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La música seguía sonando dentro, al parecer aún estaban en baile, a lo lejos puede distinguir el carruaje imperial, espere a ver que el príncipe bajase para así saludarlo, pero quién bajo no fue mi prometido sino el primer príncipe.

Con ojos vacíos lo deje estar y simplemente me quedé sentada al lado de Licht, mi al parecer acompañante de la noche.

[Al día siguiente] Pov: Príncipe Alex.

Revise los papeles que tenía en el escritorio, mire la lista de acceso a la academia la cual iba a empezar dentro de tres días. Delante mío había un espejo pequeño en el que se reflejaba mi rostro, toqué las ojeras grises que tenía con una mueca de desagrado. Después de haber pillado a mi madre con su amante, no pude dormir toda la noche.

Es imposible que esto me esté pasando a mí.

Me eché las manos a la cabeza preocupado, si alguien se enteraba de este escándalo mi posición como príncipe heredero se vería en peligro, mi reputación y la de mi propia madre como emperatriz legítima estaría en duda.

Tengo muchos enemigos, todos los hombres importantes los tienen, necesito salir de esta de alguna manera pero hay demasiados ojos observándome ahora mismo y además si me voy a la academia no seré capaz de vigilar a madre o enterarme de todo lo ocurrido en el palacio.

no podré controlar nada.

Es importante que consiga mantener mi posición como príncipe heredero o sino padre se deshará de mí y le dará el poder a alguien más, mi hermano no puede ser emperador por los orígenes de su madre, pero si yo no lo puedo ser, sé que padre tiene más hijos ilegítimos por ahí sueltos....

Unos toques en la puerta me hicieron salir de mis pensamientos.

—Adelante—Autoricé recuperando mi composturas.

Un sirviente entro a la habitación.

—La princesa Emilia está aquí, solicita verlo—Me informó.

Esa hija de..

No, ahora con ella no puedo hablar, si hay una persona en la que menos puedo confiar o mostrar debilidad es a ella. Además, es cierto que es una detli y tiene mucho poder como princesa, pero cómo se atreve a venir sin antes enviar una solicitud y ni siquiera al palacio imperial sino al palacio de la emperatriz ha venido.

Me puse de pie y tire todas las hojas de la mesa al suelo con una expresión vacía. Me va a dar un paro cardíaco si sigo teniendo esta presión.

—¿Dónde está ahora?

—Abajo, su alteza, está en la sala de invitados.

—Bien, voy a bajar, ordena estás hojas y cuando vuelva prepárame un carruaje.

Él se inclinó profundamente tomado mi orden.

Salí de mi estudio pasando los grandes pasillos con alfombra roja y grandes ventanales que daban a los jardines de la emperatriz afuera, el sol brillaba fuertemente, baje las grandes escaleras y entre a la sala de invitados.

Ahí mi prometida, Emilia detli esperaba, sus ojos ámbar me miraron y sonrió yo le devolví la sonrisa cansado.

Ella se levantó y se inclinó, esta vez no intente detenerla, se sentía bien de alguna manera ver qué me quedaba poder a pesar de que desde la unión de los ducados y la situación de mi madre era más consciente de que mi posición como príncipe heredero era solo un chiste que estaba durando más tiempo del necesario.

Los dos nos sentamos uno en frente del otro.

—¿Qué le trae por aquí, princesa?—pregunté.

—Su alteza no vino ayer al cumpleaños de Milo, así que me preocupe por su estado.

Claro que sí, ¿tú? ¿Preocuparte por mí? ¿Quién te cree?

—Con que era eso, muy amable de su parte—Sonreí—Ciertamente he tenido mucho trabajo, así que como puedes ver en mi rostro no he podido descansar bien.

Emilia asintió con una expresión comprensiva.

—¿Y cómo se siente hoy su alteza?

Mal, pero contigo aquí peor, es como si una serpiente y un ratón estuvieran en la misma habitación, la serpiente esperando a que el ratón de un paso en falso para davorarlo, en esta ocasión yo soy el ratón.

—Un poco cansado, pero con algo de reposo mejoraré—Me puse de pie—Si eso era todo lo que quería, me tendré que ir aún no he terminado mi trabajo.

Emilia asintió.

—Entonces me voy primer, su alteza.

—Espera antes de irte—la detuve antes de que se pusiera en pie—Sabes que la academia empieza dentro de tres días ¿No?

—Sí, así es.—Afirmo Emilia.

—Bien, aunque la academia tiene esa política igualitaria entre estudiantes a pesar de tu jerarquía y familia, afuera de esta misma el nivel social sí es importante. Sé que por tu comportamiento—Señalé—estas muy acostumbrado a venir y salir de donde quieras sin ningun aviso o solicitud.—La cara de Emilia no tenía expresión alguna, pero ella sabía perfectamente a lo que me refería—Lo que quiero decir, detli—Me acerqué a ella—Es que no olvides que estás en un escalón debajo de mí, da igual lo bueno y comprensivo que haya sido contigo, no toleraré este tipo de desafíos contra mi persona ¿Entiendes?—Tomé una pause—En la academia te trataré como un igual, pero en el mundo real, vas a tener que saber bien cuál es tu lugar.

Emilia hizo una reverencia profunda.

—Disculpame si te he ofendido de alguna manera, su alteza, mis intenciones no fueron esas sino-

—Suficiente, no quiero escuchar más excusas—Me puse de pie—La próxima vez que quieras venir solicita una audiencia como todos los demás, así que no te vuelvas más arrogante de lo que ya eres.—la miré por encima, pero Emilia no subió la cabeza a mirarme para retarme algo que suele hacer.

Aunque esta vez es distinto, yo no estaba bromeando de costumbre con ella, estaba hablando en serio, no toleraré este tipo de tonterías y menos cuando tengo tantos problemas.

El trono del emperador será mío y sino hago notar mi presencia y mi poder en mis súbditos en el futuro no se someterán a mí. Los ducados han conseguido mucho poder en estos últimos años cuando nosotros la familia imperial nos hemos debilitado, no voy a dejar que se sobrepasen, hay que empezar a poner un orden antes de que los ducados unan fuerzas y se revelen.

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Holaaa
Perdón por actualizar tan tarde, pero es que estuve muy ocupada, pero tengo ganas de publicar otros capítulos y enseñar los dibujos que hice de los personajes en digital, espero que os haya gustado el capítulo y tengáis paciencia, os amooo XOXO♥️♥️

Manipulando el flujo de la novela [..]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora