Beneficios de las viejas leyes

Capítulo 99: Secuelas

Miércoles, 24 de abril de 1996

Con un grito de sorpresa y pánico, Harry se sentó en su cama en el ala del hospital. A menudo dormía poco durante el día. Una de las razones por las que no luchó mucho contra el hecho de que lo obligaran a quedarse en cama hasta el final de la semana.

Pero ahora su corazón se aceleraba, como si hubiera tenido una pesadilla, y tenía una sensación claramente incómoda. Como si algo malo estuviera a punto de suceder.

O había sucedido.

Ni siquiera era el almuerzo todavía, así que Harry cerró su libro de historia, uno de esos libros que casi lo mantenían dormido en ese momento, lo colocó en la mesita de noche y sacó su espejo para llamar a su padre. Maldita sea la sesión de Wizengamot, tenía que hablar con Sorvolo para asegurarse de que estaba bien.

ooOoo

Lo primero que notó Sorvolo fue que tenía frío. Luego sintió la superficie dura sobre la que probablemente estaba acostado y escuchó a mucha gente a su alrededor.

Parpadeando lentamente, Sorvolo se movió para sentarse, pero una mano firme sobre su hombro se lo impidió.

"Quédese abajo, por favor, Lord Slytherin." Ese era Severus. Sorvolo movió los ojos hasta que se posaron en el pálido rostro del Maestro de Pociones. "Había veneno en la hoja, y hasta que sepamos cuál era ese veneno, el bezoar es solo una medida provisional. No es una solución. Así que, por favor, mantenga su ritmo cardíaco lento y evite moverse demasiado".

Un bezoar explicaría claramente el sabor bastante repugnante que llenaba su boca. Así que Sorvolo hizo lo que se le ordenó, retrocediendo y relajándose en el banquillo. —¿Está asegurado?

"Eso es," contestó Severus, mirando hacia otro punto de la cámara, lo que provocó que Sorvolo girara la cabeza en esa dirección también, justo a tiempo para ver cómo un Amos Diggory luchando y gritando, aunque silenciado, era arrastrado hasta el borde de la habitación por un par de aurores.

Al menos un problema solucionado.

—¿Señor Príncipe? Sorvolo solo pudo ver las túnicas de auror aparecer detrás de Severus cuando se giró para mirar a la persona que se detenía detrás de él. "Hemos tomado fotos y muestras de la hoja, y lanzamos el amuleto de huellas dactilares. Madame Bones dijo que se lo diera a usted como el mejor experto en la identificación de venenos en el lugar. También dijo que puedes usar el laboratorio del Departamento de Aurores".

Hubo un rápido destello de luz de colores, tal vez algún tipo de encantamiento de estasis, antes de que Severus comenzara a hablar de nuevo. —Trae a lord Lestrange, por favor. Sonaba como si Severus tuviera la intención de jugar a ser la madre gallina.

—¿Ha notado algún síntoma, lord Slytherin? —preguntó Severus a continuación, una vez más agachándose junto al banco que era el lugar de descanso de Sorvolo.

—No. —respondió Sorvolo, sacudiendo cuidadosamente la cabeza—. "No hasta que terminó la pelea y me desmayé. Pero ni siquiera me di cuenta de que no logré esquivar el cuchillo por completo. Así que no creo que pueda dar una respuesta útil". Había unas elaboradas yeserías en el techo, que Sorvolo no había notado hasta ahora, y delicados remolinos de color. Qué cambio de perspectiva podría visibilizar. Asombroso. "Pero mi concentración parece estar sufriendo". ¿Por qué, si no, estaría reflexionando sobre el yeso y la pintura?

"Entonces analizaré el veneno rápidamente". Severus se puso de pie y dejó espacio para otro mago, que se inclinó para que Sorvolo pudiera mirarlo desde donde todavía estaba trabajando para mantener la calma. "Informaré al sanador Greengrass. No lo pierdas de vista, por favor, lord Lestrange. Y Severus se había ido.