Tu eres mía... [Tom Kaulitz]

Cap 14 - Feliz

Estaba en un lugar oscuro donde había pasto y arboles.

Camine mientras sentía frío, mire mis pies estaba descalza, mis manos estaban moradas no lo se.

Seguía caminando hasta que escuchaba esa voz.

-¡Tu eres la culpable de todo!.

Esa maldita voz que en todas mis pesadillas esta, no puedo reconocerla solo se que esta ahí.

-Tu lo mataste! TU LO HICISTE!

Su voz se hacía mas fuerte como si me estuviera hablando a mi oído me agache mientras tapaba mis oídos pero seguía escuchándolo.

Luego escuché golpes y mas golpes como de una puerta...

-¡Dios!.- Me desperté de golpe en el sofá, vi que me había quedado dormida en mi sofá cuando escuchó la puerta sonar.

Estaban golpeando pero me extrañaba que eso pasara así que me levante frotando mis ojos para abrir la puerta cuando la abrí había un hombre con traje.

-TU LO MATASTE!

-¡Joder!.- Grité de nuevo con mi respiración agitada, esta vez me tocaba el cuerpo para saber si realmente estaba despierta cuando escuché.

-¡Layla soy Tom!.- Detrás de la puerta.

Me levanté y abrí la puerta mientras cerraba los ojos para no encontrar al tipo de traje.

-¿Que, acaso soy muy brillante para ti?.- Dijo la voz que quería escuchar.

Suspire.- Tom.. Pasa..- Dije corriéndome a un lado.

-Gracias.- Dijo pasando.

Suspire de nuevo cerrando la puerta viendo a un Tom sentado en el sofá.

-¿Que se te ofrece?.- Pregunté

-Quería venir a verte, no tengo tu numero así que solo vine a verte.- Dijo mirando a todos lados.

-¿Desayunaste?.- Pregunté mientras iba a la cocina.

-Solo comí una manzana ¿Porque?.- Habló mientras hacía una cara de confusión.

-¿Quieres ir a desayunar?.- Hice una pausa.- Quiero salir de aquí y distraerme.- Dije pensando en la pesadilla.

Tom se acercó a mi mientras tocaba con sus manos mis hombros.- ¿Estas bien? te veo asustada.

-Solo...- Trague saliva.- Tuve una pesadilla es todo.

Sentí los brazos de Tom atrayéndome a el mientras me abrazaba con sus firmes brazos, correspondí al abrazo tocando su espalda ya que si había una diferencia de altura.

-Si eso quieres, vamos a desayunar algo.- Dijo acariciando mi cabello.

-Si eso quiero, solo contigo.- Dije calmada.

El estar con Tom me tranquilizaba era como mi refugio quería darle una oportunidad por su gran muestra de amor pero me daba miedo salir herida de nuevo.

-Iré a arreglarme ya vengo.- Dije soltándome de su abrazo para ir a la habitación.

Ya estando en la habitación, me saque el pijama mientras buscaba la ropa que me pondría.

-Layla te llego un mensaje...-Dijo mientras se quedaba mirando.

Rápido reaccione tapando mi cuerpo con una toalla que tenía cerca.- ¡Tom, toca antes de entrar!.- Dije con la toalla en mi cuerpo.