NUESTRA PROMESA DE AMARNOS

CAPITULO 5

Han pasado tres días desde que Betty vio a Armando junto a aquella modelo, por las muchachas supo que ellos han tenido sus cositas de vez en cuando y que ella al parecer se había hecho muchas ilusiones con él, solo que como todas había sido despachada "El doctor no era de los que se enamoraban"

La relación de ellos se había estancado, ella volvio a las formalidades y él a pesar de no entender el motivo, prefirió no preguntar. Además se había dado cuenta de algo que llego gracias a Cata "Chechy era la hija del tío Hermes" ¿Por qué se había olvidado de ellos? y con eso fue atando cabos y decidió hablarlo con su papá

Por eso dos días después de la visita de Cata, fue a casa de sus padres a cenar desde hace una semana que no los veía y su madre ya se lo estaba reprochando. Así que después de la oficina partió rumbo a la casa de su infancia

Cuando llego recibió los besos y abrazos de su madre como los reproches por dejarlos abandonados y después de disculparse mil veces con ella, saludo a su padre con una gran sonrisa. Se fueron al salón y sin más Armando se dispuso a sacar el tema

A: Papá ¿Tú recuerdas a Chechy?
DR: ¿Chechy? ¿La hija de Hermes? Pues sí, pero no la veo desde hace mucho tiempo -apenado-
A: Y al final supiste que fue de ellos...
DR: Lamentablemente no, ya sabes que los busqué un tiempo y después con la empresa fue más difícil... es más tu mamá me dijo que volviera a buscarlos y recibí la misma respuesta -acongojado-
A: ¿Cuál era su apellido?
DR: ¿Por qué? Ya te olvidaste, Pinzón...
A: Lo siento papá, pero han pasado muchos años -dijo apenado-
DM: Eso es verdad tu tenías tres añitos cuando llego Betty a nuestras vidas
A: La verdad es que solo recuerdo cuando fuimos a la hacienda de los abuelos y ahí estaba Chechy
DM: Jajaja Chechy, esa niña con su media lengua no podía decir Betty así que le salía de lo más gracioso -nostálgica-
A: Pero ¿Y el otro apellido?
DR: Solano...ay Armando ya me estas mareando con tus preguntas
A: Perdóname, pero era solo para corroborar la información que tengo
DR: ¿De qué hablas?
A: Recuerdas que te conté que contraté una secretaria y una asistente ¿No?
DR: Por supuesto, al final se la cediste a Marcela ¿No?
A: Exacto, pues mi asistente es Pinzón Solano, es más su nombre es Beatriz
DR: -levantándose de golpe- ¿La hija de Hermes?
A: La verdad es que no lo sé, hemos hablado, pero trato de no tocar el tema de sus padres, los perdió en un incendio junto a sus tías, su única familia
DM: -tapándose la boca con la mano- No, no puede ser...quizás ¿Una coincidencia?
DR: Puede ser, pero no lo creo serian muchas, iré a la empresa necesito saber si es ella y que es lo que paso con mis amigos, jamás me perdonaré lo que paso
A: Papá tranquilízate, no te conté mis sospechas para que te alteraras, mejor espera hasta la junta donde se verá todo lo del lanzamiento
DR: No, pero si es ella, tiene derecho a saber la verdad, que es dueña de la empresa, tiene que ocupar un cargo acorde a su...
A: Papá...papá insisto tranquilízate, claro que si es ella tendrá todo lo que le corresponde, pero me da la sensación de que ella no sabe nada
DM: Es lo más seguro, ella era muy pequeña cuando paso todo y de seguro Hermes guardo silencio con ese tema
A: Por cierto me vas a contar que fue lo que paso
DR: No hijo...
A: Pero ¿Por qué? -extrañado-
DR: Es algo de los socios que fundamos la empresa, además si es cierto lo que dices no vamos a mover las aguas
A: Como quieras... -encogiéndose de hombros-
DR: Pero yo quiero verla, ver si es ella
DM: Mi amor, ya lo harás, los has esperado tanto tiempo, que un poquito más no cambiara mucho las cosas

Desde esa noche Armando trato de averiguar el nombre de los padres de ella sin éxito alguno porque esta solo le hablaba de trabajo. Así que prefirió que su padre le hiciera las preguntas y averiguara la verdad y en esa tónica había llegado el día de la junta informativa sin siquiera sospechar en que terminaría todo