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Beomgyu llevaba riendo un buen tiempo, era la primera vez que veía a su tía borracha y no sabía de las incoherencias que la mujer podía decir.

Habían pasado por el parque principal el cual tiene estatuas de animales, Seojin abrazo a una de ellas diciendo que si pudiera las adoptaría para que no estuvieran tan solas en el parque.

Con ayuda de Dajin, Beomgyu pudo acostar a su tía y fue la mujer quien le puso ropa más cómoda.

—Que vergüenza con tus padres.

Dajin negó. —No es la primera vez que se emborracha frente a ellos, la primera vez tuvo una plática con mi papá sobre los homofóbicos —tomo una pequeña pausa para quitarle los tacones a la mujer— Mi papá era homofóbico hace mucho, eso lo hizo más entretenido.

Beomgyu solo río y salió de la habitación para que Dajin pudiera cambiar completamente a su tía. El simplemente fue hasta la cocina para tomar algo de agua.

La cena de navidad no había estado muy mal, los padres de Dajin era demasiado amables y lo hicieron sentir como en familia.

«Eres como el nieto que nunca tendremos.»

Fue lo que dijo el padre de Dajin después de unos tragos encima.

Inclusive había recibido obsequios por parte de la señora Lee y uno de Hyesun.

—¿Tu te sientes bien? —pregunto la mujer apenas entró a la cocina.

Beomgyu asintió. —Solo fueron dos copas.

Por más que Dajin y Seojin le habían insistido al padre de la primera que no le diera alcohol a Beomgyu fue imposible hacerlo cambiar de opinión, alegó que Beomgyu estaba a punto de cumplir 18 y que un par de copas no le harían daño.

Beomgyu no estaba acostumbrado a beber, solo había probado el alcohol una sola vez y había sido junto a sus padres en una cena.

—Me debo de ir Gyu, si pasa algo me marcas.

El peli-negro asintió y camino con la mujer hacia la puerta, el menor la acompañó hasta la esquina de la calle de su casa para que no caminará sola a altas horas de la madrugada.

Seojin se despidió del chico y camino hasta su casa, Beomgyu se aseguro de que la mujer hubiera entrado y entonces se dio la vuelta para regresar a su casa.

Escucho un pequeño grito así que volteó, un chico corría hacia él con una pequeña sonrisa.

—¡Gyu! ¿Qué haces por aquí?

—Vine a dejar a Dajin pero ya me iba.

El menor asintió levemente. —¿Tuviste una buena navidad?

Beomgyu afirmó y le realizó la misma pregunta al chico, el menor le contó un poco de su noche al mayor y aunque Beomgyu no estaba interesado en lo absoluto lo escucho atentamente.

No quería ser grosero e irse, pero simplemente estaba un poco cansado y tenía que cuidar a su tía.

—.... Ahora solo estamos esperando a que lleguen unos primos para iniciar con los juegos. —finalizó con una sonrisa.

—Que gusto me da. Yoonwoo no es por ser grosero pero mi tía está borracha y debo de cuidarla.

El chico negó levemente. —No te preocupes, perdón por haberte parado.

Beomgyu se despidió del chico y continúo con su camino, Yoonwoo se quedó de pie observándolo por un tiempo más hasta que lo perdió de vista y decidió regresar a su casa.

Había salido a tomar un poco de aire cuando vio al peli-negro entonces decidió hablarle, sabía que estando cerca de sus amigos Beomgyu nunca le hablaría así que tomo esa pequeña oportunidad.

『Amnesia』•|𝐁𝐄𝐎𝐌𝐇𝐘𝐔𝐍|• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora