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Que sana se hubiera negado rotundamente a entrar a una enfermería hablaba mucho de ella, se quejaba al respecto de Jihyo por descuidar su herida pero ahora se trataba de la japonesa quien no quería ser asistida y eso le molestaba por completo a su compañera. Conseguir el ala medica fue tan fácil como ir preguntando a los militares hasta que fueron guiadas hacia la efémera que se encontraba en una pequeña sala de emergencias

—¿Dices que fue un oso?—Preguntó la mujer, Sana y Jihyo asintieron—Esto parece mas bien a una de esas brujas del baño—

—Bu...bueno...este—Nerviosa, Sana admitió haber mentido, pero la enfermera no se veía molesta con respecto a eso—Fue hace ya como dos horas...—

—¿Fue desinfectada?—

—Si, se lo puedo asegurar—Jihyo habló por Sana, la expresión tranquila de la enfermera le hacía pensar que de verdad no era tan grave—¿Ella estará bien?—

—Pues no tiene porque preocuparse, no es la primera que atiendo con ese tipo de cortadas, el proceso de transformación toma aproximadamente doce horas pero a las dos horas de ser infectado estaría presentando los síntomas, Sana se ve bien, pero tengo que hacer que no le va a gustar para nada—

—¿Qué?—Dijo la japonesa agarrándose de las manos de Jihyo con cierto temor

La enfermera buscó entre sus botiquines de primeros auxilios y sacó un bote de alcohol por la mitad, una esponja de alambre, un kit de sutura, y un pequeño pedazo de jabón antiséptico 

—Ha pasado mucho tiempo desde que te heriste, para suturar necesitaré raspar tus cortadas hasta hacerlas sangrar de nuevo—

—¡¿Está loca?! ¡De ninguna manera! ¿Usará anestesia o algo por el estilo?—

—Si, usaré anestesia—La enfermera se acercó a Sana y dejó sus herramientas un lado—En este caso necesitaremos unas cinco dosis de...¡Agárrala Jihyo!—

Jihyo tomó a Sana por los hombros a la fuerza y apenas podía responder a la presión que le hacia su compañera por detrás. La enfermera tomó la espina de alambre y comenzó a raspar con fuerzas las heridas de Sana como si no hubiera un mañana, ver a Sana gritando de esa manera solo le causó mas pánico a Jihyo pero sabía que esto era por un bien mayor, atormentada por la japonesa, se abrazó de su espaldas intentando prestarle el apoyo que necesitaba

Apenas las cortadas comenzaron a sangrar, la enfermera se le quedó viendo a Sana, parecía haber terminado

—¿No fue fácil?—

—Cierre la boca y termine ya—Se quejó sana con lagrimas en los ojos

Todo fue peor cuando la enfermera regó alcohol y estrujó aun mas las heridas a pesar de que estuviesen sangrando, tal vez el procedimiento era algo tosco y rudimentario, pero era el correcto, y también el mas doloroso

—Yo estoy aquí, por favor resiste ya casi termina—Susurró Jihyo en los oídos de Sana, consiguiendo relajarla lo suficiente como para que las personas del ferry no pensaran que estaban matando a alguien en la enfermería—Estarás bien, es por tu bien—

El proceso de desinfección terminó, el pecho de sana subía y bajaba por el estrés que le provocó tanto dolor, estaba llorando como si se tratara de una niña, pero cualquiera estaría así si tuviera que someterse sin anestesia a estos procedimientos que usualmente eran bajo alguna especie de calmante 

—Bien hecho Sana, ahora solo falta suturar—Felicitó la enfermera, quien sacó un segundo kit 

Jihyo lo reconoció, era el kit quirúrgico que les arruinó la vida hace semanas, aunque le hirvió la sangre saber que había llegado hasta aquí, mejor se alegró teniendo en cuenta que estaba por ser utilizado en una persona que amaba y no por un malvado errante

Zombiefication (Sahyo AU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora