Capitulos 2: Cyberhack

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Bakugo

Kirishima y yo empezamos a salir el mismo día que nos reclutaron en la mejor agencia de héroes de todo Japón. A pesar de que esto suena como el día perfecto la verdad es que era una mierda de noticia, porque dos homosexuales no sobrevivirían en un trabajo que exigía mantener ciertas apariencias a los medios.

Los "héroes de verdad" debían ser hombres rudos y varoniles, que no mostraran ninguna debilidad o vulnerabilidad. Todo comportamiento afeminado será señalado y ridiculizado, nada de actitudes que te hicieran ver menos hombre, nada de sensibilidad o delicadeza, y por supuesto nada de coger con tu mejor amigo.

-¡Malditos bastardos! ¡¿Quién mierda fue el idiota que dejó entrar a ese intruso?! ¡Voy a hacerlo volar por los aires! - grité buscando respuesta de alguno de los inservibles de la agencia.

-Bakug.... Digo, Dynamight, -El enchufe portátil me habló. -Andas muy agresivo hoy. Hay demasiada gente afuera, deberías ir a calmar a los medios.

-¿Eh? ¿Y por qué yo? Que vaya la gigante, a ella le encanta que la cieguen con el flash.

-Mt. Lady está ocupada.

-¿Y yo no, imbécil? -Le grité sin dejarlo terminar la estupidez que me estaba diciendo.

-Si, pero tú eres el héroe número dos de Japón, los medios se van a calmar si vas tú, ¿O acaso el maravilloso Dynamight no puede con la prensa?

A veces su cerebro lograba juntar dos cables y decir algo coherente.

Le gruñí con todo mi odio. -Está bien, idiota, pero será mejor que no hagas un desastre mientras no estoy. -Le advertí recordando la vez que intentó imprimir un informe en un plato de plástico a falta de hojas y dañó la impresora.

Mientras bajaba las escaleras pensé si realmente sería una buena idea salir. Una de las cosas que más odiaba de ser héroe profesional era la prensa, los medios eran tratados como Jesucristo en persona por los héroes ya que tenían el poder de destruir una carrera de años con chismes y rumores, así que, me gustara o no necesitaba mantenerlos contentos.

-Dynamight, ¿A dónde se dirige? -Me habló el anciano de armadura.

-Veo que soy el único al que le estorba la chusma de la entrada, voy a ir a rociarlos con una manguera para que se larguen.

Todos los presentes levantaron las cabezas ante mi grito, dejando ver qué a nadie le pareció una buena idea.

-Dynamight, tú no eres el mejor tratando con la prensa ¿Sabes? -La cabello de serpiente se entrometió. -¿Por qué no dejas que salga Chargebolt mejor?

-¿La niñita de Kaminari? Ni de chiste. -El anciano no parecía feliz con eso. -¿Qué clase de imagen le daremos a los medios poniendo a la niñita debilucha en cámara? Mejor deja que Dynamight les muestre qué clase de hombres trabajan aquí.

No sé qué clase de halago se cree que me dio, pero considerando lo que es "un verdadero hombre" lo tomaré como un insulto.

-Red riot, por favor ve y encárgate de él. -La bruja no paraba de detenerme en la entrada y yo estaba a punto de explotar.

Pateé la puerta y salí del edificio con todo el odio que le tenía a la prensa lista para escupirles la cara, seguido por Ret riot, que me miraba con preocupación. Me paré frente al micrófono y les lancé una mirada asesina. Los flashes de las cámaras y los gritos de los periodistas me taladraban los oídos.

-¿Qué quieren saber, malditos buitres? -les grité-. Les voy a contar lo que pasó, pero no esperen que les dé detalles. Alguien entró sin permiso en la sede principal de la agencia. No sabemos cómo lo hizo, ni qué buscaba, ni quién es, solo sabemos que no se llevó nada.

Se Dice De Mí (Kiribaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora