amor en el apocalipsis

"Tal vez"

Llegamos a la granja, con Glenn y Daryl, a Hershel no le hizo mucha gracia que Daryl estuviese, ya que, bueno, le había apuntado con una ballesta a la cabeza, pero Hershel es buena persona y muy creyente, así que le perdonó, a la mañana siguiente fuimos a por los demás, no parecían malas personas la verdad, tal vez si lo son pueda convencer a Hershel de que se queden, hay uno que realmente me llamó la atención, el asiático, Glenn. Llevan un día aquí, y hoy planeamos salir a buscar a Sophia, la hija de Carol. Estábamos al rededor de un coche, planeando. Rick dijo.

-Yo iré con Daryl, Miriam con Glenn y Maggie con Shane.
-Me parece bien.

Dije sonriendo y miré a Glenn.
Salimos en busca de Sophia, casa uno tomó una dirección distinta.

-Oyee Miriam, hay una cosa que quería preguntarte.
-Si claro, dime.
-Tu crees, bueno... He visto que la granja es buen sitio y tal vez tú puedas hacer que Hershel no nos deje solo una semana, si no, siempre.
-Ehh, bueno, yo... Lo intentaré, pero no sé si pueda.
-¿Eh? O-h, no, lo siento, no quería parecer insistente, pero ya sabes, no es fácil vivir ahí fuera, y bueno, pensé-, ¡ahg! Dejemos el tema porfavor

Me reí y Glenn río junto a mi, pasó una hora.

-¿Crees que la encontraremos?
-Claro, seguro que si, su madre es Carol ¿No?
-Si, Sophia es la única persona que le queda, y ahora está por el bosque pérdida...
-Tranquilo, te aseguro que le encontraremos.
-No sé, es sólo una niña, sabes, ella era diferente en el grupo.

Bajé la mirada al suelo.

-Eres una buena persona, Glenn.
-¿Por qué me dices eso ahora?
-Porque lo sé.
-Tu si eres una buena. persona de verdad.
-No me conoces.
-No tú a mí

Me quedé callada por un momento.

-Lo intuyo
-Pues yo lo sé, me acogiste en la granja sin ninguna razón alguna, sabiendo que tal vez soy una amenaza.
-Pues tal vez yo sea tonta

Dije y nos reímos.

-Sera mejor que volvamos, ya es la hora.
-Ah, si, claro, volvamos.

Nos pusimos en marcha a la granja cuando un caminante nos interrumpió.

-Ya me encargo yo, quiero aprender.
-¿Segura?
-Si, yo puedo.

Le clave el cuchillo en el cuello, al sacarlo se me rompió.

-¡Joder!
-¡Miriam!

Glenn corrió y mató al caminante.

-¡¿Estás bien?!
-Ahg, joder, si lo estoy...
-¡Me diste un susto de muerte!
-No te preocupes tanto por mi anda.
-¿Como puedes decirme eso? ¡La que me caería si vuelvo a la granja sin ti!
-Si, la verdad si, he pensado lo que me dijiste antes, y tal vez pueda convencerle.

Yo y Glenn sonreímos y volvimos a la granja.