[Omegaverse] [Don't go away #2]
«Tras cumplir con el destino que los dioses profetizaron para su futuro, Jeongguk ahora tendrá que encaminar a sus dos hijos al cumplimiento de sus propios destinos, por mucho que estos no se encuentren envueltos en f...
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El rumor sobre las "extrañas preferencias" del príncipe Jeon Yongshik fue extendiéndose por todo el pueblo en menos de un día entero. La denuncia había llegado a manos de los líderes al amanecer, siendo ellos los únicos que supieron de esto hasta que, al atardecer, dicho rumor fue ventilándose a causa de los sirvientes de palacio, quienes se encargaron de llevar la noticia por todos los rincones del pueblo principal. No existió mucho por hacer tras ello, pues ya todos parecían haber obtenido una opinión negativa a la postura del joven alfa, por lo que se pactó tener una reunión de Asamblea con el implicado para que esta noticia no llegara a mayores dentro del pueblo principal y para que aquel asunto se resolviera cuanto antes.
El llamado sorprendió a los Jeon en plena cena, cuando Yongshik había llevado a Minjoon a su hogar para presentárselo a su familia como su pareja oficial. Al principio, sus hermanos se hallaron sorprendidos por tal declaración, pues era muy poco común una relación entre dos alfas. Creyeron que se trataba de una, pero tras escuchar las palabras de Yongshik y tras verlo tan feliz al lado de Minjoon, comprendieron que aquel romance llevaba muchos años de haberse formado y que ambos guardaban un inmenso amor en sus corazones. Eso fue lo único que sus hermanos necesitaron para apoyarlo en su decisión, aunque era Jimin quien, tras saberlo de propios labios de su esposo, lucía mucho más emocionado que los demás.
Para el omega, no existía mejor pretendiente para su hijo. Minjoon no solo era una buena persona, también era un alfa fuerte, inteligente y muy decidido, además de ser el hijo de sus amigos. El joven alfa también era responsable y capaz de defender a los demás con su fuerza y determinación. Estas cualidades fueron suficientes para que Jimin observara con buenos ojos su noviazgo y también para que les prometiera ayudarlos a mantenerlo en secreto hasta que ellos mismos desearan hacerlo público. Aunque aquella declaración debió agilizarse por culpa de los rumores nacientes.
La Asamblea no aplazó la reunión por ningún motivo y solo dos días después de haberse emitido aquella denuncia anónima, Yongshik fue sentado en medio de la sala de reuniones para que brindase testimonio de lo sucedido, donde se le pedía que negase todo tipo de rumores mal infundados para que, de esa manera, el prestigio de la familia real no se viese manchado.
Jimin, quien estaba allí como uno de los representantes de la familia real, tuvo que callarse toda la sarta de insultos pensados hacia los miembros de la Asamblea por colocar a su hijo mayor en una situación tan vergonzosa como aquella. Yongshik no era capaz de emitir palabra una vez que se le informó sobre los hechos ocurridos, pues su mente se detuvo en el instante en que el portavoz leyó la denuncia anónima, específicamente en la frase donde se mencionaba haberlo encontrado besando a un alfa cercano a su familia.
―Los hechos narrados dentro de esta carta no solo sugieren que usted siente cierta atracción por los cambiaformas de su misma clase, joven Jeon ―mencionó uno de los miembros de la Asamblea―, sino también que esa es la razón por la que se ha negado rotundamente a pactar un compromiso con el omega Choi, quien llegó aquí hace más de una semana para que usted lo despose cuanto antes. ¿No debería aclararnos esto, príncipe?
