capítulo 15.

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La Luna se adueñó del cielo, los postes iluminan las calles en su oscuridad nocturna, las estrellas brillan cansadas de que la contaminación no deje a los demás apreciarlas, y dos amantes en un humilde hogar se quieren con cuidado.

Uno de ellos, con el corazón revoloteando dentro suyo y sus ojos brillosos de color verde, observaba al chico más bonito que haya visto en su vida entera.

Nadie puede negarlo.

― Tardaste un poco.

En la puerta del baño, con una toalla alrededor de sus tentadoras caderas, la barriguita dónde sus bebés se encuentran está a simple vista, sus cabellos marrones y suave piel cubiertos por gotas de agua. Completamente hermoso.

Y nadie puede negarlo. Nadie que tenga ojos y sentido común para ver la hermosa persona y alma gentil que es Seungmin.

¿Tanto tiempo le tomó darse cuenta?

Tanto tiempo dónde soltó palabras inadecuadas sin el filtro adecuado, tratando de alejar al chico de forma inconsciente, dando una imagen que no es, ¡Su madre se lo advertía! Pero eso es del pasado. Porque ahora las cosas solo pueden ir para mejor, porque los sentimientos de ambos han sido aclarados y todo lo demás parece no importar.

No cuando tiene a su familia a su lado. Su madre, Seungmin y las bebés próximas a llegar son su familia y Minho lo sabe. Ahora lo hace.

― Lo siento. ―Sonríe peinando sus cabellos. ― No lo noté.

― Descuida. ― Seungmin asiente con algunos mechones pegados a su frente, luciendo adorable.

Minho eleva una comisura de sus labios con cuidado y se levanta de la cama, mientras Seungmin camina con cuidado hasta la misma y toma asiento tomando su espalda baja.

― ¿Cuántos meses llevo ya? ― Suelta haciendo una ligera mueca por el dolor, su mano izquierda acariciando su espalda. ― ¿Lo sabes?

Minho parece tensarse antes de entrar al baño con su pijama en mano, y Seungmin lo mira confundido hasta que cree entender.

¿Aún le incomoda? ¿Siempre lo hará?

Minho gira un poco luciendo avergonzado, ¿Porqué?

― Tienes 4 meses, casi cinco. La semana próxima a esta cumples cinco. ― Responde como en un susurro. ― Puedes verificar en mi cajón. ― Señala la cómoda al otro lado de la casi vacía y pequeña habitación.

Seungmin asiente con desconfianza. Sus pies descalzos tocan el frío piso hasta quedar frente a la cómoda, con una mano toca su vientre abultado y con la otra abre el cajón.

― Es un tonto... ― Sonríe en grande observando aquel calendario y lo sujeta entre sus dedos.

Los días marcados, uno tras otro en el calendario, con algunas notas en las esquinas.

"Chequeo mensual de SM, 3 de..."

"Dos meses"

"Ya son tres meses"

"Tres meses y medio"

Él siempre tan atento y cuidadoso con él y los demás. Por más que en su momento haya dicho cosas indebidas e imprudentes, todos nos podemos confundir y todos cometemos errores. Seungmin sabe perdonar y una segunda oportunidad es lo que les queda. Esta es otra prueba de que hace lo correcto, al menos por ahora, es lo correcto.

Suspira un tanto, cierra el cajón y se lleva en sus manos el pequeño calendario, dejándolo en la mesita de noche al lado de la cama matrimonial.

Lo examinó un poco más, hasta que sus ojos se detuvieron en la página que señalaba su mismo mes.

Parpadeó confuso.

"Aniversario..."

Y sí, eso no se lo esperaba. Un sonrojo estropeó lo blanco de su piel y pronto estaba rojito. ¡Tenía anotada la fecha de la primera vez que se vieron! ¡De aquella borrosa noche, lo recuerda...! Oh no, ¿Cómo debería sentirse? Aquello es bastante importante en su relación.

El sonido de la puerta abriéndose llama su atención y gira el rostro. Minho sale del cuarto de baño con una toalla en la cadera, dejando ver su atlética figura. Apesar de no hacer ejercicio, Minho una vez le comentó que adoraba los deportes cuando iba en la secundaria y preparatoria, así que quizás se deba a eso.

Seungmin pareció babear al ver tal hombre y sus ligeros músculos a simple vista. Las hormonas con esto del embarazo lo tienen mal, muy mal. Minho se sienta a su lado, luciendo sonrojado como él cuando se dio cuenta del calendario en la mesita de noche.

― ¿Te molestó? ― Pregunta con cuidado.

Seungmin ríe ligeramente. Su hermosa y suave risa como el viento que cautiva los oídos del más alto.

― Es lo más hermoso que me has tratado de decir nunca.

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gracias por leer<3

desire of love ✧ knowminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora