17

225 37 8
                                    

Oh por Dios, oh por Dios

No se en dónde me he metido, no se como salir de esta increíble ¿Incomodidad?, ¿Tensión?, no se nisiquiera como describir el ambiente que se a formado en mi habitación desde la primera escena sexual, Mike a estado de lo más relajado, pero lo he visto hechandome miraditas de reojo de vez en cuando, sus labios han estado en una fina línea y se que lo estoy poniendo nervioso por mis movimientos.

¡¿Pero que culpa tengo?! Nunca habia visto nada parecido, o bueno si en 50 sombras, pero es diferente porque esa vez lo vi con Trish y no con mi mejor amigo y como soy tan malditamente curiosa me ha entrado un millar de preguntas a la cabeza y en todas estan Alex, Axel y... Mike. ¡Si! Mi mejor amigo esta metido en esas preguntas bochornosas.

Puedo ver lo concentrado que está, a veces murmura algo, supongo que son comentarios sobre las escenas, pero no puedo escucharlas bien. Mis mejillas estan sonrojadas, mi rostro, mi cuello, mis orejas. Todo mi cuerpo. Toda yo esta ardiendo y no se si de vergüenza o de ganas.

Ahhhh, no, no, no. ¡Calmate Anne! Es mi mejor amigo, además estoy saliendo con dos personas ya para meter a alguien más a la ecuación.

La película por fin termina y no respiro, la pantalla se pone negra y agarro la lapto al ver que Mike se estira desperezandose. Lo veo y le doy una pequeña sonrisa y él no aguanta y se descojona de la risa.

—Ey, no te rías —Le digo indignada.

—Es que deberías verte en toda la película, Eres tan inocente, minions. Me mirabas como si me fuera a lanzar sobre ti en algún momento. —Se parte de la risa y se inclina hacia al frente agarrándose de la tripa y yo no aguanto más.

Me levanto y empiezo a golpearlo con la almohada, el me esquiva y agarra la otra y empezamos una guerra como si fueramos unos niños.

—Eso es trampa —Le reclamo cuando me da en el rostro —Tu tienes más fuerza —Chillo cuando me vuelve a pegar.

Le tiro la almohada y me abalanzó para tirarlo en mi cama y empezarle a hacer cosquillas, él se torna rojo y empieza a reírse, sus hoyuelos se marcan en sus mejillas y no puede parar, yo me río junto a él.

Es un momento que necesitaba, olvidarme de todos mis problemas y ¿Qué mejor modo que jugando con mi mejor amigo?.

Me da media vuelta y empieza ha pincharme las costillas, me río con fuerza y en temo a sacar mi risa de Maléfica. Que vergüenza.

—Me voy a ser pis —Digo entre risas —¡Mike!.

Él se detiene, pero me agarra de las muñecas para que no le haga cosquillas, nos reímos con fuerza hasta que no escucho su risa y al abrir mis ojos me cayó. Su mirada esta puesta en mí, su rostro me mira con curiosidad y noto como su nuez baja y sube cuando traga grueso.

Mi aliento se desvanece y mi corazón empieza a palpitar más de lo que ya está.

Ladeo mi cabeza y empiezo a detallarlo con más detenimiento, sus pecas, sus pequeñas cicatrices (imaginó que acné de cuando era más joven) algunos lunares, las motas de sus ojos más oscuros del color natural, sus pestañas largas y rizadas, su poca barba, su cabello revuelto.

No debería estar pensando en esto, pero me es imposible cuando unas enormes ganas de experimentar se me han acumulado en todo mi cuerpo mientras veía la peli.

En un segundo nos acercamos de más y en otro se ha alejado de mi cuerpo y se levanta, su cuerpo empieza a balancearse de lado a lado y empiezo a pensar que esto sera todo, mi amistad se arruino por mi culpa.

—Lamento lo que acabo de pasar —Habla con voz ronca, carraspea y me mira  arrepentido. —Perdón, no fue mi intención.

Me pongo de pie en un salto y lo señalo —No te culpes por nada, no fue culpa de nadie. Estabamos jugando y listo —M acerco y lo abrazo, él se queda con los brazos a los lados y con el cuerpo tenso —Por favor, no quiero que nuestra amistad cambie por esto, por favor.

Una última vezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora