incómodo. Él tenía aquella inseguridad, desde que su padre le separó a él y a Bo, aquella marca horrible estaba en la mitad de su rostro; Vincent recordaba todas aquellas veces en las cuales todo el pueblo le gritaban "monstruo" y "fenómeno". Y entonces se lo creyó cuando Bo, su hermano se lo repitió.
Cada vez que Vincent hacía algo que a Bo no le gustaba, o cometía un "error" se lo decía.
—Eres un fenómeno, Vincent, un idiota —aquellas palabras eran una herida que se quedaría en su corazón por toda la eternidad.
¿Tan horrible era? Se acercó a ella, quien seguía viéndolo. Vincent le gustaba verla, era hermosa y demasiado inteligente, había algo en ella que le fascinaba demasiado, tenía tantas ganas de tenerla para él siempre, y que ella nunca se fuera de su lado.
—¿Eres tu? —pregunto por fin. Vincent quería irse, pero ella le tomo del brazo, atrayendolo hacia ella con suavidad y despacio; Vincent no se pudo resistir y sin más, tomo asiento al lado de ella. —¿Por eso llevas esa máscara?
—Sí —por fin tuvo la valentía de hablar despues de mucho tiempo.
Cada vez que hablaba, Bo le regañaba, mencionando como debía siempre estar callado, que nadie le quería escuchar. Ni él, ni Lester. Anya le observo fijamente, así como él lo hacía, entonces observo la mano de ella ir hacia su máscara; en un movimiento brusco lo detuvo. Detuvo su brazo con miedo de lo que podía pasar, ¿y si le miraba el rostro y se asustaba? Estaba seguro que ella pensaría lo horrible y el monstruo que era, pensaba que ella diría lo que todos le decían: fenómeno.
—¿Puedo ver? —Vincent no sabía lo que pasaba por la mente de ella, pero tenía unas enormes ganas de lanzarse sobre ella y abrazarla.
Después de tanto tiempo, se sentía interesante, nuevas emociones emergiendo desde su interior, la curiosidad lo mataba y quería saber cada cosa que pasaba por la mente de ella, quería saber el como se sentía ella. Entonces paso, la máscara cayó al suelo, y su rostro fue descubierto, Anya le observo fijamente, su rostro mostraba sorpresa.
Vincent ni siquiera se había dado cuenta que después de aquel pedido, había aceptado sin estar consciente de lo que él decía. A punto de cubrirse, Anya le tomo de la mano, provocando que Vincent se sintiera mejor consigo mismo.
La mano de ella llegó a aquella parte de su rostro, dónde una cicatriz enorme se alojaba ahí, el tacto de ella era cálido y suave. Vincent cerro su ojo, disfrutando aquel tacto y aquella compañía que tenía.
—¿Qué carajos es esto? —una voz lo saco de su trance, al igual que a ella. Ambos se levantaron de aquella cama asustados, encontrándose a Lester en el umbral de la puerta, confundido y sorprendido por lo que veían sus ojos.
Y de un momento a otro, Lester se dió media vuelta y se alejo del lugar, al mismo tiempo que cuando Vincent reaccionó para ir detrás de él, tratando de rogarle a su hermano que por favor no dijera nada de lo que acababa de ver, de el paradero de ella. Por primera vez se sentía vivo, y quería que así se quedará ese sentimiento, quería que ella se quedará con él, que ella fuera suya.
Ella era aquella persona que Vincent no pensó que llegaría a necesitar nunca en su vida, y al tenerla enfrente a él, por fin se sentía en paz consigo mismo.
—Lester —llamo. El nombrado volteo a verlo. —No le menciones a Bob.
El hermano menor le miro fijamente, inquieto por la petición de su hermano mayor.
—¿Estás demente? Bob te asesinará cuando se enteré que la mantienes oculta en tu taller —dijo Lester, para luego quitarse su gorra. —Si se entera de todo esto, y se entera que yo lo sabía; nos va asesinar a los dos por igual. Hay que entregarla.
—Lester, me agrada. No lo menciones —Lester le miro fijamente para luego tomarse el puente de su nariz, cansado de todo lo que estaba pasando.
Bo le había obligado a adentrarse a lugares del bosque que Lester no quería, y todo por una mujer a la cual Bo tenía muchas ganas de copular todo el tiempo, y ver ahora a su otro hermano igual, ya se estaba empezando a hartar.
—Si se entera, yo no estaba enterado —solto para irse del lugar.
Vincent suspiro. ¿En qué momento había decidido proteger a una mujer que apenas conocía? ¿Por qué se sentía como si hubiera traicionado a alguien?
—¿Le dirá a él? —la voz asustada de la joven le llamo la atención, volteo a verle. Ella le miraba asustada, nerviosa, veía como ella jugaba con sus manos. —¿Dónde me esconderé? ¿Me van a entregar? Por favor, no me entreguen, no quiero regresar a vivir eso.
Vincent sabía de lo que hablaba; de alguna manera se sentía culpable. Él sabía lo que su hermano le había dicho, le había narrado un poco de lo que había pasado, y el ver a Anya asustada, sin querer regresar, le hacia pensar que aquello que su hermano le explicaba diciendo que era bueno, en realidad era malo, y eso le afectaba a la chica.
Se acercó a la joven, y la tomo de los brazos, queriendo tranquilizarla.
—Te quedarás aquí —no fue lo que dijo lo que la tranquilizó, sino la forma en la que se lo dijo.
Un tono de voz protector, dando a entender que él la protegería.
***
Capítulo narrado desde un punto de vista de Vincent. Ahora sí, Anya y Vincent tendrán más interacciones.
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