Ahora que somos tres lobos en la manada, tuvimos que reorganizar los horarios por lo tanto hoy me toca guardia con Paul, así que estábamos dividiéndonos el terreno.
-¿Que lado de la reserva vas a vigilar? - le pregunte mientras caminábamos
-Amh... ¿La parte de la Push?
-Ok, yo cuido al oeste y norte, tu cuidas el este y sur - dije separándome un poco de el
-Bueno - dicho esto ambos nos transformamos y comenzamos a correr en direcciones opuestas
No había mucho que hacer o ver por lo cual opté por caminar por el bosque, hasta que llegue al final del tratado, donde comienza el terreno de los Cullen y termina el nuestro.
Olfatee el aire y sentí un gran picor molesto en mi nariz, (que olor más repugnante, dios mío), me aleje de allí y comencé a caminar hacía la dirección opuesta a la que estaba, llegue a un río, me acerque y vi mi reflejo.
Mi loba es muy linda, me gustan sus colores finos pero rudos a la vez, al estar feliz mirándome vi como mi loba sacaba la lengua y hacia una mueca parecida a la de una sonrisa, se me hiso graciosa la cara que hizo mi loba por lo cual me reí y mi loba hizo un sonido simulando una risa.
Comencé a correr sin dirección alguna, disfrutaba del viento en mi cara, miraba todos los arboles a mi alrededor, vi cada animal y insecto que se cruzaba por mi camino, pase gran parte de mi turno corriendo y saltando por todas partes, pero no encontré o vi algo extraño.
Al ser el día de mi cumpleaños Sam no me regaño por no hacer la guardia como debería, a la hora del almuerzo mi papá y yo nos fuimos a Seattle y compramos ropa, comida y pasamos a comer hamburguesas a un local, los chicos me dijeron feliz cumpleaños pero no me dieron regalos ni nada de eso ya que yo les pedí que no me dieran nada. Ya que no me gusta que la gente gaste dinero en mi y estamos muy ocupados como para comprar regalos o celebrar algo.
Al día siguiente fui a la casa de Sam ya que me llamó para decirme que tenia que ir para allá ya que me quiere comamos todos juntos, en el camino estuve pensando en como hacer que Paul y yo volvamos a ser los de antes.
-¿En que piensas tanto? - me pregunto Sam al frente mío, estábamos comiendo y al parecer deje de hacerlo y me quede mirando a la nada.
-Yo... no es nada - mire de reojo a Paul y al parecer Sam entendió que le pedía que nos dejara a solas ya que se levantó de la mesa y se llevo a Emily con el - Paul.
-¿Qué? - dijo mirándome de reojo sin dejar de comer
-Amh... yo quería saber como te fue con Verónica.- dije intentando disimular el nerviosismo que ahora mismo siento
-Mh ella y yo terminamos hace mucho - yo lo mire impresionada - No te hagas la que no te lo esperabas, paso exactamente lo que me dijiste la vez que peleamos.
-¿Te fue infiel? - dije levantándome de la mesa de un movimiento brusco
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-Ah no, esa perra me va a escuchar - dije saliendo de la casa enojada, entré en fase y Paul me siguió intentando detenerme, cosa que claramente no funciono.
Gracias a los recuerdos de Paul sé cómo es el olor de Verónica por lo cual me guíe con eso, cuando estaba llegando a la casa de ella me cambie de ropa y camine rápido a la casa.
Cuando llegué toque la puerta con mucha fuerza y repetidas veces, cuando alguien abrió me di cuenta de que era Verónica por lo cual hable.
-Sal de la casa - dije seria
-¿Que?
-Que salgas de la maldita casa Verónica! - la chica me miro sorprendida y salió - ¿Qué le hiciste a Paul? - dije caminando para estar al frente de ella mirándola a los ojos
-¿Qué te importa? - le di un golpe en la nariz haciendo que comience a sangrar, pero no se la rompí - ¿Qué te pasa, maldita loca? - me acerque a ella con intenciones de darle otro golpe pero ella hablo rápidamente - Esta bien! Me acosté con otro estando con el!
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-Mira - dije respirando agitadamente, intentando controlarme - Te veo cerca de él y te rompo la cara, mira que no me va a temblar la mano al hacerlo - dije cerca de su cara de forma intimidante.
-O~Okey - dijo tartamudeando
- Bien, ahora quiero que digas que lo sientes - saqué una grabadora de mi bolsillo, la saqué antes de salir de la casa y la traje en mi boca
- Lo siento - dijo ella mirándome asustada, grabé el audio y me fui no sin antes darle otro golpe
Caminé de regreso al bosque y me transforme nuevamente, comencé a correr en dirección a la casa de Sam, cuando llegue vi que Paul ya estaba allí, él se levantó y vino a donde estaba yo, se acercó a mi y tomo mi cara inspeccionándola.
-¿No te hizo nada? - pregunto mirándome
-No, ve a verle la cara a ella - dije riéndome, camine hacía el sillón de la casa y me senté
-¿Por qué lo hiciste? - me pregunto al frente mío con los brazos cruzados, pero no esta enojado.
-Mh, porque no voy a dejar que nadie más te dañe no después de lo que hicieron tus padres así que por eso lo hice - dije sincera, el me sonrió
-A pesar de estar distanciados ¿Te preocupas por mi?
-¿Qué dices? obviamente me voy a preocupar - me levanté del sillón y lo miré frunciendo el ceño
-Ya ya, no te enojes, pulgosa - comenzamos a reírnos, nos miramos por unos segundos y finalmente nos abrasamos, sonreí en medio del abraso.
- Te extrañe pulgoso - dije abrasándolo más fuerte.
-Aunque no me creas, yo también - dijo besando mi coronilla
Luego de eso Sam llegó y nos vio abrasados por lo cual le sonreí discretamente y el asintió, cuando llego la noche me fui a mi casa y como en los viejos tiempos Paul me acompaño hasta la puerta.
-Me alegra que nos arregláramos - dije sonriendo parada en la entrada de la casa
-A mi igual, se sentía raro no tener con quien hablar en clases - dijo el mirándome con una sonrisa amable
-No volvamos a pelearnos, ¿Si? - dije levantando el dedo meñique
