El Dia Sin Aroma

Capitulo 26. Familia

Shinso Hitoshi

Hoy era cumpleaños de Eri, por lo que me dispuse a comprar el regalo ideal para ella, pase por varias jugueterias, pero sin querer me desvíe a un lugar que habia evitado por un largo tiempo.

Los policías me hacen varios cuestionarios y me preguntan el por qué de la visita, para mí suerte ella acepto verme y estaba detrás de un vidrio polarizado, como si fuera alguien tan peligrosa, si lo era, pero solo con palabras, por qué la realidad es que solo era una mujer indefensa que jamás mato a nadie....o eso creo, la muerte por sobredosis de Rei aún no me convence del todo.

–¿Que haces aquí?

Para mi Momo siempre fue hermosa y pulcra, ahora lucía muy diferente, su cabello había sido cortado y su piel estaba descuidada, sin hablar de las ojeras bajo sus ojos, se sabía bien que en la prisión uno no puede dormir por el temor de ser atacado en la noche.

–La verdad no lo sé –comento avergonzado por qué era la verdad, solo sentí la necesidad de que había algo inconcluso entre nosotros –¿Cómo estás?

Ella me ve fastidiada y golpea el vidrio con su mano.

–¡Genial!, No lo ves, me prépare toda mi vida para hacer justicia por los míos y estoy encerrada viendo cómo un estúpido alfa está libre sin pagar sus pegados, me encerraron por protegerme y querer ser libre de mi propio género.

Un policía se acerca alarmado por el ruido pero le digo que todo está bien.

–En parte es cierto –le doy la razón –pero también estás aquí por tu propia avaricia, tu y mi padre no son tan diferentes, eran capaces de destruir todo lo que obstaculizara su camino, aún si era su hija, aún si era tu esposo, tu familia, o un desconocido de un bar.

–¿Y que?, Quieres una disculpa–sus uñas arañan el vidrio y me ve como si fuera una presa fuera de au alcance –perdon por jugar con tu estúpido corazón y tu debilidad de alfa.

No era sincera, obviamente y eso que me hizo sentir menos culpable, ya que se forma indirecta soy responsable de su encierro, ya que había hablado con los Alfas junto a Gente.

–No estas pagando por ser un beta, Jane es beta y tiene una vida tranquila, también Aizawa, Mic, Tomura, tu problema fue tu avaricia.

Y sin más que decir salgo de aquel lugar, en espera de ya no volverla a ver en mi vida.

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–Eri, espero que te guste –Monoma le da a nuestra sobrina una pequeña muñeca de tela, de ojos púrpura y cabello de mora, una muy parecida a mi abuela, ya que de ella vinieron nuestros rasgos extravagantes.

–¡Gracias tío!

Ella le da un abrazo y luego abraza mi pierna, no podía ofrecerle mis brazos por que llevaba a mi pequeña princesa; Kami.

–Kami, felicita a tu prima–me agacho y dejo que Eri le de un beso a la cabellera púrpura.

Kami hace un puchero y toma un mechón de cabello de Eri, no lo jala con fuerza, pero intento abrir el pequeño puño de mi hija, ya que Eri debía ver a sus demas invitados.

–¡Kami!

Casi brinco al escuchar a mi cuñado, ruidoso como siempre.

–Hola Keigo–el toma a mi bebé y lo abraza con cariño, así era mi bebé, peleada por varios y solo en casa podía tenerla para mí tranquilamente.

–Hola Shinso, ¿Y mi hermano?

Ahí me doy cuenta que Monoma no estaba a mi lado, lo busco entre los invitados y lo veo hablando con Touya, desde que el había salvado a nuestra pequeña, Monoma era muy cercano al alfa, sabía bien que era un profundo agradecimiento, mismo que yo siento por el, pero era un poco molesto oler azúcar quemada en mi esposo.

De igual forma no debía sentirme amenazado, despues de todo Touya y Tomura se casarán dentro de dos meses y Monoma me quiere....creo.

–Esta con tu hijo–digo disfrazando mi molestia y Keigo se burla, claro que era perpicaz.

–Ya veo, te molesta que lleve a Kami con Enji, debemos practicar por nuestro futuro hijo.

Yo le doy el permiso y el se va feliz con su esposo, ahora sí me sentía fuera de lugar.

–Crisis social ven a nosotros –Tomura habla a mi lado y brinco por el susto, el estaba tranquilo jugando con su teléfono.

–¿Cuánto tiempo llevas ahí?

El levanta sus hombros no muy interesado.

–Suficiente para saber que tienes celos de mi prometido.

Si bien era algo serio, el estaba tan tranquilo.

–No tengo celos, ustedes se casarán –y Tomura apaga su teléfono y me golpea con el–Auch, ¡que fetiche tienes con golpear!

El se ríe y ve hacia nuestras parejas.

–Seria mejor si dijeras, "no siento celos, por qué me ama", Así como yo puedo ver a Touya con alfas, betas y omegas y no me importa, por qué se que me ama.

Aquello golpea mi orgullo y suspiro, me gustaría decir algo así, pero solo eramos dos esposos viviendo nuestros papeles sin darle nombre a nuestros sentimientos.

–Claro, eso es un buen punto.

Tomura ríe y se va en busca de Touya, veo que habla con el y después con Monoma.

No sé que le dice, pero Momoma camina a mi y puedo ver que está feliz, toma mis manos y me lleva lejos de los invitados.

–Tomura me dijo que quieres decirme algo importante.

"Traicionero"

Pienso y me quedo callado sin saber que decir.

–Oh, yo, bueno....

Monoma me da su atención, me ve con ilusión, con ...amor.

–Momoma...yo...tu–¿Que debía decir?, No lo se, puedo sentir el anillo en su dedo y uno de plata al lado de este que era por Kami, en mi mano también tenía dos anillos.

–¿Yo?,¿Tu?

Me pregunta y no tengo el valor, mi boca no quiere cooperar.

–Yo...tu...eres mi familia...

Monoma queda sorprendido ante mi confesión, y puedo ver qué sus ojos se cristalizan, ¿Tan malo fue lo que dije?

–Perdon, dije algo malo.

El niega y besa mis manos.

–Tu también eres mi familia Shinso Hitoshi, mi esposo, el padre de nuestra hija...la persona que quiero.

Siento como un nudo se deshace en mi garganta y me acerco más a él.

–¿Y la persona que amas?

El asiente entre lágrimas.

–Si, también puedes serlo, pero primero hazme amarte, más de lo que ya lo hago.

Y lo beso, por qué ambos lo necesitábamos, por qué era lo correcto, por qué ahora teníamos permitido amar, ya no era una obligación del estado, era nuestra voluntad, nuestra decisión.

Tal vez no fue tan malo ser el último alfa en llegar a la casa de citas.

Fin