Capítulo 20

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Lisa agradecía totalmente que fuera sábado, puesto que el cuerpo le dolía horriblemente y ni siquiera pudo agarrar el teléfono para desearle unas buenas noches a Jennie.

Su mamá insistió tanto que hasta creyó que exageraba, quizás solo era su instinto maternal que quería cuidar y proteger de su cachorra.

Lo que ahora le preocupaba es como iría a la universidad sin que todos vean lo lastimada que quedó su cara. No quería que todos empezaran a compartir estúpidos rumores y peor aún, tener que darle una explicación a Jennie sobre ello, estaba segura que la cuestionaría.

Su mamá entró a la habitación con una bandeja llena de alimentos como desayuno, lo acomodó en la mesita de noche y ayudó a que se pudiera sentar. Luego de un poco de esfuerzo y dolor, la alfa pudo recostar su espalda en la cabecera de la cama.

ㅡBuenos días, mamá. ㅡtrató de esbozar al menos una pequeña sonrisa, no quería preocupar más a su progenitora de lo que ya hacía.

ㅡ¿Cómo amaneciste, cariño? ㅡposó su mano con suma delicadeza en la mejilla de la joven alfa. Su voz salió más frágil de lo que quería esconder.

ㅡYa no me duele mucho. ㅡmintió.

ㅡLisa, por favor. Vamos a la clínica. ¿Si? ㅡsugirió con la dulce voz que la caracterizaba.

ㅡNo, mamá, serán muchos gastos. Voy a mejorar rápido, no te preocupes. ㅡtomó la mano de Chitthip y le dio un corto beso. Su mamá la miró con la ternura plena que le causaba su cachorra.

ㅡCómo... ¿Cómo pasó esto? Y te pido por favor que me seas honesta. Sin mentiras, ni excusas ahora, sabes que no te he malcriado para eso.

La mirada dudosa de Lisa vaciló. Ella jamás le había mentido a su madre. ¿Podría ser capaz de hacerlo ahora?

ㅡMamá, antes que nada... ㅡtrató de sonar seguro de sus palabras. ㅡ Quiero, realmente quiero que no lo tomes a mal o que me digas que me tengo que separar de Jennie, y sobre todo porque sabes que estoy muy enamorada de mi omega.

ㅡ¿Qué estás tratando de decir? ㅡpreguntó totalmente confundida y la rubia exhaló el aire lentamente.

ㅡ¿Recuerdas cuando te dije que Jennie tenía alfa? ㅡChitthip asintió rápidamente. ㅡ Al parecer sus amigos le han avisado lo que pasa entre ella y yo. ㅡmurmuró lo último. ㅡ Me amenazaron. ㅡla omega intentó levantarse, pero Lisa fue más ágil y la detuvo agarrando sus manos. ㅡ Por favor, mamá. No hagas nada.

ㅡ¿Cómo que no haga nada? ¿Entiendes lo que dices, Lisa? Te han lastimado de la peor manera posible, ¿y pides que no haga algo al respecto?

ㅡQuiero solucionarlo por mi cuenta, además no pienso quedar como alguien cobarde.

ㅡ¿Eres consciente de lo que hablas? ㅡle reprochó herida. ㅡ Todo tiene que ver con Jennie. Creo que lo mejor es-

ㅡNo, mamá. No voy a alejarme de ella. ㅡaseguró neutra y concisa, ya sabía que su madre diría algo como eso.

ㅡPero Lisa... ㅡChitthip volvió a sentarse, tomando las manos de la joven alfa. ㅡ Es muy peligroso, no puedo permitir que te hagan daño, no me lo perdonaría. Trata de comprenderme. ㅡsu voz sonó mucho más baja y con deje de tristeza.

ㅡPuedo hacerles frente, no puedo dejar a mi omega ahora que me ha aceptado. ㅡla omega la miró fijamente, algo incrédula a la vez. ㅡ Ayer le conté, mamá. Y me ha aceptado como su alfa, solo... Solo necesitamos tiempo para hacer que las cosas empiecen a surgir.

ㅡ¿Y qué se supone que haremos con esa amenaza que recibiste? Cachorra, no quiero que algo malo te suceda.

ㅡNo pasará, tenlo por seguro. Por favor mamá, además, Jennie no tiene por qué saber esto. Si se entera lo más seguro es que me vaya a evitar.

Aquella mañana y con toda la inseguridad de su corazón, Chitthip tuvo que aceptar las palabras de su joven hija. Sin embargo, tomaría ideas precavidas, no podía quedarse sin hacer nada. Y es que al negarle a Lisa que se alejara de la omega, sabía muy en el fondo que la desobedecería.

¿Quién podría alejarse de su pareja destinada ahora que ya la encontró? La señora Manobal podía comprenderla, y estaba dispuesta a ayudar a la joven pareja, solo quería que todo esto pasara rápido, como si de una pesadilla estruendosa se tratase.

A veces tenemos que soportar las fuertes lluvias para poder apreciar el radiante sol.

A veces tenemos que soportar las fuertes lluvias para poder apreciar el radiante sol

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Treat you better | Jenlisa  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora