Zack

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Hace un par de años atras.

-- ZAAAAAACK!!!!

-- ¡¿Que haces ahí, maldita loca?! -- grita desesperado el pequeño azabache.

-- ¡Promete que nos casaremos de mayores!

-- ¡No! ¡Y bájate de ahí antes de caer!

-- ¡No hasta que me protemas que nos casaremos! -- cierras los ojos mientras le das la espalda.

-- ¡No quiero casarme contigo! -- Zack algo desesperado intenta escalar el árbol para poder bajarte.

-- ¡No me importa! Yo sé que tú me amas Zack -- procedes a sacar la lengua haciéndole burlas.

Este con algo de dificultad ingora tus burlas y solo se enfoca en subir.

-- Ya... Llegué...

Murmuro cansado el pequeño Zack al llegar a donde está su pequeña amiga.

-- ¡Zack, viniste a salvarme! Eso significa que eres mi príncipe y nos casaremos -- lo abrazaste apegondolo hacia ti.

-- ¡Estás loca y no voy a casarme contigo! -- Zack tenía el rostro rojo de la ira.

-- Sí, sí, sí, lo que digas -- murmuras ignorándolo mientras ves lo alto que están ambos -- ¿Cómo vamos a bajar Zack?

Este parpadea confundido para luego darse cuenta de que no pueden bajar los dos juntos empieza a alterarse.

-- ¡Estamos atrapados! -- grita con horror el azabache viendo a su amiga con pequeñas lágrimas.

-- No te preocupes Zack, yo te voy a cuidar -- limpias las pequeñas lágrimas que salen por el rabillo de sus ojos.

Este se tranquila un poco gracias a su amiga.

-- ¿Qué vas hacer? -- Zack mira con curiosidad a su amiga.

-- Voy a bajar para luego traer unas escaleras para ti -- le haces el gesto de la paz con la mano.

-- ¿Y cómo bajarás?

-- Así -- de pronto das un salto hacia abajo callendo hacia el suelo.

-- ¡________! ¡¿Estás bien?! -- Zack mira con preocupación.

-- ¡Sí, tranquilo! -- le extiendes tu mano en señal positiva -- Ahora te ayudo.

Y sin esperar una respuesta la joven niña salió corriendo en busca de unas escaleras para su amigo azabache.

En esos pequeños minutos en los que Zack esperaba a su amiga no paraba de pensar en la caída de su amiga, le preocupa mucho de que se haya hecho algún daño.
Aunque parezca que no hubo nada, él seguía preocupado, no por nada había subido ese árbol, Zack quería ayudar a su amiga pero al final fue ella quien lo ayudó, de alguna manera eso hace que se sienta mal consigo mismo.

-- ¡Ey Zack, ya he vuelto! -- exclama algo alegre dejando las escaleras cerca de la rama en donde estaba Zack.

Este con mucho cuidado bajó en las escaleras.

Al bajar suspiro aliviado de poder estar una vez más en el suelo.

-- Que bueno que estés bien, Zack -- con mucho ánimo abrazaste a Zack.

-- ¿Pero tú estás bien? -- murmura con preocupación Zack sin apartarte, aceptando tu abrazo.

-- ¡Claro que lo estoy! -- afirmas con orgullo -- Tú no te preocupes que yo seré tu príncipe azul o princesa azul.

Y sin esperar una respuesta contraria le diste un beso en su mejilla haciendo que el pequeño Zack quedar completamente sorprendido y sonrojado.

-- No me bese, bobita -- Zack se aleja de ti algo nervioso.

𝐋𝐎𝐎𝐊𝐈𝐒𝐌 --> 𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora