El vínculo-Editando

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Kiara

Desde ayer por la noche no he sabido nada de Aiden. Le he dejado al menos diez mensajes y muchas llamadas perdidas, pero sigo sin saber donde está y lo más importante, si está bien. Estoy preocupada porque ya han pasado 24 horas. He llamado a Emma para preguntarle si sabe algo y me ha dicho que nada de nada y que ella a Logan tampoco lo ha visto, pero si ha hablado con él. Le preguntó si sabe algo de Aiden y le dijo que no. A mi amiga la creo, sé que si supiera algo me lo habría dicho, pero a Logan no. Sé que sabe donde está Aiden, pero no lo va a decir si Aiden le dice que no. Mañana empiezo las clases de nuevo. Esta mañana hable con la directora. Me dijo que no me preocupara por nada, que les había dicho a los profesores que me habían ingresado en el hospital para hacerme unas pruebas y que por eso estaba ausente. Al menos no tenía que preocuparme por eso. Antes de irme a dormir le envío otro mensaje a mi novio con la esperanza de que al despertarme tenga un mensaje suyo.

No estoy de buen humor cuando entro en el aula. Aiden sigue sin contestarme y para colmo Logan me evita a toda costa. Me lo he cruzado en el pasillo del instituto, ni siquiera me dio tiempo para preguntarle sobre Aiden, solo me dijo que iba con prisa y salió.

- ¿Sabes que Logan se ha ido? – le pregunto a Emma.

- Si- dice echando humo por las orejas- Lleva evitándome desde esa noche- esto último lo susurra.

- No dejo de pensar que ha pasado algo, pero no logro encontrar una razón válida para su comportamiento. Y encima Logan está raro.

- Les conozco bien como para saber que Aiden le ha dicho a Logan que no diga nada, y éste no va a soltar palabra sobre lo ocurrido. Cosas de alfa y betas, ya lo sabes. Pero lo que más me molesta es la actitud que tiene hacia mí, me está ignorando.

- ¿Les matamos? – pregunto para quitarle hierro al asunto. Mi amiga sonríe.

- Podríamos- piensa un momento- Aunque no creo que fuera una buena idea porque luego tendríamos que deshacernos de los cuerpos y a mi eso de cavar hoyos no se me da bien.

Ambas estallamos en una carcajada y justo en ese momento entra el profesor.

- Bienvenida señorita Lynwood, la veo muy contenta de estar de vuelta. Alumnos, deberíais de seguir el ejemplo de vuestra compañera- toda la clase se ríe ante sus palabras y por unas horas yo me olvido de que mi novio está desaparecido para mí.

- Muchas gracias- le sonrío sin muchas ganas.

Una vez den casa, vuelvo a enviar un mensaje a Aiden para, otra vez, no recibir respuesta alguna. Cuando aparezca se le va a caer el pelo de la bronca que se va a llevar. Si esto lo hubiera hecho yo ya tendría a toda su manada buscándome y a el más que cabreado cuando me encontrara. Unos suaves golpes en la puerta de mi habitación me sacan de mis pensamientos. La puerta se abre y la cabeza de mi hermana asoma por ella.

- ¿Puedo? – pregunta.

Le doy una palmaditas a la cama para que se siente a mi lado.

- ¿Cómo llevas lo de la vuelta a clase? – me pregunta con una sonrisa divertida.

- Mejor de lo que pensaba- digo con sinceridad- Las clases están haciendo milagros y me mantienen alejada de comerme la cabeza al no saber nada de Aiden- suelto sin darme cuenta. Mi hermana arquea las cejas.

- Ahora que lo dices, los gemelos están raros, yo diría que tristes e impacientes.

Interesante. La idea de interrogar a los gemelos o que Grace lo haga me resulta tentadora. Pero en seguida me doy cuenta de que no van a decir nada. Conociendo a mi novio como le conozco, lo más probable es que les haya prohibido a sus hermanos hablar del tema. Si Logan le hace caso, sus hermanos más aún. Puede prohibirle lo que quiera a quién quiera, pero los sentimientos no mienten, y si los gemelos no están como de costumbre, eso quiere decir que algo ha pasado.

- Bueno, ya aparecerá cuando quiera- digo intentando quitarle peso al asunto- ¿Vemos una peli? – pregunto cambiando de tema.

Como mencioné anteriormente, las clases están haciendo milagros. Puesto que he estado ausente unos días, tengo muchas cosas que hacer para que no me pille el toro y eso me mantiene muy ocupada, casi sin dejarme tiempo para pensar el Aiden. No le he vuelto a llamar ni enviar mensajes, si no quiere hablar conmigo, yo no pienso ser la única que lo haga.

Es el tercer día en el que no se nada, así que me armo de valor y llamo a la madre de mi novio.

- Hola Kiara- dice ella tan alegre como siempre.

Una chispa de esperanza se enciende en mi interior al oír su voz. Por el tono de voz que usa para contestarme entiendo que nada malo ha pasado.

- Buenas tardes, Señora Hunter- vale ahora no sé cómo seguir la conversación, antes de que pueda pensar algo la madre de Aiden empieza a hablar.

- Déjame adivinar, llamas porque no sabes nada de mi hijo.

- Y estoy bastante preocupada, no se nada de él desde hace tres días y eso me está matando.

- Lo único que puedo decirte es que está bien, él es quién tiene que contarte lo que ha pasado. Siento mucho no ser de ayuda- sé que, si Aiden no se lo hubiera prohibido, ella me lo habría dicho.

- Bueno al menos sé que no le ha pasado nada malo. Muchas gracias de todas formas.

- De nada, y por favor no te preocupes más. Estoy segura de que él te lo explicará pronto- y cuelga sin más.

¿Explicármelo pronto? Mi novio no sabe dónde se ha metido. No tiene ni idea de la que le va a caer cuando aparezca.