🔹💠 Siempre lo supe 💠🔹

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❝ CAPITULO 19❞

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Luego de tanto pensarlo decidí tomar muy enserio las cosas halar con Astrid del tema del testamento que se encontró y los apoyos recibidos aun que remarco que no se les hace raro siempre fui de da esas sorpresas. Por el momento todo salió bien sobre el tema de Hans sus acciones lo volvieron un ser malvado y salimos libres de aquel incidente.

— Por lo menos estas libre de culpas Anna —le acaricio las mejillas.

— Nunca dude de ti amor mío, tengo una duda existencial —me mira—. Soy yo o te veo muy lindo.

— Gracias por halagos bello —la miro—. Pero te conozco y se que tienes algo ¿Cuéntame y te escucho?

— Estoy dispuesta a perder todo por ti —me mira—. Quiero enmendar mis errores y si es necesario depender de ti lo haria sin dudarlo.

— A decir verdad me salvaste aquella vez y eso demostró lo capaz que eres —la miro—. Pero de ser así viajemos a Veracruz a empezar una nueva vida juntos.

— No me importa eso solo con estar a tu lado —me abraza cariñosamente.

— Hablemos con Astrid y los dejamos vivir felices —correspondo.

Nos tomamos el tiempo de estar juntos para aclarar las cosas y dejarle en claro a mi propia hija que no estamos interesados en su dinero y nos iremos lejos, al principio pareció una mentira luego noto seriedad en los dos y fue como cayo en la verdad.

— Gracias a los dos por todo, les daré mínimo algo —manda un mensaje—. Mi abogada Valeria vendría para arreglar la herencia.

— Pon la fecha para que Anna quede bien contigo y no terminen en algo que no deseo —tomo la mano de mi hija y de Anna—. Quiero paz y nada de rivalidades entre las dos.

— De mi parte ya no los habrá o causare disgustos —dice Anna—. Nunca quise verme mal o ganarme un desprecio.

— Anna no te preocupes, teníamos esa mala imagen a causa de Hans solo fuiste una victima más —toma su mano—. Mi padre no le hubiera gustado vernos mal y tendrás un nuevo comienzo.

— Como el buen chofer que fui hay más —miro a Anna—. Ella es mi lugar feliz sin duda alguna, dejar todo esto nos daría una paz.

— Me da gusto verlos así —dice algo incomoda—. Arreglo la cita, les digo el día, lugar y la fecha para quedar.

Nunca vi dos personas que se veía como rivales a ser amigas, mi casa esta teniendo un excelente orden quizá es casi justo que termine todo, decir la verdad. Deje la casa y camine a donde vivia con Gothel y su hija tan adorada, su novio atento, todo esta encajando en su lugar. 

— Hola familia ya llegue y con noticias —entro a la casa.

— No les dije que volvería —me abraza—. Bienvenido a tu humilde hogar Estoico.

— Gracias por la bienvenida —le doy un beso en su cabeza—. Tenemos que hablar familia y hay que ver cuanto tiempo me queda.

— No me digas eso por favor . . . Aun no disfrutamos mucho de ti mi mejor amigo . . . —dice Gothel y llora un poco—. Siento que te falta mucho . . .

— Que mas quisiera pero las cosas en mi casa están acomodándose y me iré con Anna a vivir en Veracruz —los miro—. Me quiero despedir bien y saber que los dejo bien mentalmente y económicamente.

Volver en otra pielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora