Bienvenido al Drama ( Tom x Jake )

«Interacción»

   El siguiente día pasó para algunos como una noche cálida y relajante, pero para otros fue una espantosa y helada tortura que parecía no tener fin. En el equipo púrpura poco a poco se despertaban con el ruido de madera quemándose, y todos se dieron cuenta de que se trataba de Lill que había iniciado otra fogata.

—Buenos días chicos, ¿pudieron descansar bien?.— les preguntó la líder de las niñas exploradoras

—Si, fue una buena siesta.— respondió el europeo estirando su cuerpo

—¿Una siesta de siete horas?.— habló el muchacho de lentes confundido

—Muy gratificante, te lo recomiendo.

   La mayor rió para sí misma; el aroma dulce atrajo la atención del lado femenino del equipo al instante.

—Eso que huelo son... ¿Moras?.— soltó la pelirroja peinándose tranquila

—No solo eso, también bayas y arándanos.— indicó la pueblerina terminando sus coletas rubias

—Me levanté temprano y aproveché a conseguir el desayuno, algo liviano pero no menos nutritivo.

—¡Yupi~ adoro las bayas!.— comentó la niña tomando una con libertad

—Asombroso.— Nick le sonrió coqueto provocando un sonrojo en la mujer

   Mientras tanto, el integrante del equipo que salvó la peor parte de la noche sintió como una mano le movía el cuerpo con suavidad pero con la insistencia para que despertara. El de cabello teñido abrió poco a poco los ojos y vio al chico incomunicado vocalmente, quien le sonreía de manera amigable.

—Buenos días Drew, ¿cómo dormiste?.— le saludó cubriéndose con la manta

   El pecoso alzó el pulgar y le enseñó su libreta escrita.

—“Tom consiguió comida, quiere que levantemos a todos”, está bien, deja que me levante.— contestó Jake saliendo de su pereza como un gato

   Uno por uno se levantaron y se dirigieron al corazón ardiente de la tienda donde el integrante misterioso cocinaba con dos ramas seis pescados.

—¡Wow Tom~ esa es buena pesca!.— comentó Jake estirando sus brazos

—Las mejores pescas son las madrugadoras.— exclamó el de mirada cian sin quitar la vista de la comida

—Espero que no los hayas hecho sufrir a los pobres pececitos antes de matarlos.— le cuestionó la de piel morena acomodando su suéter rojo

—No soy un sádico.— dijo rodando los ojos desinteresado

—Más te vale, o te prometo que sacaré tu pequeño cerebro de tu dura cabeza y se lo daré de comer a los pájaros.— le amenazó con una gran sonrisa

   El contrario detuvo su labor para caminar hacia la muchacha y quedar frente a frente, el aura cortante e imponente del joven hizo reaccionar a Gabby para que volviera en sí.

—¿Disculpa?.

—Digo.. Espero que sea así...

—Cuidado como le hablas, tonto.— se metió Grett entre ambos

—Tom, solo es un malentendido, no hay porque hacer alboroto.— Jake también intervino tomándole del brazo

   El nombrado le miró fijamente y suspiró para volver a su trabajo. Las chicas se fueron por un lado y los chicos por el otro.