"Si, no hay problema, podés quedarte él tiempo que necesites" Nahuel sonrió. Estaba sentado con el cordobés en la trastienda del negocio al cual él y Agustín habían ido para sacar su identificación falsa. Cristian sonrió con tristeza: "Por el tiempo que sea necesario, podés trabajar acá si querés, así podés ganar tu plata y empezar tu vida de forma independiente"
Valentín asintió. Había dejado de llorar a la mitad del camino en la ciudad y ahora todo lo que sentía era rabia y se sentía como si estuviera perdido.
Nahuel regresó a la habitación con la taza de té caliente, "Toma, así se te va el frío, que hace un fresco bárbaro afuera".
El menor asintió y le dio las gracias, bebiendo el té. Rebotó su pierna y se mordió el labio. Todo lo que les había dicho era que había tenido una pelea con Agustín y que estaban dispuestos a dejar que se quedara un rato mientras estuviera dispuesto a trabajar.
Barco aceptó. Cualquier cosa para mantenerlo alejado de Agustín. El hombre lo odiaba. Siempre lo había odiado. Cerró los ojos y se tragó la ola de lágrimas que amenazaban con salir de sus ojos. Se había esforzado tanto para que el ojiclaro no lo odie, realmente había intentado ser cariñoso pese a que le costaba mucho abrirse de esa manera con otros...
El timbre de la puerta de la tienda en el frente sonó. Se congeló.
"¿Está él acá?" Cristian, que estaba trabajando en el registro ese día, miró perezosamente hacia arriba. Valentín miró por la ventana de la puerta trasera, observando la cabeza familiar de cabello castaño y sus rizos rebeldes.
"¿Qué cosa?" preguntó lentamente el mayor.
"Valen... mi Valen. Por favor, decime que vino acá, tengo que encontrarlo" La cara de Agustín estaba roja y respiraba con dificultad.
"Ah... ¿Valentín? ¿El pelirrojo ese mitad gato? No... no está acá... ¿por qué? ¿Se perdió?"
Valentín hizo una nota mental para agradecerle a Cristian por mentirle al ojiclaro, después de todo, se suponía que era un conocido de Agustín, no suyo; pero aún así había accedido a ayudarlo. La cara de Giay cayó y golpeó sus puños contra el mostrador. Las lágrimas se derramaron por sus mejillas. Valentín miró al santafesino pateando el mostrador antes de irse.
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𝐆𝐀𝐓𝐈𝐓𝐎 - ❪ gialen ❫
Fanfic𝐆 ┇Donde Agustín se siente solo luego de mudarse a una nueva ciudad, o donde su amigo le regala un gatito anaranjado un tanto gruñon ► Adaptación.