Eres un Ángel [Todobaku]

Capítulo XII - Ser Indiferente

Los días transcurrieron rápidamente, todos seguían preocupados por la situación actual con los demonios; sin embargo, solo había una persona que se comportaba indiferente al respecto y ese era Bakugo, luego de un par de días de que los demás ángeles se fueran, su expresión se volvió fría y distante, incluso sus gritos se habían desvanecido con el tiempo, por supuesto que seguía enojándose, pero no pasaba de una mirada furiosa y un suspiro desesperado, pero únicamente terminar diciendo lo que le molestaba de una forma calmada y eso era alarmante para aquellos quienes le conocían.

Izuku trató en varias ocasiones hablarle sobre el tema de los ángeles, incluso en compañía de Kirishima, pero este no más escuchaba alguna palabra al respecto, los detenía abruptamente para cambiar a otro tema, no obstante, a pesar de esos desaires, el peliverde no se rendía.

Algunas veces intentó pedirle al pelirrojo si podía llamar a Todoroki para aclarar todo y reconciliarse con Kacchan, pero lamentablemente Kirishima siempre le respondía con una negativa mientras desviaba la mirada, pues sabía que no era porque no pudiera, más bien, se puede suponer que el bicolor simplemente no quería. Incluso intentó convencerlo directamente con él, las pocas veces que lo vio después, pero tampoco funcionó y eso era deprimente.

Por el lado de Denki, despertó después de cuatro días desde el incidente, se le notaba en shock y un tanto triste, más cuando Shinso terminó de hablar con él, era obvio para los demás que le había contado todo y es más que seguro que el final de esa conversación no fue algo agradable para ninguno de los dos, pues…

Habían terminado.

El rubio lloró por un día completo, el dolor no solo de las heridas físicas, sino también del corazón lo habían lastimado.

Shinso no pudo soportar verlo en tal estado y salió de inmediato del lugar, se planteó la idea de borrar los recuerdos de ellos dos de la mente del rubio, pero cuando estuvo dispuesto a hacerlo fue detenido por una mano, era Kirishima, quien le dio una mirada de advertencia de que no lo hiciera.

El pelimorado se soltó de su agarre mientras mordía su labio inferior y sólo ejerció más fuerza cuando escuchó los sollozos de Denki que provenían de la otra habitación.

Se dio la vuelta, decidido a no mirar atrás y salió hacia afuera de la casa.

—¿A dónde vas? —lo alcanzó Kirishima.

—Iré con los demás, las batallas solo han ido en aumento e iré a ayudar a Todoroki.

—Él te dijo que te quedarás aquí.

—Mandaré a Mina a que me reemplace — extendió sus alas y se fue.

—¡Shinso! —gritó el pelirrojo como un pequeño intento de detenerlo, pero fue en vano, se había esfumado.

Kirishima se dio la vuelta para regresar al interior de la casa y se sorprendió de ver como Bakugo estuvo observando todo desde el vano de la puerta principal.

Intentó decirle algo, pero rápidamente el rubio cenizo tomó la palabra —No es necesario que digas algo, ya me di cuenta de que ustedes son así — acto seguido se giró para ingresar de nuevo a su casa.

Su expresión se volvió triste y fijo su mirada hacia el cielo, ¿por qué todo tenía que ser tan complicado?

3 meses después.

Bakugo iba de camino al hospital, no porque estuviera herido o enfermo, simplemente llevaba una semana sin escuchar noticias de Deku, después de que lo estuvo molestando de forma constante con lo mismo todos los días, su ausencia lo preocupó.

Ingresó a recepción, le indicaron que estaba en la habitación de descanso para los médicos y que esa era una área exclusiva para personal del hospital, por lo que tenía que esperar a que saliera, pero igual le comentaron que le fue enviado un mensaje para notificarle de su visita.