amor en el apocalipsis

buenos días.

Pasó la noche tranquilamente, de vez en cuando se escuchaban gruñidos y algunos golpes que provenían de fuera, hacia bastante frío pero, lo importante es que estaban mejorando todos, aún había bastantes dudas por resolver, pero estaban bien, no podían pedir nada más, ahora la prioridad era encontrarse con los demás.

06:36 a.m.

Mimi se despierta, Dale y Carol aún duermen, Mimi revisa la herida de Dale, la limpia como puede y le pone una venda nueva, sale afuera a matar a unos cuantos de caminantes que estaban alrededor del autobús, camina un poco por la zona haciendo tiempo,  revisa a Dale y a Carol, aún duermen, cierra más puertas del autobús y va a un pequeño río cercano, llena las botellas de agua, de camino mata a unos cuantos caminantes.

07:23 a.m.

Mimi abre las puertas del autobús, entra y ve a Dale sentado en el mismo sitio, gira la mirada y ve a Carol haciendo unas muletas con palos y vendas.

-Ya habéis despertado, yo estaba fuera, asegurando la zona, ¿Qué tal estáis?

Dijo Mimi mientras entraba al autobús.

-Yo estoy haciendo unas muletas para Dale, las necesitará, y yo, bueno, estoy bien.

Carol le sonrió, después de unos minutos terminó las muletas.

-Bueno, ya están listas, pruébalas.

Carol y Mimi ayudaron a Dale a levantarse, le dieron las muletas y le ayudaron a bajar del autobús.

-Vaya, es más cómodo de lo que me imaginaba

Dijo Dale con un todo chistoso.

-Bien, y ahora que?
-Tenemos que buscar a los demás, ellos deben de estar por aquí.
-O tal vez no, tal vez siguen en la prisión, no? Cuando nos fuimos habían derrumbado las vayas pero no se habían ido, tal vez... Bueno...
-Si! Carol tiene razón! Tenemos que ir.
-Si claro, Miriam, ahora dime tú dónde coño estamos!

Dale suspiró arrepentido y dijo.

-Perdona por eso, pero es cierto, no tenemos mapa, ni nada por el estilo, estamos en mitad de la carretera rodeados de bosque! Es muy poco probable que encontremos la prisión, o a alguien.
-Dale, si una cosa me enseñaste fue a tener fe.

Carol sonrió al verlos y dijo

-Venga, cerca habrá unas casas o algo, tal vez tengan un mapa.
-Si, eso, yo solo quiero encontrar a Glenn y a los demás.

Caminaron por la carretera sin rumbo, matando a los caminantes que se cruzaban por el camino, hasta llegar a un pequeño pueblo.

-Entramos a esta?

Preguntó Mimi mientras señalaba una de las casas, Dale y Carol asintieron y entraron, con suerte, mientras revisaban los cajones del salón y demás, pudieron encontrar un pequeño mapa, no era muy grande.

-Ey! Mirad esto! Dale, tú sabes orientarte con mapas, no?

Dijo Miriam mientras sostenía el mapa en las manos. Dale le miró y sonrió.

-Si bueno, de joven aprendí algo, dame a ver.

Los tres se pusieron a intentar comprender el mapa, mirándolo extrañamente.

-Esta es la prisión, no?

La señaló Carol

-Si! Esa es! Y ahí está la ruta que seguimos, y ahí este pueblo, vaya... Pues está a a unos kilómetros.

Dijo Dale, luego miró con una sonrisa a Mimi, pero ella no sonrió.

-Que te pasa?
-Es que, ahora que lo pienso, si la prisión siguiera en pie... Es decir, si ellos siguieran vivos, no creéis que habrían vuelto a por nosotros?...
-Si, bueno... O tal vez tienen mucho lío y no han podido.

Mimi se levantó rápidamente y salió de la casa, Dale y Carol la siguieron.

-Mimi! Para! Dale no puede ir tan rápido!! Para! Que haces?!
-Tengo que ir!
-Sola no podrías!! Para!

Carol le agarró del brazo y la paró.

-Mimo para, si vas sola a ese ritmo te mataran, mira, aquí debe de haber coches, buscaremos alguno que funcione e iremos, si?
-.... Esta bien.

Tras una media hora buscando algún coche, encontraron uno, no tenía mucha gasolina, pero algo era algo. Se montaron en el coche, Carol conducía, Mimi y Dale estaban detrás. Pasó unas dos horas de camino hasta que el coche se quedó sin gasolina.

-Mierda.
-Que pasa?
-La gasolina.

Los tres salieron del coche y comenzaron a caminar hasta la prisión.

-Bueno, quedará una media hora o así, no?
-Si, el problema es que ya casi anochece, tenemos que darnos prisa

Ordenó Carol mientras aceleraba un poco el paso, al llegar a la prisión pudieron verla desde una pequeña colina, estaba llena de caminantes, alguna que otra torre ardiendo, las vallas caídas...

-Oh dios, Esto ha sido un desastre... Ellos... Glenn, Maggie, Beth... Ellos estaban ahí...

Dijo Mimi y se tapó la boca mientras miraba.

-Ey, como te dije, ellos son fuertes, vale? Estarán bien.

Dale abrazó a Mimi mientras miraban la prisión...