Déjame sanarte

Ōkubo

- Debes liberarla Toneri -

Ahí se encontraban los actualmente recién casados, intentando ver la forma correcta de regresar a Sakura de nuevo a Konoha.

- Y si mejor la dejamos unos días más en cautiverio, digo, para aprovechar un poco más de tiempo antes de ser exiliados a la luna -

- Otsutsuki Toneri, vas a liberar a Sakura y la entregaras sana y salva a Konoha -

- Pero Sasuke ... -

- Nada de peros, debemos hacerlo Toneri - Tomando a su esposo de la mano - Ya no debes tener miedo, no nos podrán separar. Juramos estar el uno con el otro hasta que la muerte nos separe, no hasta que los líderes de las grandes aldeas lo quieran -

- Lo se, pero aún así tengo miedo -

- No deberías tenerlo, soy tu esposo y juntos superaremos esto, lo prometo -

- Tendré que creerte Koibito -

- Es justo lo que quería escuchar -

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- Por favor Hokage Sama, debe encontrar a mi hija, ya lleva muchos días de estar desaparecida -

- Estamos haciendo todo lo posible por encontrarla, señor Haruno -

- No lo parece, tanto tiempo y aún no saben dónde está - Exclamó con notable irá la madre de Sakura, ella se veía más afectada por la desaparición de su hija.

- Le aseguro el empeño en este caso señora Mebuki, por el contrario no se a encontrado alguna pista del paradero -

- Es claro que no están haciendo bien su trabajo ¡Son unos inútiles por no encontrarla! - Su enojo estaba llegando al límite, Kakashi no podía culparla, era normal ver a la madre más angustiada al contrario del padre, ellas siempre verían por el bienestar de sus hijos a todo costo, claro ejemplo sucedía ante sus ojos.

- Le doy mi palabra señora Haruno, la vamos a encontrar. Ya la alerta corre por las demás aldeas, la encontraremos y se la entregaremos en sus brazos, promesa es una promesa -

- Más le vale no mentir Hokage Sama -

Su ira aún seguía a flor de pie, aun así confiaría en Kakashi, solo esperaba ver pronto a su pequeña niña.

Kizashi tomo a su mujer, llevándola afuera de la oficina del Kage, con tal de llevarla a casa para descansar.

Kakashi espero la salida de la pareja, para finalmente desplomarse en el escritorio. No lo juzguen ni nada, el quiere mucho a Sakura como a Naruto, Sasuke y Sai, pero ya tenía demasiada presión en su caso, y no hablar de Naruto. El rubio desde su boda no lo a dejado en paz, durante sus quince días de casado le a preguntado mucho por Sasuke aparte si tenía misiones que pudiera realizar. Ya sabía a dónde iba esto, el Uzumaki intentaba huir de su esposa, específicamente, de la luna de miel.

El podría darle la luz verde para marcharse en una de esas misiones, sin embargo la familia Hyuga pidió la negación de estás, poniendo de escusa la consumación de los esposos. Kakashi había aceptado gustoso, no solo por darle satisfacción a la familia, sino también, para evitar que el blondo fuera tras Sasuke y Toneri.

Para su mala suerte, Naruto había estado evitando el tener algún contacto físico son su esposa, Hiashi lo dejo muy en claro cuando Naruto se negaba a compartir cama con su hija, poniendo de escusa "Aun me siento incómodo con esto, por favor, tenga me paciencia".