Durante el camino Daryl no le quitaba de encima el ojo a Michonne, no confiaba en ella, al llegar nos escondimos detrás de un coche que estaba al lado de la valla.
-La saltaremos.
-¿Que dices? Nos oirán.
-No, iremos por atrás, casi nunca hay hombres vigilando allí.
-Si esto es una trampa te mataré.
-Como tú digas.Michonne se levantó y nosotros detrás de ella fuimos a la parte de atrás.
-Tu primero.
Le dijo Daryl a Michonne.
-Como no.
Daryl le ayudo a subir a Michonne y luego a mí, después el subió, nos pusimos detrás de unas casas y Michonne sacó un papel y comenzó a dibujar un mapa de la comunidad.
-Bien, aquí estamos nosotros y aquí están ellos, tenemos que pasar delante de unos guardias si queremos sacarlos de ahí.
-Eso es muy arriesgado.
-No hay otra opción.
-Joder, esta bien.Pasamos por donde deberían de estar los guardias pero no estaban.
-Ah, tal vez hayan ido a por unas armas, no sé...
Entramos en una casa y Michonne nos indicó y señaló son su mano a un sótano.
-Estan allí.
-¿Y tú qué?
-Tengo que hacer algo antes.Miriam y Daryl bajaron al sótano, había dos hombres vigilando y Daryl les clavó una flecha, arriba se estaban escuchando golpes y ruidos, pero no le tomamos mucha importancia y abrimos la puerta.
-¡¡Glenn, Maggie!!
-¡Joder! ¡Miriam!Maggie vino corriendo y me abrazó y luego fue con Daryl.
-Miriam...
Glenn vino hacia Miriam y le besó.
-¿Estás bien? ¿Que te han hecho? ¡¿Por qué estás lleno de sangre?!
-¡Eso ahora no importa! ¡Tenemos que salir de aquí!Miriam apretó los dientes, agarró del brazo a Glenn y salió corriendo hacia fuera, al salir se chocaron con Daryl que estaba con Maggie.
-Joder, que susto !¿Que hacemos ahora?!
-Tu y Glenn iros fuera.
-¿Que? ¡¿Por qué?! ¿Y vosotros que?
-Maggie está en buen estado para pelear, Glenn no y alguien tiene que ayudarle, ir a unos kilómetros de la carretera, luego vamos yo y Maggie, confíar en mí.Miriam tragó saliva y salió fuera, estaba todo lleno de hombres armados, y parecían enfadados.
-¡Vamos, por aquí!
Glenn y Miriam escalaron la valla y salieron corriendo hacia el bosque y luego a la carretera.
-¡Joder, joder!
-Miriam tranquila.
-¡No me pidas que esté tranquila! Acabo de dejar a Maggie allí con docenas de hombres armados.
-Estaran bien, Daryl cuidará de ella.
-¿Y si los matan?
-No digas eso, eso no pasará.
-Tu no sabes eso.
-Y tu tampoco, o- oye a ver dime ¿Que quieres que hagamos entonces?¿Ir allí a pelear también? Sabes que no podemos hacer nada, solo esperar y rezar para que estén bien.
-No lo entiendes, tú no lo entiendes.
-Te estoy preguntando que quieres que hagamos, respóndeme.Miriam suspiró y se quedó callada.
-Eso mismo pensaba.
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amor en el apocalipsis
Любовные романыMiriam, una joven de pelo castaño rizado, ojos marrones y piel clara se enfrenta a un apocalipsis, pero no sola, junto a un asiático repartidor de pizzas y un grupo en el que cada vez serán menos