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SIEMPRE HABIA ESCUCHADO HISTORIAS SPBRE CRIATURAS QUE TOMABA la sangre de las personas siempre creyó que eran simples leyendas, pero he aquí ella siendo la prueba misma que existían y demasiados de hecho hasta ellos tenían sus propias peleas como ahora.
- Dime quien te envió - ordena Margaret
- El clan Romano - dice el hombre frente suyo
El hombre en cuestión era agarrado por los brazos mientras que la rubia estaba frente suyo con un vestido negro y su cabello suelto y una mirada rojiza penetrante, Margaret Vulturi la sombra de Aro Vulturi.
- Creo que ya sabemos cual será su destino - dice con una sonrisa Claius
- Felix - habla Aro
Sin más el hombre nombrado arranca la cabeza de vampiro haciendo que la rubia mire hacia otro lado ante la horrenda imagen frente suyo.
Se alejo del lugar, últimamente solo servía lo que los reyes le ordenarán y después de eso se escondía en lugar donde pueda ver lo que sucede de las grandes paredes en que vive, no puede salir, solo cuando caza, pero el tan solo pensar quitarle la vida a una persona hace que sus ganas de alimentarse se vayan, pronto varios comenzaron a ver que la quería y amada Margaret se estaba convirtiendo en una copia de Marcus, algo que no le agradaba a Aro.
- ¿Sucede algo mi Maggie? - dice apareciendo
《 Mi Maggie 》
Piensa la rubia, aquel apodo comenzo cuando paso su estapa de neofita, aquel tonto apodo lo odiaba era como si ella le perteneciara a él y aveces parece así. Mirando el cielo nublado con una mirada sin emoción, sin chispa como el vampiro mayor solía recordar.
- No sucede nada - contesta con la mirada ahora perdida
- Bueno tu mirada dice lo contrario, pero no te preucupes tengo algo que puede alegrarte - habla con una enorme sonrisa
Saca una muñeca de cabellera rubia con un vestido azul detallado, desde su transformación Aro Vulturi la ha tratado como a una niña pequeña, como su hija, su más grande adquisición entre ellos darle distintos regalos, los más frecuentes son vestidos o muñecas.
- Gracias - dice agarrando el juguete con delicadeza mientras posa sus dedos en el cabello bien cuidado de la muñeca
- ¿Te gusta mi Maggie? - cuestiona el hombre ansioso
- Si - responde alegrando al hombre - Es igual de linda como el resto -
Sin más resive un beso en la frente del mayor quien se retira al saber que su regalo fue bien resivido.
La rubia ve a la muñeca que tiene entre sus manos, sobretodo sus ojos verdes hechos de cristal, si le gustaba las muñecas ya que cuando era niña nunca resivio algo tan hermoso como aquello, pero a pesar de todos los regalos realmente no se siente feliz.
- ¿Otra muñeca? - cuestiona una voz detras suyo
Voltea encontrándose a Marcus Vulturi, cuando lo conoció le tuvo algo de miedo ya que este no sonreí de hecho siempre traía la misma expresión de aburrimiento y poco interés de lo que sucedía a su al rededor, pero con el tiempo aquel hombre se convirtió en una gran compañía y consuelo para ella sobretodo ahora.
- Creo que quiere ver otra vez mi reacción cuando me entrego mi primera muñeca - dice observándolo
- Lo recuerdo, saltaste de emoción y si no fueras inmortal seguramente hubieras llorado de la felicidad - comenta sentándose al lado de ella - ¿Ahora que sucede? -
La primera vez que hablaron fue por su comienzo a desinteresarse en las cosas que le emocionaba como pasar horas en la biblioteca, estar con sus hermanos, salir a cazar ya que era la única vez que salía al exterior, luego fue su falta de apetito y culpabilidad en asesinar a otro humano para comer y finalmente en como comenzó a ver que Aro se conporta posesivo con ella sin dejarla salir algo que solo la entristecia aun más.
- No lo se - responde - Se siente tan extraño todo, es como si la emoción que sentía al tener una nueva oportunidad se hubiera ido incluso llegué a pensar que hubiera sido mejor morir aquella noche y que me enterraran al lado de mi padre -
Fue cuando Marcus por primera vez en que se conocían la abrazo. Conocía aquella sensación como si te estuvieras ahogando y que estuvieran en un túnel lleno de tristeza y poco interés del que no puedes escapar es lo que sintió cuando perdió a su amada esposa.
Mientras tanto Maggie quería llorar, pero sabía que no podía así que simplemente sus ojos se cristalizaron sin soltar ninguna lágrima mientras buscaba confort en los brazos del vampiro.
Pronto todos comenzaron a notar que Marcus Vulturis aveces tenía una pequeña sonrisa al tener a Margaret a su lado, algo mas que hacía que Aro no quiera soltarla ni para que vaya a cazar de hecho le pedía a uno de sus guardias que trajera siempre una copa de sangre para Maggie, en seguida aquella rubia se volvió muy famosa en el mundo vampiroco ya que era alguien importante y poderosa en el clan Vulturi de hecho varios comenzaron a temerle debido a su don.
Al convertirse supo que tanto ella como sus hermanos tenía dones y que desde humanos lo tenían, pero no se desarrallo hasta ahora.
Maggie siempre se preguntó como era capaz de convencer tan rápido a las personas y era por que ella tiene el don de manipular a las personas con tan solo pedírselo un don sin duda peculiar.
