𝐋𝐎𝐎𝐊𝐈𝐒𝐌 --> 𝑶𝒏𝒆 𝑺𝒉𝒐𝒕𝒔

Jiho

-- ¿Qué haces aquí?...

Susurras asombrada viendo aquel chico.

-- Vine por tí, _______.

Das un paso hacia adelante con duda, con miedo de que sea una ilusión lo que estás viendo.

Frente tuyo estaba Jiho, había entrado por la ventana de tu habitación.
En un principio te habías asustado pensando que es un ladrón pero resultó ser Jiho quién cambió mucho.

-- Hoy fui a clases pero no estabas -- murmura aún sin quitarte de la vista.

-- Es... Qué no tenía ganas, ya sabes...

Con duda respondes, aún no estás segura si es la realidad.

-- Mmm veo que aún eres la misma -- se susurra para si mismo sonriendo -- Faltas a clases cuando tienes pereza.

-- Sí... -- asientes con la cabeza lentamente.

No podías apartar tu mirada de él, se ve demasiado guapo aunque también se ve que no está bien tanto física como mental.

-- ¿No vas a abrazarme? -- extiende sus brazos hacia tí un poco desesperado por tu contacto.

Realmente desea sentir tu toque como antes, tanto tiempo en prisión sin poder verte, ni escucharte y tampoco sentirte le afectó mucho.

Escapando de la policía él llegó hacia tu casa con la intención de verte una vez más, al no verte en clases le dolió mucho, incluso pensó que te habías ido de la preparatoria para no verlo cuando vuelva.

Pero él aún se convence así mismo que aún lo amas, que mentira no es pero la situación cambió.

-- Jiho... -- no aguantas más y lo abrazas con todas tus fuerzas -- ¡Te extrañé idiota!

Las lagrimas no las pudiste contener y empezaron a derramarse sin cuidado alguno.

Jiho suspira al sentirte, tanto tiempo deseando aquello y por fin lo había logrado.

Da suaves caricias en tu espalda y escucha tus sollozos sintiéndose mal por ser él causante de ello.

-- Yo también te extrañé, ______.

Te separas un poco para poder verlo al rostro, visualizas las ojeras muy grande y oscuras en señal de mal estado.

-- ¿Estás bien? -- tomas con delicadeza su rostro entre tus manos -- No lo pareces...

Jiho se ríe enternecido por tu preocupación haciendo que te confundas por su repentina diversión.

-- Estoy mejor que nunca -- murmura poniendo su mano sobre la tuya.

-- ¿Seguro? -- insistes aún con duda.

-- Claro...

Jiho admira tu rostro bajo la luz de la luna entrando por la ventana ya que tú habías apagado las luces de tu habitación para dormir ya que no te esperabas esta visita agradable, supongo.

-- Me alegra tanto verte después de tanto tiempo -- confesó el pelinegro aún sin apartar la vista de tí.

-- ¿Cuándo saliste? -- preguntas confundida -- Se supone que te falta tiempo ¿Verdad?

-- Sí, pero me dejaron salir pero solo por hoy y bueno pasaron algunas cosas -- murmura evitando algunos detalles.

-- No son malas cosas ¿Verdad? -- murmuras preocupada -- No quiero que te pase algo malo.

-- Tranquila, ahora soy diferente y se que no me pasará nada -- asegura tomándote del brazo sin hacerte daño -- Ahora soy capaz de protegerte, antes eras tú la que me protegías ahora es mi turno.

Jiho sonríe orgulloso de si mismo, de poder proteger a la chica que ama.

-- Que bueno que quieras protegerme Jiho pero aún así me gustaría que evitarás hacerte daño ¿Sí?

-- Veo que aún eres la misma... -- Jiho sonríe al ver que no cambiaste.
Que sigues siendo esa chica que siempre está preocupada por él.

En un principio tenía miedo de que dejaras de ser igual, que estuvieras odiándolo pero nada de eso no sucedió y eso lo alivia.

Te extraña mucho que repita eso, supongo que al cambiar pensó que tú también pudiste haber cambiado.

-- Como no serlo -- te burlas un poco de tí misma haciendo que ambos se rían.

El ambiente era bonito, dos adolescentes enamorados compartiendo tiempo, los dos encerrados en vuestra propia burbuja, viéndose mutuamente y sonrojándose de ven en cuanto.

Hacia tiempo que no compartían tiempo entre los dos solos, antes de que Jiho entrará a prisión ocurrieron problemas en la vida de Jiho y apenas tenían tiempo para pasarlo entre los dos y luego pasó la tragedia en donde uno de tus mejores amigos casi muero por culpa de tu novio...

Nada fue facil para tí durante este tiempo, sentías mucha culpa, tanta que te alejaste de tus amigos.

Zack y Daniel intentaron un millón de veces sacarte de tu habitación e intentar convencerte de que nada es tu culpa, lo cual es verdad, ellos solo están preocupados de tu estado.

No has hecho nada y eras la más afectada, eso a ellos no les gustaron pero aún así decidieron darte tu tiempo.

Pero ahora que tienes a tu novio frente tuyo después de todo este tiempo de dolor, sientes muchas emociones y no sabes que hacer.

-- Jiho, no sabes lo difícil que fue para mí todo esto -- murmuras con algunas lágrimas -- Te extrañé...

-- Yo también te extrañé -- Jiho te abraza, tu colocas tu cabeza en su hombro intentando retener las lagrimas -- Te extrañé mucho...

Ambos abrazados desahogándose en silencio.
No dicen nada pero se entendían y eso era suficiente.

El sonido de las sirenas en tu barriada alarmaron a Jiho quién ya sabe que estaban buscándolo.

-- Me tengo que ir, _____.

-- Lo sé...

Suspiras separandote de él con mucha dificultad, no eres tonta,sabes que si Jiho está aquí es porque se escapó y lo están buscando.

-- Pero volveré, no te preocupes por mí -- el pelinegro se acerca a tu ventana para saltar de ahí -- Lo prometo _____, volveré por tí.

-- Está bien, aquí te espero.

Evitas la lágrima que quería salir, sabes que ese momento será dentro de mucho pero mucho tiempo.

-- Aquí te espero Jiho...