Beneficios de las viejas leyes

Capítulo 21: Confusión y engaño

Acomodándose detrás de su escritorio, Sirius suspiró y se frotó la frente. Conseguir que las fincas volvieran a tener una apariencia de orden fue un trabajo duro. Y la mayor parte era barajar papel, no era su pasatiempo favorito.

Pero si quería obtener influencia, que necesitaba incluso para tratar de involucrarse de alguna manera en la vida de Harry, necesitaba reparar la reputación de la Antigua y Noble Casa de Negro. Y poner las finanzas en orden era el primer paso que tenía que dar.

Visitar la fiesta mañana fue el segundo paso. No ir a este ritual de adopción hoy era una cosa con la que podía salirse con la suya, pero después de eso tendría que ir a los eventos celebrados por las familias de la sociedad.

Suspiró de nuevo. Parecía como si fuera su destino convertirse en todo lo que había deseado evitar. Oh, la ironía de todo.

Levantó la mirada del contrato que estaba en el escritorio frente a él y lo dejó vagar por la habitación. Todo estaba cubierto con el polvo de diez años. Las telarañas abarcaban la distancia desde la pared hasta los estantes, desde el techo hasta los candelabros. Y las otras habitaciones no estaban en mejor forma. Todo lo que era de algún tipo de tela necesitaba ser reemplazado, algunos de los muebles tenían insectos, y no solo del tipo mágico.

Era obvio que Kreacher simplemente ya no era capaz de cuidar la casa adecuadamente. Necesitaría encontrar otro elfo.

Molly venía algunos días de la semana, pero como él había echado a la Orden de su casa, y Hermione y los Weasley habían regresado a casa, ella venía con menos frecuencia. ¿Y por qué debería culparla? La familia Weasley todavía se aferraba a Dumbledore, y como Grimmauld Place ya no era la sede de la Orden, ya no era una prioridad volver a poner la casa en un estado habitable.

Sirius suspiró de nuevo y se puso de pie cuando escuchó que la puerta de la casa se abría y sintió que su amigo pasaba por las salas.

"¡Remus!", Saludó al hombre lobo cuando entró en el estudio. "¿Cómo está mi mejor amigo hoy?"

Con una amplia sonrisa, el hombre de cabello arenoso entró en la habitación y cerró la puerta detrás de sí mismo. "Como estamos entre lunas en este momento, me siento bien". Mirando las pilas de pergaminos, Remus volvió su sonrisa ligeramente burlona a su amigo animago. "¿Y cómo hace Lord Black con su papeleo?"

El Señor en cuestión gimió. "No me lo recuerdes". Se dejó caer en la silla de nuevo y echó la cabeza hacia atrás. "Acabo de descubrir que este viejo contrato de compromiso que el padre había establecido para el pobre Regulus". Sentado más derecho, Sirius miró a su viejo amigo de la escuela a los ojos. "Y eso me hizo pensar. ¿Hará algo así para Harry? Es probable, ¿no?"

Esperando una respuesta negativa del otro hombre, y sabiendo que no obtendría una, Sirius miró debajo de su largo flequillo a Remus, quien se sentó en una silla al otro lado del escritorio.

"Por lo que he visto hasta ahora, educa a Harry como cualquier otro heredero de una Casa con un asiento en el Wizengamot. Así que es probable que arregle un matrimonio para Harry". Remus se inclinó sobre el escritorio, su mano tocando la otra en un brazo. "Pero él lo cuida bien". El arrepentimiento y la repulsión rápidamente persiguieron la cara del hombre lobo. "Es difícil de admitir, pero creo que Harry ahora vive en mejores condiciones que con Petunia y su esposo".

Ambos hombres se sentaron en silencio durante varios momentos.

Sirius tenía que estar de acuerdo con Remus, era difícil admitir que He-Who-Must-Not-Be-Named se estaba comportando con más decencia que Petunia y Vernon Dursley. ¿Un Señor Oscuro más humano que dos muggles? Realmente era demasiado para soportar.