Esclava Sexual | CNCO Y Tu [+18] (Editando)

29; Venganza

Narra (______)

Al fin escogí un bikini, eso mata todo, hasta tipas locas. Era verde aqua, la parte de arriba era top, lo cual no tenía tirante y solo se amarraba de la parte de atrás, lo que lograría un bronceado perfecto la parte de abajo era normal y del mismo color.

Tome un sombrero de la corta con un listón en la parte de arriba del afa café claro, unos lentes Ray-Ban y moje mis labios. Me coloqué unos shorts de mezclilla corto encima y abrí la puerta como toda una diosa.

Richard y Zabdiel se encontraban afuera de mi habitación.

—Dios, que hermosa — dijo Richard.

—Valió la pena esperar el sol — dijo Zabdiel sonriéndome.

—Gracias — dije sonrojándome —No sabía que estaban aquí.

—Ya no hables más — dijo Zabdiel — Vamos a divertirnos.

—Un consejo, acaba con ellas, hermosa — comento Richard.

Me fui tomada del brazo de cada uno, cuando llegamos, Christopher y Erick estaban con las 2 tipas en la alberca, muy juntas a ellos.

—No seas tierna — dijo Zabdiel en mi oído — O te destrozaran.

Nos dirigimos hacia los camastros y mientras pasábamos por la piscina, las 2 tipas se me quedaron viendo, solamente reí ante eso y seguí caminando.

—¿Entramos? — pregunte y los chicos se quitaron las camisetas.

Los reyes de los abdómenes perfectos estaban ante mis ojos, eran todos unos bombones.

Me agache para quitarme el short que traía puesto, haciendo que hasta los meseros voltearan a verme. Me sujete el cabello en una cola de caballo y me deje los lentes.

Era hora de comenzar a ser la envidia de las demás. Pensándolo bien, sería mejor torturarlos más, solo un poco más.

—Zabdiel, Richard — dije llamando su atención, pero no la de los demás — ¿No quieren ir a la playa mejor? Es que siento este lugar como toxico, lleno de perras e idiotas.

En cuanto termine de decir la última frase, todos me voltearon a ver. ¡Perfecto!

—Si quieres vamos a luna, princesa — contesto Richard amablemente.

Salimos de la piscina y comencé a caminar sexymente, movía mis caderas por todos lados, llamando la atención de los chicos junto a las perras esas.

Salimos del área de la piscina y atravesamos como un tipo muelle para llegar a la playa, varias personas, que la verdad se veían de primera clase, me miraban.

—Sabíamos que ibas a querer escapar de ahí— confeso Zabdiel.

—Escapar de problemas no está en mi diccionario, Zabdiel — aclare sonriendo.

—¿Entonces que fue eso? — pregunto confundido.

—Actuación, Zabdiel — dije riendo — Actuación de venganza.

—Quien diría, la tierna y hermosa (_____) volviéndose mala y rencorosa — comento Richard riendo también.

—Eso nunca, solo protejo lo que es mío, según contratos. Es más, ellos tendrán que ser responsables y atentos conmigo — dije mirando hacia el océano — A ver quién cae primero en la trampa.

Llegamos hasta un lado de la playa, donde solo había varios camastros, una mesa llena de comida, meseros y artículos de protección.

—Richard — dije llamando su atención.

—¿Qué paso? — pregunto mirándome.

—Se me olvido algo en la piscina, ¿irías por eso? — pregunte tiernamente — Es una bolsa rosa, por favor.

—Claro que sí, hermosa — respondió y se acercó a mí para darme un beso rápido en los labios.

Dios, que tierno es Richard. Este se fue y me dejo sola con Zabdiel que sabe dónde estará. No estaba a la vista.

—Señorita, ¿Gusta que le ponga protector solar? — pregunto llegando por atrás de mi camastro, pensé que era un mesero.

—No, gracias — dije sin mirarlo — Vengo acompañada.

—Pero la veo a usted sola.

—Eso no significa que te.. — dije, pero no termine, me voltee para verlo y saber que era él.

—Me alegra que anuncies que vienes acompañada, pequeña — contestó y agarro mi barbilla para besarme fuerte.