Capítulo tres: Amatista Kyteler
Los tres ya estaban afuera de la puerta, listos para despedirse. Amatista resultó ser una chica agradable, humilde, sencilla y amable a comparación de Ámbar, su hermana. Chloe Jones jugó el papel de jueza, porque ella misma se encargó de juzgar y comparar las personalidades de ambas; mientras que una era obstinada, engreída, la otra se portó amable y acomedida. Incluso trajo un postre hecho por ella misma como regalo. De toda esa información pudo notar que las dos no estaban al pendiente de la otra; Amatista no sabía sobre de la vida de Ámbar y viceversa.
No quiso saber porque, tampoco preguntó.
Después de que los hermanos Jones se pusieran al día, fue momento de decir adiós a la visita. Chloe y Zack se despidieron con un beso en la mejilla, Amatista con un cálido abrazo y una sonrisa de oreja a oreja. Una joven Chloe jamás pensaría que en el futuro estaría abrazando a la chica que luce exactamente igual a las compañeras que molestaba en la universidad por su horrendo físico.
La vida da vueltas. Ahora su cuñada era una mujer que pudo haber hostigado en su etapa de colegiala. Pero le pareció dulce, de buena personalidad. Una buena muchachita para su hermano menor. La aceptaba como familia, aunque no lo iba a admitir.
Tras cerrar la puerta, Zack tomó la mano de su novia y andaron hacía el ascensor. La pareja de novios fueron los únicos que descendieron al primer piso. El piso veinte si que se tomaba su tiempo para llegar, después de todo es el penúltimo de este lujoso Penthouse. A Zack le fue difícil aceptar que su hermana mayor viviera en la zona más codiciada de la ciudad y encima en el mejor Penthouse, donde en cada departamento hay algún artista o cantante viviendo.
Se abrieron las puertas cuando bajaron, dejando ver a un hombre de raíces latinas, piel canela, de hombros toscos, de gran altura y cabello perfectamente peniado hacía atrás. Todo un profesional que emana poder, dinero. Zack y Amatista pasaron a su costado, saludando por cortesía —parecía ser el dueño de este edificio—. Miguel respondió al saludo y les dio un vistazo rápido a cada uno de ellos. No fueron lo suficientemente importantes para que les tomara la importancia que merecen, Miguel tiene demasiado trabajo como Spiderman y como CEO de Alchemax.
Significativamente pasaron los minutos para el hombre, perdido entre los cientos de papeles y el reloj que contenía a Lyla, a quién esperaba que informara de algún problema con los demás Spiderman que trabajan en conjunto. Llegó la madrugada, la hora de dormir, pero fue molestado por lyla que le infromaba del atraco de un banco. —Pues envía a mis hombres —le dijo, refiriéndose a los agentes de Alchemax.
—No pongas excusas, eres Spiderman, no se selecciona a la gente que ayudas. Es por igual —fue la respuesta de Lyla, su inteligencia artificial. Se arrepentía haberle programado esa personalidad tan desquiciante, pero ya no había nada que hacer. —Además, es Ausen quien lo está haciendo.
Miguel se levantó del sofá como resorte. Desabotono su camisa y colocó su máscara. "¿Un banco? ¿Por qué robaría un banco?". Estaba confundido mientras se columpiaba entre los edeificios. Ausen no es el tipo de persona que robaría dinero a terceros, sobre todo a una empresa que podría arremeter contra sus trabajadores. O quizás simplemente la juzgó mal y terminó siendo igual de malvada que los demás villanos a los que se ha enfrentado en los últimos años. Si fuera así, realmente se sentiría decepcionado con Ausen.
Mientras tanto, Ausen miraba desde el punto más al del edificio, a su víctima.Un varón de cuarenta y seis años de edad de los cuales trece los ha pasado tras las rejas por intento de abuso sexual a una menor de edad. Al cumplir su sentencia y salir de prisión a los treinta y tres años de edad, entendió que los crímenes deben llevarse de forma organizada, sin huecos o fallas. Se hizo de un imperio de dinero vendiendo droga en distintos puntos de lo más bajo de la ciudad, y junto a sus nuevos secuaces reclutados inició una red de trata de personas. Toda una historia para una película de criminales.
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ANTIHÉROE ⋮ MIGUEL O'HARA
Fanfiction¿Cuánto tiempo es una vida? Me pregunté. ¿Cuánto tiempo es una vida? Ya que es corta, ya que es efímera. ¿Cuánto tiempo es una vida? Puedes despedirte y dar tu último suspiro debido a los malos, a los seres que han perdido su humanidad. Entonces, to...