𝐏𝐚𝐩𝐞𝐫 𝐇𝐞𝐚𝐫𝐭𝐬 - 𝐒𝐚𝐭𝐳𝐮

Veintiocho

Sana estaba sentada por primera vez en la parte de atrás de la sala de audiencias, por primera vez vería un juicio como espectadora, por primera vez detrás del escritorio donde estaría su ex esposo, por primera vez estaba asustada por el futuro de un juicio en el que no participaría directamente.

—¿Cómo te sientes? —le preguntó Tzuyu en un tierno tono de voz, nadie pensaría que tenía veinticinco años de ese modo. Sana la miró antes de suspirar.

—Ésta probablemente sea la última oportunidad para hacer verdadera justicia por el caso de Taehyung —respondió en un susurro debido a que el nudo de su garganta no la dejaba hablar más alto —¿Qué pasa si otra vez lo absuelven? —Tzuyu negó con su cabeza.

—Todo va a salir bien —le dijo aún en tono dulce —confía en Mark —Sana le hizo un gesto —confía en él, Sanake.

—No tengo otra opción —suspiró resignada,

—Entonces que no lo sea —le sonrió. Sana la miró sin entender cómo era capaz de hacerle cuestionar tantas cosas en un segundo.

—Hola chicas —dijo Dustin una vez llegó a su asiento. La pareja lo miró mientras se sentaba al lado de Sana, quedando así la chica en la mitad de ambos.

—Sabes que... es un juicio ¿Cierto? —le preguntó Sana lentamente —no estamos en el cine, Dustin.

—¿Quieres? —le preguntó en una sonrisa ofreciéndole de sus palomitas de maíz. Sana miró a su novia antes de volver su vista a Dustin e inocentemente tomar un puñado. El chico no pudo evitar reír, su amiga tenía cierto lado infantil. Tzuyu solo podía mirarla con adoración, contra todo pronóstico, se había enamorado de ella.

El juicio estaba a punto de dar inicio. Mark se encontraba sentado en su lugar, al igual que Taehyung Kim junto a un diferente abogado. Todos estaban a la expectativa y luego de hacer el protocolo de entrada, Sana estaba altamente nerviosa.

—Defensa, de pie —pidió. En ese momento Taehyung Kim y su abogado se levantaron —se le informa de su derecho a no declarar contra sí mismo y a no confesarse culpable. Se acusa a Taehyung Kim del asesinato de ocho personas, seis chicas, un hombre y a un niño —Taehyung solo se encogió de hombros con su mirada perdida —demandante —asintió mirando a Mark, quien caminó hacia el centro del tribunal.

—Buenos días, señor juez —comenzó firmemente, a pesar de estar despeinado y con su ropa un poco desordenada —señores y señoras del jurado —se dirigió a ellos —estamos aquí reunidos, de nuevo, porque Taehyung Kim es un asesino desalmado —dijo naturalmente —sin embargo, antes que nada quiero aclarar ciertos aspectos. Hace unas semanas hubo un juicio donde Kim también fue inculpado —decía mientras que caminaba por el espacio —la encargada del caso quien defendió a Dustin Green, esa mujer era mi esposa —Sana suspiró sin entender qué estaba haciendo —y el niño a quien atropelló Kim, Taehyung Duan, era mi hijo —los murmullos se hicieron presentes —quería aclararlo para que no hayan inconvenientes durante el juicio —asintió —ahora, volviendo al caso. Se agregó uno nuevo —rió sarcástico —su ex pareja, Norah Lennon, viuda de Bill Lennon y madrastra de Lenna Lennon. Me doy cuenta que este juicio no será muy largo —volvió a reír —llamo a Taehyung Kim al estrado —Taehyung se levantó y simplemente caminó hacia el asiento de los testigos —¿Jura decir la verdad...

—Sí, si lo juro —interrumpió mientras alzaba su mano. Mark asintió.

—Solo voy a hacerte preguntas que tú sabes que puedes responder —le dijo suavemente —comenzaré por la más reciente ¿Por qué asesinaste a Norah Lennon? —preguntó.

—¡Objeción! —dijo el abogado de Taehyung —el abogado está...

—Por su seguro —interrumpió. Sana abrió bien sus ojos, debía estar planeando algo —necesitaba el dinero.