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Una vez que estuvieron limpios y vestidos, Valentín se encontró sentado en el piso de la sala con Agustín, aprendiendo a leer de nuevo.
"Está bien, A, M, O, R... ¿Qué significa?" preguntó Agustín, escribiendo la palabra.
Valentín lo miró y lo pronunció, "A-Am-Amor... ¿Amor?"
"Sí, como por ejemplo, sos mi amor'"
Las mejillas del menor se tiñeron de un rojo oscuro y se alejó. Agustín besó su hombro.
"Agus, tengo una pregunta... ¿qué significa... 'de rebote'?" Valentín frunció el ceño, recordando la película que había visto.
Agustín se veía confundido y levemente herido, "¿Por qué preguntas eso?"
"Lo vi en una serie... Vos no estarás 'de rebote' conmigo, ¿no?"
"¡No! ¡No... no no no no no! ¡Ni por un momento pienses que estoy con vos solo por lo que pasó con mi ex!" besó la mejilla de Valentín, "Ella y yo... bueno, para empezar lo nuestro no funcionaba hace rato, sabía que no daba para más nuestra relación, pero insistia en seguir intentándolo. Pensé que la amaba, pero cuando dijo cosas tan horribles sobre vos y asumió que yo era capaz de hacer algo tan feo como engañarla, me di cuenta de que no era sano y no podía estar enamorado de alguien así, además..." Valentín se giró para mirarlo. nuevamente, "En ese momento... ya estaba luchando con mis crecientes sentimientos por vos y mis dudas de que estar juntos fuera natural. Cuando te escapaste... dios, esos fueron los peores días de mi vida. Ahí fue cuando me di cuenta de cuánto te amaba, a pesar de mi sentimiento de rareza por estar enamorado de alguien que hace apenas un mes ronroneaba. Me arrepiento de no haberte amado así antes..." acarició con sus labios en el hueco del hombro de Valentín y presionado suave, dejó un beso en su piel pálida.
Valentín se sonrojó profundamente y se cruzó de brazos, "Más te vale... ¡porque iba a tener que cagarte a piñas sino!"
Agustín sonrió y besó los labios del menor con ternura. Valentín le devolvió el beso y continuaron avanzando en las lecciones del pelirrojo
Un golpe en la puerta los interrumpió y Agustín frunció el ceño, levantándose para abrir la puerta. La abrió y Luka entró corriendo, pasó prácticamente por arriba del ojiclaro, para derribar a Valentín, quien le siseó de dolor por la repentina sacudida que le subió por la espalda.
