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𝕄𝕠𝕣𝕒𝕕𝕠

No quitaba mi vista de los monitores, frente a mi estaba la "ventana" dónse se apreciaba el basto cosmos, viendose nada más que luces fugaces, tan solo un parpadeo vastaba para perderte de la infinidad de su extención, pasando a velocidad luz a traves de la galaxia.

Morita: ¿y qué planeas hacer, Morado? -me preguntó desde su asiento, mirandome preocupada- con todo esto... Las Diamentes... Rosa, Rose... Se desatara un holocausto, la gerra solo va a aumentar. Yo... Tengo miedo, tengo miedo de lo que pueda pasar contigo, con todo esto, ¿qué pasara despues? ¿Qué pasara si se enteran de la verdad?

Por primera ves desde que inicio el vieje aparte mi mirada de la pantalla, Morita no hacia más que mirarme con esos ojos angustiados, temerosos, ¿qué se supone que le conteste?

- yo... No lo se... Quisiera darte una respuesta, quisiera decirte que todo estara bien pero.... No lo se, a este punto no se que pueda pasar más adelante, pero lo enfrentare, yo soy parte de la mentira, fui complice al permitir que todo esto pasara, no solo esto, con la mentira de la rebolucionaria Rose cuarzo, también por permitir que trataran a Rosa de esa manera, a ustedes... Pero... Enfrentarme a las demas Diamantes... Si la otra ves que discuti con Blanco paso eso... No se que pasaria si la pelea se fuera mayores. -baje mi mirada, observando mis manos hechas puño, sentia impotencia- he sido tan incompetente, como guia, como lider.. Como Diamante... Soy muy debil...

Morita: ¡eso no es verdad! -se acerco, corriendo para quedar frente a mi, yo la mire desde arriba, ella era tan pequeña... O yo aún muy grande- ¡eres la mejor Diamente que hemos podido tener! Eres amable, bondadosa, tan divertida e inovadora...  ¡Siempre haces todo por que estemos bien!

- y ni dandolo todo es suficiente... -mire a la ventana, pese a mi tamaño gigantesco, me sentia tan diminuta frente al vasto vacío del espacio, como si solo fuera una insignificante mosca frente a una bestia, tan patetica e incapaz...- mirame Morita, mira como estoy, mira lo que he hecho y ni asi parece que hago un verdadero cambio, siento que cada ves pierde más el sentido todo esto, trato de ser fuerte, trato de ser una buena lider, una buena gema, una buena amiga, pero nada basta... -senti mis ojos arder, me mordi el labio inferior, ahogando mi tristeza, tragandome todo lo que queria gritar- ahora todo solo va de mal en peor...

Mis manos apretaban los costados de mi asiento, el sonido del cristal quebrandose inundo el lugar, para cuando me di cuenta avia roto mi asiento, los trosos volaron, mi energia se estaba desbordando.

Mi mente parecia nublarse, mis pensamientos solo eran negativos, volviendo se negros, hundiendome en la oscuridad de mi mente, las voces sonaban con más insistencia, recordandome que soy todo un fracaso.

Morita: tal ves sea así... -su mano se poso en la falda de mi vestido, jalandola un poco, su voz fue la que me trajo a la realidad, como una luz que cegaba y espantaba a las sombras que me atormentaban- pero no por eso eres una mala gema, haces lo que puedes, no te rindes, te importa esto, te importamos y lo demuestras, no tienes que ser perfecta, no necesitamos eso, no necesitamos a una Diamante, para eso ya tenemos a otras cuatro, nosotras solo necesitamos a Morado, la gema más amable, linda y cariñosa que tanto nos quiere y queremos, que ha estado con nosotras desde el inicio, queriendo hacer un cambio. Te queremos a ti, y es lo unico que importa, si todo esto te termina afectando, hundiendote y tratando de quebrarte, nosotras estaremos ahí para evitarlo -sus pequeños brasitos intentaron envolberme, un calido sentimiento crecio en mi, una sonrisa adorno mis labios- te apoyaremos siempre, sin importar si estas en lo correcto o te equivocas, siempre estaremos ahí...

lo frágil de un diamante Donde viven las historias. Descúbrelo ahora