Incomprensible

Condena (+18)

-¿y bien Sr. Celebre arquitecto va a invitarme a pasar o prefiere conversan afuera?-

-oh lo siento mucho- 

El rubio se hizo a un lado inmediatamente para que el peliazul pudiera pasar, en cuanto paso a su lado sintió un leve escalofrió que le recorrió toda la espina dorsal, sin embargo esa sensación se dedujo a una ligera intimidación debido a la diferencia de altura.

-Prepararé un poco de café, recientemente conseguimos unos granos bastante deliciosos espero que sean de su agrado-

No dijo más y aquel fino rubio dejo a su invitado en la sala para dirigirse hacia la cocina, este no despegaba la mirada del andar del arquitecto e inmediatamente dibujo una sonrisa triunfante en sus labios delatando la satisfacción en su rostro.

-Gran sabio, el gran juez de la Mhatra está aquí para el juicio de Azar-

-hágalo pasar muchas gracias-

Al Haitam recogió rápidamente unas cosas que se encontraban  en su escritorio y también dejo a la mano un gran expediente que serviría para debatir las condiciones del juicio del sabio anterior.

Cuando Cyno entro a la oficina incluso traía consigo su lanza y un semblante mucho más serio de lo normal marcaba su rostro, el más alto le miro solo un par de segundos y después le invito a sentarse.

-El prisionero será trasladado aquí en un par de días, con gusto puedo ser el juez y verdugo, sin embargo Nahida ha dado ordenes que en Sumeru se replantee la sentencia de muerte-

-Azar no solo tiene sobre sus hombros el delito de terrorismo por ser el autor intelectual junto con los fatuis de eliminar a la arconte si no también...-

-Es de vital importancia seguir escribiendo la historia de Sumeru a través de nuestras acciones, no somos como ellos, gran sabio, gran juez-

La arconte junto con Scaramuche importuno la sala, ninguno de los dos parecía sorprendidos con su visita; las pocas veces que ambos conjeneaban sin ninguna clase de traba fue una completa desaprovacion por parte de su diosa quien esta intentaba persuadir a sus sabios sobre modificar algunas leyes, ya que para ella volver a tener el control sobre Sumeru y al estar en proceso de integración con su gente, le daba una oportunidad perfecta para cambiar ciertas cosas que representaban el fin de una tiranía que incluso empezó posiblemente en la época con el rey Desert, una época de la que la propia arconte tiene recuerdos poco lucidos.

-Estaba pensando enviarlo a una especia de retiro, que olvide lo que hizo y que se revindique-

-Claro, entonces vas a usar tu poder divino con quien no solo intento acabar contigo, sino que además cometió genocidio por todo Sumeru y ahora sientes compasión por él-

Las palabras del chico del sombrero hicieron que la propia arconte inflara sus mejillas ante las expresiones aprobatorias de los otros dos hombres, Nahida puso ambas manos sobre su cintura y después y siguió con su discurso.

-Traje a Scara solo porque tenia que entregar un trabajo en la academia, me aseguro que regrese a casa a tiempo para que termine su tarea, pero ha coincidido nuestra llegada a Sumeru con la de Azar, Al Haitam, Cyno si planeaban darle la pena de muerte, por favor reconsiderenlo-

-¿A caso quieres aplazar el juicio?-

La pequeña negó y trataba de persuadir a los otros dos sobre una pena menos desiciba y así mismo darle una segunda oportunidad, al final cuando llego el acusado decidieron aplazar el juicio del condenado y prometieron a Buer que llegarían a una solución donde todos se encontraran satisfechos con el resultado.