Capitulo 8: Peleas Como Una Niña

262 28 3
                                    

⎯⎯  🏹⎯⎯

Hace cinco años — Lían Yu

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Hace cinco años — Lían Yu

Después unos minutos de vendar las heridas de Diana, Slade se levanta para pasarle una espada a Oliver dejando a la chica encima de una almohada.


—¿Qué es esto?— pregunta Oliver tomando la espada con torpeza.

—Creo que Yao Fei los envío porque sabe que no puedo tomar la pista yo solo.

—Eso suena a Yao Fei.

—Él tiene peor carácter qué yo. Si van a cubrir mi espalda necesito saber que puede hacer, pero tú por ahora debes recuperarte.— le dice a Diana.

Slade mueve su espada en dirección a Oliver y este lo esquiva, luego hace un pequeño movimiento para tener a Oliver con la espada en su cuello.

—Defiéndete.— exclama Slade. Oliver le pega en el brazo, pero aun así Salde hace qué la espada de Oliver caiga lejos de su alcance. —¡Conserva tu espada!

Oliver vuelve a hacer lo mismo movimientos haciendo que la espada caiga nuevamente. —No tienes habilidad, ni fuerza, ni entrenamiento, decir que peleas como una niña sería un cumplido.— Diana levanta su mirada algo molesta.

—Te dije que no soy soldado, naufrague aquí por error y mate al que usaba este uniforme por accidente.

—¿Donde estaba Yao Fei?

—Él me dijo que corriera... Y lo hice.— Slade enojado golpea el rostro de Oliver con la espada dejándolo inconsciente.

Diana se levanta y golpea a Slade en el rostro este intenta esquivarla, pero ella está vez golpea su abdomen luego pasa a intentar votarla al piso, pero ella es mucho más rápida y pequeña logrando qué Slade cayera al piso le arrebata la espada y hace presión en el cuello de él.

—Decirte que peleas como una niña sería un cumplido.— exclama Diana.

Slade la mira por unos segundos con una sonrisa y luego golpea su pie y la tira al suelo, ella suelta un pequeño grito de dolor al sentir una punzada.

—Valiente, lo admito. Pero aún debes recuperarte bien y jamás bajes la guardia.

—Nunca lo hago.— Slade la mira confundido segundos después Diana enrolla sus pies con las piernas de él tirándolo y ganándose sobre él.

Slade sonríe poniendo sus manos en la cintura de ella y la voltea quedando encima de ella. —Me sorprendes.— él alcanza una cuerda para amarrar sus manos. —No es personal.— él hace qué se siente en una de las sillas del avión y luego hace lo mismo con Oliver.

Minutos después el chico rubio despierta mirando a Slade y luego a Diana la cual se encontraba mirando el techo.

—La pista esta fuertemente armada protegida, he estado ahí y no puedo hacerlo yo solo.

Ahogados en recuerdos ๑ [Vol.1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora