¿Qué pasaría si hubiera otra Sully? Una tercera hermana, la menor de tres hermanos.
Lia Sully, hermana menor de Jake y Tom Sully. Un soldado, un científico y una aprendiz.
Ella estará bajo el mando y el cuidado de la Dra. Grace Augustine, como su ap...
Tuve que correr para alcanzar a Jake. Al hacerlo me sentí genial, tenía fuerza y agilidad que mi cuerpo humano no poseía. Amaba estar conectada con mi avatar, en este cuerpo simplemente me sentía libre y me encantaba.
Cuando lo alcancé pude ver lo feliz que estaba.
- ¡Jake! - grité mientras me acercaba a el.
- ¡Lia esto es increíble! - sin previo aviso me tomó de la cintura y me empezó a dar vueltas en el aire haciéndome reír.
- ¡Oye soldado! - interrumpió una voz bastante conocida. Jake me bajó y me sorprendí cuando la vi. Era Grace en su avatar. Debo admitir que se vía hermosa.
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- ¿Grace? -preguntamos los dos sin poder creer lo que veíamos.
- ¿Y a quién esperaban? - nos dijo - Atrapen - nos advirtió Grace cuando nos lanzó dos frutas que nunca había visto, pero si escuchado. Las atrapamos sin dificultad - Buenos reflejos - nos elogió.
Jake dio el primer bocado para después abrir sus ojos y volver a sonreír, eso me hizo entender que esa fruta estaba deliciosa, así que probé la mía y wow realmente lo estaba, Grace soltó una pequeña risa por nuestras reacciones.
Norm llegó unos segundos después.
- ¡Miren soy un Dios viviente! - dice mientras hace unas poses tratando de presumir sus inexistentes músculos - Miren esto, es asombroso - dice con una sonrisa mientras camina hacia nosotros, pero termina cayendo de cara al suelo y segundos después se levanta como si nada - Estoy bien - dice mientras se sacude la tierra que tiene encima. Grace y yo nos reímos y Jake solo negó divertido.
Ya en la noche estábamos más acostumbrados a nuestros nuevos cuerpos. Me encontraba en una cabaña con otros avatares. Algunos conversaban entre sí o con los científicos que se encontraban ahí y otros se preparaban para descansar, yo por mi parte estaba cepillando mi largo y despeinado cabello, al terminar decidí hacer unas cuantas trenzas, estaba haciendo la última cuando escucho una voz detrás de mi. Era Grace.
- Me gustan - me dijo con una sonrisa.
- Gracias, las hago para mantener mi cabello en orden - le digo concentrada en lo que hacía.
- Pues te quedan bien, además ese mechón blanco es muy bonito -
- Lo sé - le contesto un poco presumida. Eso la hizo reír.
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